¿Maestra Romanoff? ; scarletwidow / Wandanat

17° [WANDA]

Al salir del salón en lo único en lo que puedo pensar es en Natasha.

Se veía realmente linda hoy, ¿o era sólo yo quién lo notó?

La noche anterior con Yelena fue buena, y realmente aproveché bastante la situación... Por una parte Yelena es... Preciosa, increíble, no lo sé, pero por otra parte... Pretendía que Romanoff supiera.

Una mínima parte de mí quería que Romanoff sepa y... Ver sí... Bueno, es una estupidez creer que se pondría algo celosa... Supongo que sí, pero no por mí, es decir, es su hermana pequeña.

Pequeña y sexy, sin embargo... Menor de edad y una potencial demanda de acoso sexual, por lo que Yelena queda fuera de mi límite.

Aunque... Sí Natasha no estuviese comprometida, tal vez... Sólo tal vez y con algo de alcohol en la sangre... Besarla no me parecería una locura.

-¿Wanda? ¿Podemos hablar? - Hela está de pie frente a mí. Giro los ojos e intento pasar, ella me detiene. - Cariño, por favor...

Intenta acariciar mi mejilla y me alejo.

-Déjame en paz.

Intento pasar nuevamente y vuelve a detenerme.

-Wanda. Sé razonable, anoche estábamos bebidas, dijimos cosas que no queríamos y...

-Te acostaste con mi hermano y querías hacer lo mismo conmigo.

-Estaba ebria.

-No justifica el daño que le hiciste a Pietro, y a mi relación con él.

-Ya, pero... - La alejo y trato de caminar. Toma mi brazo con fuerza. - Deja de comportarte como una cría.

-Te dije que me sueltes o te romperé la puta cara, Hela. No bromeo. - Gruño rápidamente.

¡¿Quién coño se cree?! Nadie intimida a Wanda Maximoff, menos una engreída de veinti tantos años.

-Inténtalo, bonita. No te irá bien. - Sonríe. - Hablemos.

-Joder. Te dije que no. - Intento soltarme de su agarre pero ella aprieta con fuerza mi muñeca.

-Wanda... Escucha...

-Te dijo que la sueltes.

Me giro en dirección de aquella voz. Romanoff está de pie junto al maestro Barton.

-Maestra ésta conversación es entre mi novia y yo, le agradecería que no intervenga. - Hela gira sus ojos antes de dirigir su mirada nuevamente a mí. - Vamos al auto.

-Ex novia. - Mencionamos Romanoff y yo al unísono.

La observo con detenimiento. Su mirada es distante.

-Déjame, Hela. No quiero hablar contigo sobre nada, ya está.

-Hela Odinson, suelta a Maximoff o me veré en la obligación de amonestarte.

Hela bufa y me suelta.

-Ésto no ha acabado aquí. Nos debemos una conversación. A mi nadie me deja, Maximoff. - Murmura apuntandome. Se gira y desaparece del pasillo.

Joder.

-¿Se encuentra bien, señorita Maximoff? - El maestro Barton se acerca y asiento algo decaída.

Creí que Hela era diferente, no es sólo el hecho de notar que me enamoré de una persona completamente diferente, toda la vida la idealicé, y terminó por ser una persona repugnante.

-¿Todo bien, Wanda? - Romanoff me observa. Sus ojos verde azulado se cruzan con los míos y asiento.

-Sí, maestros. Gracias... - Murmuro antes de presionar la correa de mi morral y salir rápidamente del pasillo.