my favorite crime

capítulo 1

Hoy, tres de junio es el día. El supuesto día en el que Amelia se convierte en una "señorita" por el simple hecho de cumplir 15. Es una tradición que ella considera de alguna manera estúpida pues hay gente de su edad que aún es demasiado inmadura para ser introducida al mundo, como se hacía antiguamente. Amelia no era como esas personas. Ni ella sabe por que pero siempre ha sido de las personas más maduras para su edad, según los comentarios de adultos cercanos como profesores o familiares. Antes no era así, pero a partir de los 9 años empezó a ser protectora con los amigos nuevos que hacía por alguna extraña razón. Hoy en día, varios de sus amigos le dicen de apodo "mamá" pues los cuida como una. Eso sí, la peor pesadilla de Amelia es llegar a ser parecida a sus padres de modo que su rol como "mamá" en su grupo de amigos lo hace más relajado a comparación de la manera en que la criaron.

Hoy, con 15 años apenas cumplidos, lo que hará no será una fiesta grande, pues no es de su estilo. Más bien será una pequeña ida al cine y a comer con sus amigos de varios lugares.

-Ok pero ahora sí yo no soy la que va a pagar.- reclamó Amelia

-Hay pero si nadie trae dinero wey.- respondió Grazia.

Grazia era una persona que Amelia no conocía hace más de unos cuantos meses, pero se llevaron bien en cuanto se conocieron. De todos modos, era difícil que Amelia confiara en alguien rápido de modo que no le contaba casi ninguno de sus secretos a Grazia. Esto no afectaba la amistad.

-Somos pobres y tu eres la rica, vas tu.- se unió Alejandra a Grazia.

Alejandra era un año menor que Amelia y Grazia. Ella había crecido en un ambiente en el cual tenía mucha libertad pues su padres realmente nunca la presionaban a muchas cosas, además del deporte que todos en este grupo de amigos practica. Ella lo veía como independencia, pero Amelia reconocía que sus padres no le ponían atención, entonces el afecto de Alejandra hacia Amelia realmente era como el de madre-hija.

-Hay oigan no sean mal pedo con Amy, tipo es su cumpleaños y la estamos haciendo pagar.- contradijo Mauricio.

Mauricio es complicado. El es una persona que no se lleva con muchas personas pues juzga rápido pero correctamente a las personas, igual que Amelia. Mauricio es gay, y se le nota mucho. Amelia tuvo un pequeño crush en el cuando apenas se conocieron pero rápidamente lo dejó ir pues por su sexualidad. Mauricio, llamado frecuentemente "Mau" por sus amigos, se volvió muy amigo de Amelia demasiado rápido, pues ambos confiaban plenamente en el otro y se la pasaban, lo que en México llamamos "viborear", juntos todo el tiempo. Mauricio nunca ha tenido novio, pero se enamora de todos a velocidad luz.

-Tienen suerte de que mi mamá me mandó dinero extra para pagar por todos.- aceptó Amelia.

-Te ayudo con la cuenta, igual traigo algunos pesos.- acompañó Dalia.

Dalia es una masita. Lo que quiero decir es que es una persona que es muy dulce por dentro. No le haría daño a nadie y si alguien le hace daño de verdad se lo toma muy mal. Gracias a esto, Amelia se convirtió en su protectora del resto del cruel mundo. Ellas empezaron a hablar más un poco más tarde que con Grazia, pero nunca faltan las risas entre esas dos. Normalmente, Dalia siendo muy torpe se golpea o tropieza y Amelia re ríe y la ayuda a recobrar su compostura. Esas dos siempre hacen las cosas más tontas junto con Alejandra, y de vez en cuando Mauricio.

El grupo de amigos iba saliendo del restaurante cuando alguien captó la atención de Amelia. Ella se percató de un chico, que tenía apariencia amable, de ojos verdes con cabello castaño un poco largo pero no al punto de desesperadamente necesitar un corte de pelo. Él la volteó a ver de regreso y se alcanzó a ver una leve sonrisa, como si ya se hubieran conocido antes. Ella juraba que nunca lo había visto pero algo se le hacía familiar.

-Hey, ya te vi que estás ligando pero ese lo quiero para mi wey.- comentó Mauricio desprendiéndola del concurso de miradas con el extraño.- Ya vi que está guapo pero hicimos un trato, quien tenga pareja primero pierde.

Parte de la relación que Amelia y Mauricio mantenían era que constantemente tenían apuestas sobre diferentes cosas en sus vidas. En este momento, la apuesta era que quien se enamorara primero perdía la apuesta. Esta surgió gracias a que Amelia le contó sobre su amor platónico reciente a Mau y el la estaba ayudando a superarla y sin jugar con los sentimientos de otras personas.

-Ni lo estaba viendo, estaba checando si el mesero vio la propina. - mintió Amelia.