Caminé por alrededor de la escuela y tuve
una sensación extraña, sentía que alguien
me estaba mirando, pero ala mejor era nada
más mi imaginación, porque miraba a mi alrededor, y no veía a nadie. Y pensé qué
tal vez eran sólo las bebidas.Como tenía mis cigarrillos, decidí sentarme
en un banco cerca de un árbol. Estaba muy oscuro detrás de la escuela, cerca del jardín, estaba rodeado de árboles. Así iba a poder
fumar en paz.Roger: Pelirroja!?–alguien gritó–Aún no
me has dicho tu nombre...–me di la vuelta
y el hombre musculoso estaba como un
metro lejos de mi.Me levanté asustada y decidí salir de allí
lo antes posible, ese tipo era raro. En pasos
anchos, casi corriendo, salí de ahí, ya estaba
un poco más lejos de el. Pero no hizo mucho
bien ya que el otro hombre que también
estaba en la mesa, el más delgado, estaba
ahora frente a mí.Los dos vinieron hacia mí, uno a cada lado,
no tenía a dónde correr!Cesar: Cómo te llamas?–preguntó el qué
estaba delante de mí, me sujeto fuertemente
del brazo. Traté de huir, pero aunque el
se miraba borracho y sin fuerza , no podía escaparme. Tal vez yo estaba tan o más
borracha que ellos dos juntos–No me dirás
tu nombre, verdad? Pero sabes, realmente no
me importa...Yo estoy interesado en otra cosa.Dulce: Déjame ir!–grite, tratando
de golpearlo, pero luego él me abrazó
de una manera en que ya no podia mover
los brazos.El hombre mayor y más fuerte estaba más
cerca de mí, ahora parecía aún más grande
y aterrador. Yo qué iba a hacer? Gritar?No sería posible ya que el hombre más
delgado me empezó a besar, solo quedaba
una cosa más por hacer,mordí su labio
con toda la fuerza que tenía y pronto su
sangre invadió mi boca. Sentí una mezcla
de alcohol y sangre, eso hizo que mi estómago
se envolviera aún más. Me empujó a la hierba fuertemente, podía jurar que le había arrancado un pedazo de la boca. Se cayó boca arriba y
se golpeó la cabeza con fuerza. Me maldijo
entre los gritos de dolor y aproveché para levantarme y huir de ellos, pero el hombre
más mayor todavía me seguía, estaba muy
cerca de mí.Roger: No hay necesidad de huir, ven
aquí princesa!–gritó el enorme y musculoso hombre corriendo hacia mí.No podia correr, mis piernas no me obedecían.
El alcohol parecía haber tomado mis sentidos, cada paso que daba era muy lento, pero él no parecía tener el mismo problema que yo. Era demasiado rápido y en ese momento sabía
que era imposible huir.Cuando me tropecé y me caí en la
hierba, el hombre me alcanzó.Miles de cosas pasaron por mi cabeza en
ese momento. Estaba tratando de golpear
al hombre encima de mi.Las lágrimas cayeron de mis ojos y grité desesperadamente rogándole que se
detuviera. Nadie me escucharía. Estaba
lejos de donde estaba el baile y la música
era fuerte. El hombre estaba tratando de quitarme la chaqueta y subir mi vestido,
pero traté de detenerlo. Entonces comenzó
a besarme el cuello abruptamente y yo me paralicé, tenía mucho miedo.Christopher: Dulce!?–grito alguien.
Definitivamente esa voz fue la última voz en
que podía esperar.Estaba con los ojos cerrados esperando lo
peor, y cuando los abrí, el hombre ya no
estaba encima de mí.Me paré y vi que estaba peleando con
Christopher. El hombre de repente golpeó
a Christopher en la cara, casi derribándolo.
Yo, que hasta entonces estaba petrificada,
corrí hacia ellos y empecé a darle unas
bofetadas y un puñetazo al hombre. El
hombre intentó contenerme, para evitar
que lo golpeara, pero Christopher ya se
había levantado y le dio un puñetazo al
hombre en el estómago. Finalmente el
hombre cayó, y debe haber estado en un
dolor agudo, por su expresión.
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Te Odio Uckermann
RomanceEse era solo otro de los numerosos internados por los que ya había pasado, era solo otro del que sería expulsada. Lo que Dulce no esperaba es que, en la misma escuela, encontrara al hijo del mayor rival de su familia, y que, en consecuencia, se conv...