𝐉𝐚𝐮𝐥𝐚 𝐲 𝐋𝐢𝐛𝐞𝐫𝐭𝐚𝐝 |𝐂𝐲𝐂²| 𝐋𝐞𝐯𝐢×𝐎.𝐂.×𝐂𝐨𝐥𝐭 𝐆𝐫𝐢𝐜𝐞

Cap. 60: "Familia"

—Lo lamento mucho. —murmuró Hange. —Entonces, ¿los guerreros de Marley te mantuvieron encarcelada?

Saya asintió. Levi sacó las llaves de su bolsillo y abrió la celda de Saya entrando hasta ella. Hange no lo detuvo solo se quedó mirando a Colt que se removió tenso al ver que el Capitán entraba a la celda de Saya. La chica retrocedió rápidamente al verlo acercarse.

—Ellos te mantuvieron prisionera. No puedes confiar en ellos. —Saya frunció el ceño y Levi avanzó más hasta ella. —Saya, necesitas entenderlo. Tú misma nos estás diciendo que te tenían encerrada.

—Sal de la celda, Ackerman. —la chica mantenía los puños apretados. Después de diez meses ahí estaba él. La jodida persona que la había destrozado. —No te metas en mis cosas.

—Son nuestr-... —apretó los labios observándola y suspiró intentando no perder la calma. —¿Conoces sobre el síndrome de Estocolmo?

Hange y Colt abrieron mucho los ojos sabiendo que Levi la había cagado. Saya alzó las cejas y dio un paso tomando de la camisa al Capitán acercándose amenazadoramente.

—¿Qué pasa, Levi? ¿Te acostumbraste tanto a verme rota que ahora que estoy bien, crees que tengo un síndrome? —apretó más el agarre y lo miró con odio. —Sé perfectamente lo que es y no. Déjate de mierdas.

—Ellos te tenían encerrada, necesitas entenderlo.

—Ellos me cuidaron.

—Por dios, Saya. ¿Te das cuenta de lo patético que suena que digas que tus captores te cuidaban? ¡Aquí te estuvimos cuidando todo este tiempo!

La chica lo soltó y retrocedió. Levi no tenía idea de cuánto la había cuidado Colt, de cuanto había curado el corazón que el mismo destrozó.

—Vete. Vete ahora. Eres la persona menos indicada para decir que me protegió. —el Capitán la miró dolido y se acercó hacia ella. Saya retrocedió hasta quedar acorralada contra la pared. —A-aléjate.

—Yo te he estado esperando. —susurró. —Estos diez meses te he estado esperando.

Saya sintió como su pecho comenzaba a arder, Levi intentó subir sus manos a las mejillas de Saya pero ella negó rápidamente.

—Hange sácalo de aquí. —sus ojos se cristalizaron. —No quiero hablar con el Capitán Ackerman.

—Saya por favor. Tenemos que hablar. —murmuró Levi. ¿Cómo no podrían arreglar las cosas luego de pasar diez meses solo pensando en ese día? —Nosotros...

—No, ya no hay nada que hablar, Ackerman. Cualquier cosa respecto a la Legión la tengo que hablar con Hange. Y-... ya no no hay ningún nosotros. Vete.

Levi la miró largos segundos y negó con la cabeza. ¿Por qué era tan difícil intentar arreglar las cosas?

—Necesitamos arreglar nuestros problemas, Saya.

—Basta. —susurró la chica sintiendo una fuerte punzada al igual que el azabache.

—Levi, vámonos. —murmuró Hange mirándolos.

—¿No está escuchando, Capitán? —gruñó Colt acercándose a la reja. —La chica le está diciendo que no quiere hablar con usted.

Levi miró con furia hacia la pared que los separaba y luego volvió su vista hacia Saya que negó.

—Ni se te ocurra. Solo conseguirás que te odie más.

Levi frunció el ceño y se acercó tanto que sus respiraciones se mezclaron.