11- Nueva

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Lara Scott

Nos despertamos súper tarde, mi alarma no sonó y la de Maya tampoco, creía que las habíamos colocado mal o algo, pero lo importante era que íbamos a llegar muy tarde.

Apenas me desperté, levanté a Maya lo más rápido que pude, y en eso ella se metió a bañar. Justo cuando iba a entrar yo, me llegó un mensaje de Marcus diciendo que ellos también iban tarde y si queríamos nos vamos juntos. Le respondí que si y me metí a bañar enseguida.

Bajamos lo más rápido posible para encontrarnos a Matheo y Marcus esperándonos para irnos.

—¡Hasta que al fin bajan! —exclamó Marcus el cual segundos después se acercó a Maya para pasarle el brazo por los hombros y darle un leve beso en la cien.

—No fuimos las únicas en quedarnos dormidas, ustedes también, así que no pueden hablar —dije riendo un poco.

—Y Lara, la verdad no sé qué hiciste, pero me puedes explicar tu ¿Por qué Marcus llegó a la casa tan feliz anoche y estos dos están más juntos de lo normal? —preguntó Matheo un poco confundido.

—Al parecer no soy la única ciega aquí ¿Eh? —reí con ironía y el frunció el ceño.

—Pues anoche al fin confesaron lo que sienten y van a estar más empalagosos que nunca, acostúmbrate Mathew.

—Que no me llames así Scott.

—¿Quién comenzó con lo de mi apellido?

—Al menos yo vario, come gomitas.

Suspiré pesadamente con un poco de diversión —. Preferiblemente si son de limon.

—Bueno ya, dejen de pelear, parecen pareja ya de tanto que pelean y se le pasan juntos —pronunció Marc rodeando los ojos.

Pensé que lo que dijo Marcus iba a poner un poco incómodo el ambiente, pero la realidad fue otra. Gracias a lo que dijo el, Matheo se giró y colocó uno de sus brazos alrededor de mis hombros. Después de dicha acción, su mirada conectó con la mía, pero la aparté por el hecho de que siempre me ponía nerviosa.

—Malo no sería —rio —. Pero bueno ya hay que irnos

Yo no dije absolutamente nada en el resto del camino, simplemente me fui con ellos.

Cuando entramos al salón y allí estaba Will sentado junto a Victoria, el hecho de verla aquí me dejó totalmente sorprendida ya que ella no era de esa clase.

—¡Maaath! —exclamó antes de lanzarse -literalmente- a los brazos de Matheo.

—Eh hola Will —saludé a Will alejándome un poco de ellos dos.

—Hola linda —dijo el y luego me abrazo, la verdad me agradó que lo hiciera en ese momento, no sabía el porqué, pero así era.

Cuando nos separamos le dediqué una leve sonrisa de agradecimiento. Hice un ademan de hablar, pero en ese momento Victoria me interrumpió.

—Adivinen a quien acaban de cambiar a esta clase —mi ojos se abrieron como platos al escuchar esas palabras.

Ay no, ahora lo menos que necesitamos es que esté la exnovia de Matheo aquí.

Primera vez que concuerdo contigo conciencia.

—¿En serio? —preguntó Maya mientras se desvanecía un poco la sonrisa que tenía desde que llegamos.

—Sii, es que los extrañaba demasiado, sobre todo a alguien y por eso pedí un cambio —respondió ella cuando su mirada cayó en Matheo.

—No pensé que volverías con nosotros después de todo lo que pasó —la confusión de Matheo era algo muy notable.

Sabía que estaba mal, no tenía el porqué, pero fue algo casi inevitable de decir.

—¿Qué fue lo que pasó?

Por suerte la voz del profesor me salvó de esa gran vergüenza que iba a pasar.

—¡Buenos días alumnos! —alzó la voz captando la atención de todos los presentes en ese momento.

Todos lo saludamos y fuimos a nuestros asientos, el día se me pasó super rápido, mas de lo habitual, tal vez porque ese día me concentré mas en las clases que en otra cosa.

Estaba escribiendo unos apuntes de la última clase, les dije a los chicos que me esperen en la entrada, cuando de la nada ví entrar en el salón a Victoria.

—Lara —habló con cierta seriedad —. Necesito hablar contigo de algo

—Emm ¿De qué? —pregunté enarcando una ceja.

—No quiero que te tomes nada de esto a mal —resoplo —. Lo que pasa es que ahora que volví a este salón todo será como antes de que me fuera y no quiero que te ilusiones.

—¿Eh? —hablé con incredulidad.

—Antes de que yo saliera de esta clase yo era la que salía con Matheo, Maya y Marcus para todos lados, y a veces Will se sumaba, es lo que tú haces ahora, y como volví, las cosas volverán a la normalidad, a como siempre debieron estar.

—Eso era todo, ahora me voy —batió su cabello el cual se encontraba en una coleta y salió rápidamente del salón.

Mi cerebro intentaba procesar todo ¿A caso me estaba diciendo que solo era un reemplazo? Yo no sabía ni que pensar, así que decidí salir por las puertas de atrás e irme sola a casa, quería pensar en todo eso, si creerle a Victoria o no.

Cuando llegué a casa subí de inmediato a mi cuarto, no quería hablar con nadie, y en eso Mike volvió a llamarme.

Inoportuno.

—Mike, la verdad no quiero hablar en estos momentos, y si, sé que hice mal al dejar que Maya te cortará el otro día, pero...

—Creo que esto de ser mejores amigos a distancia ya no va a funcionar —pronunció fríamente —

—Pero ¿Por qué? —no me sentí bien, y la tristeza en mi voz se podía notar fácilmente.

—Lo que escuchaste Lara, así las cosas, son muy difíciles. Tu misma has aportado a que esto no funcione, te aprecio, pero así no puedo seguir. Adiós —cortó la llamada sin decir más nada.

Odiaba el tener la confusión con dos chicos, también la confusión con Victoria, ya eso me había bajado los ánimos, y el hecho de que Mike viniera con esto no era algo que aportara mucho.

El siempre fue mi apoyo, quien creí que siempre iba a estar cuando nada mas lo estaría, por un momento si llegue a creer que la distancia lo acabaría, pero decidí creerle. Y por creerle terminé de esa manera. Cualquiera pensaría que era algo estúpido, pero en algún punto me sentí engañada.

Sentí como una lagrima fue bajando lentamente por mi mejilla hasta el labio, pude sentir lo salado de ella. No quería descargar mi rabia de otra forma si no era de esa.

Nota:

¿Yo de nuevo? Así es.

El próximo cap será narrado por dos personajes.
¿Adivinan quiénes son?

Ahora sí, hasta aquí mi reporte.

Mi Vecino ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora