Demon's Blood

Estoy sola

Shotaro

Nunca la había visto así, tan honesta conmigo. De verdad fui fuerte cuando me contó lo que le pasó, quería llorar mientras la escuchaba.

Odiábamos a Canek.

Lo único que pude hacer fue abrazarla mientras yo solo escuchaba, después se quedó dormida en mis brazos. Yo no era de consolarle, Yuta era el que lo hacía, nuestro mejor amigo ¿qué hubiese hecho él ante todo este sufrimiento de Alice?

Siento gran culpa. Desde que quise unirme a la policía militar condené a mis amigos. En su momento ni si quiera lo pensé, ahora no pertenezco al régimen por el cual mis amigos lucharon para que entrara y lo que les sucedió después fue trágico.

Era un egoísta, estaba celoso de que ellos lo tenían todo, creí que no perderían nada y los terminé perdiendo a ellos.

Si tan solo hubiese desistido del reclutamiento mi mejor amigo seguiría conmigo, Alice no hubiese sufrido y quizás el niño que tiene en brazos no sería del Capitán Levi sino de Yuta.

Quizás el Imperio sería nuestro enemigo en vez de aliado, porque la Legión no tendría idea de dónde haber buscado a Alice o ella ni si quiera hubiera despertado su instinto, aún sigo sin entenderlo por completo.

Pero no fue así y eventualmente iba a pasar, porque Alice aprovechó mi reclutamiento como su salida de las murallas.

Porque ella nunca perteneció aquí.

Siempre estuvo destinada a lo grande, quién diría que pertenecía a la nobleza de otra nación.

La puerta de la cabaña azotó detrás de mí, volteé hacia esta observando a una de las guerreras de Alice.

—Esto es una mierda—susurré mientras recostaba a Alice con cuidado sobre la manta junto a Damián—Todo esto es mi culpa, perdóname Alice, por favor...

Ni si quiera podía pedirle perdón a la cara, ella siempre se preocupó por mí, me cuidaba como a un hermano y ¿yo? Yo no pude hacer nada por ella, solo ofrecerle mi amistad y ni siquiera cumplí como debía.

No pude cumplir la misión que Levi me asignó, tuve que haberle reportado que Alice seguía en la Isla, ya habían pasado las 72 horas y no informé su status, pero tampoco había vuelto, espero que el capitán se de cuenta de mi razón de aún no volver.

Me levanté y caminé hacia las guerreras de Alice. Intenté ser amable, agradecerle a la otra guerrera por cuidar de Alice mientras peor la pasaba, pero ella no aceptó y gracias a las palabras de Dan entendí por qué.

Mi mejor amiga no solo había cautivado a mi mejor amigo, al Capitán, sino que a su guerrera también. No me sorprendía, ella no era la primera mujer que se enamoraba de Alice.

Volteé a Dan por sus palabras, sabía que mi hermana necesitaba a Levi, pero el plan que se rehusó a contarnos, incluso llevarla era un riesgo para todos, también podría salir herida.

—¿Ir con Levi?—pregunté nervioso ante la propuesta de Dan, ella asintió mirándome—Tal vez pueda traerlo...

—Ugh, la mocosa tiene razón—gruñó Yamil molesta mirando a Dan—Alice necesita a Levi, también el gusano debe ver a su padre, no hay tiempo de traerlo, ella debe ir con él—bufó sin apartar la vista de su compañera.

Solté un suspiro.

—La ubicación de Levi es confidencial, tenemos a Zeke y aún no sabemos el plan de los hermanos Jaeger—dije mirándolas, Yamil al fin volteó a mí.

—¿En serio tu aclamado Capitán no abandonará su misión aunque su...—Yamil miró a Dan con ironía— amada esposa y pequeño hijo lo necesiten?—preguntó con sarcasmo sin apartar la vista de su compañera.