¿Maestra Romanoff? ; scarletwidow / Wandanat

7° [NATASHA]

Camino en dirección a Clint luego de una larga jornada de trabajo. Necesito preguntarle a él sí ha oído algo sobre... Mi compromiso.

Para mi desgracia no lo encuentro, pero a quien si me encuentro es a Maximoff junto a Hela Odinson.

Oh, ahora entiendo por que la defendió aquella vez. Siento que es algo mayor para ella... Wanda debe tener unos... ¿17? ¿18? Hela tiene 22.

Necesito una excusa para poder hablarle a Wanda y saber sí puede mantener... Mi secreto.

-¡Hela! - Hablo rápidamente. - ¿Podrías hacerme un favor? - La pelinegra se acerca. - ¿Podrías ir a dejar ésto donde el director Stark? - Le entrego un libro con algunas notas.

Es para un proyecto especial en el que trabajamos. La pelinegra asiente y camina rápidamente hasta tomar el libro. Se aleja y Wanda la espera.

-¿Wanda? - La castaña me observa. - ¿Podemos hablar? - Asiente. - ¿Puedes venir unos segundos?

Ella observa el camino por donde Hela se fue.

-Ehm, ¿no puede ser aquí? - Muerde su labio inferior y asiento.

-Sí, es sólo que... Es sobre... - Bajo cada vez más el tono de voz. - Sobre mi compromiso. - Susurro y ella eleva una ceja.

-¿Sobre qué?

-Mi compromiso...

-Ah. - Gira los ojos. - ¿Qué pasa con eso? - Eleva una ceja y muestra una sonrisa burlona - ¿Se arrepiente y ahora quiere asesinarla? No sé que impresión le di, pero claramente eso no es mi fuerte. - Se encoge de hombros.

-No, no... Es el amor de mi vida, no podría...

-¿Nos reunimos para que me cuente su vida? Maestra, tengo tareas. - Sus ojos me observan fijo.

Su mirada es realmente penetrante, fría, calculadora tal vez... Lo que me hace creer que cada paso que da es premeditado. ¿Por qué siento que está tan lastimada?

-¿Dirá algo más o se quedará mirándome los ojos? Ya sé que tengo una mirada encantadora, pero primero me habla de su prometida y ahora no deja de mirarme... - Gira sus ojos y me sonrojo. - Sí busca un trío, tampoco soy de esas, pero apuesto que consigue a alguien. - Palmea mi hombro y yo mantengo firme el maletin que cargo entre mis manos. - Que extraños gustos... - Murmura y yo la miro espantada.

-No, Wanda. - Rasco mi sien y ella ríe levemente.

-Es una broma. Debería relajarse, es muy joven y bonita como para arrugar tanto su expresión. - Murmura y noto que se sonroja.

Así que... Soy bonita, ¿eh?

-¿Bonita?

-Es una expresión. - Aclara su garganta. - No crea en todo lo que le dicen, regla básica de la vida... ¿Nunca se la enseñaron de pequeña? - Murmura nerviosa y evita mi mirada. Suelto una risa y ella parece relajarse. - ¿Qué va a querer? Hela puede venir, no quiero que se haga ideas que no son.

-¿Ideas que no son? - Elevo una ceja. - ¿Qué ideas podría hacerse?

-¿Me dirá que quiere? - Wanda sigue observando el camino de Hela e ignora mi pregunta. Giro mis ojos y la veo elevar una ceja. - No me gusta que me hagan eso, maestra. ¿No le enseñaron que es de mala educación?

-Lo haces todo el tiempo y.. ¿No te gusta? - Elevo una ceja y ella no deja de observarme fijo. Intenta intimidarme. Paseo mi lengua por mi boca y luego lamo mis labios, aparta la mirada.

Esa es una gran técnica para que la gente se sienta nerviosa.

-No es su asunto. - Ríe un poco y se encoge de hombros.