Nueva identidad.

1.5K 153 84
                                    

No, no, no, no. . .

¿Porqué? ¿Cómo?

Saihara miraba con demasiada desesperación el como se había escapado su amado.

Golpeo la pared con algo de fuerza para salir de la casa y mirar para todos lados, de seguro ya se había logrado escapar, claro, ouma era alguien inteligente después de todo, seguía pateando la tierra. Escucho unos pasos acercándose, volteo con rapidez dándose cuenta de que izuru ya estaba enfrenté de el.

— ¡Ah! ¡Dios!

Se agarró el pecho mirándolo con algo se enojó y poder recuperar la respiración.

— Izuru~ No pensé que te volvería a ver~

— Era claro que nos tenemos que ver, que te estés escondiendo no es mí problema. ¿Qué haces aquí?

— Veras, me quería encargar de ouma. . . Pero veo que fue algo inútil. Tú que vienes de allá ¿No viste a ouma corriendo?

— No.

Respondió de inmediato, porque sabía que sí tardaba posiblemente el enano estaría en peligro, no sabía porque lo protegía. No sabía nada, simplemente lo estaba haciendo.

— Claro, tienes razón, tú acabas de venir, el se fue como a las doce de la noche de esta casa.

Saco un par de risas, seguía mirando al contrario dándose cuenta de que traía cargando con el a la detective en su hombro.

— ¿Porqué traes a Kirigiri ahí?

— Alguien quiere hacer algo con ella.

No quería decir el nombre de Junko, claro que al avisarle que la tenía aquella chica de coletas rosas se había emocionado demasiado.

— Ya veo~

— Como sea, sí vuelves a la escuela, tienes que volver decentemente, porque ya que ouma esta libre va a decir tantas cosas sobre tí y tienes que verte como que no hiciste nada.

Sin más que decir saco un gran suspiro pesado yéndose a la otra dirección, saihara entró inmediatamente a la casa. Claro, nadie le podría creer a ouma sí empezaba a contar a alguien todo lo que le había hecho.

Ya más tarde tenía que ir a la escuela, fue a darse un baño, se había puesto un uniforme de rayas y se había quitado su gorro.

— Oh ouma~ Serás totalmente mío~ Aunque tenga que actuar como alguien dulce y inocente y matar a todo el jodido salon.

Amame. . . ¡AMAME NADAMAS A MI!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora