BEFORE DAWN;Eren Jaeger × Lectora.

12.

—Annel, abre soy Mikasa. Te tengo una noticia

Mi puerta era tocada fuertemente por Mikasa quien al parecer venía muy entusiasmada.

—Eren,despierta es Mikasa. Sube a la habitación—golpee su hombro para hacerlo despertar, estábamos en la sala principal desnudos. Lo último que recuerdo fue que bebimos y bueno, el mejor sexo—EREN!!—grité fuerte haciendo que despertara en un instante.
—Yo no fui. Fue Mikasa—se defendió despertándose,al parecer estaba soñando.
—Si es Mikasa. Sube, no querrás que te vea así desnudo ¿o si?—lo bese poniéndome de pie y colocandome mis bragas y la camisa de el.
—Tienes razón. Iré arriba—se levanto tomando su bóxer y antes de que subiera al cuarto le di una nalgada a ese bello trasero redondo que tanto me encantaba. El simplemente se rio y subió, abrí la puerta encontrándome con Mikasa algo molesta.
—Hola buenos días—sonrei abrazándola.
—Tardaste mucho en abrir—entro cerrando la puerta y sentándose en unos de los sillones.
—Lo lamento. Estaba dormida.
—¿Dormida?¿en el sillón?—encarnó la ceja.
—¿Porque debería estar dormida en el sillón?—de su trasero saco mi brassier negro, se había sentando encima—Ay,bueno si tuve sexo con Eren en el sillón y estábamos tan cansados para subir a nuestra habitación. ¿feliz?.
—¿Estoy sentada en donde tuvieron sexo?—pregunto aterrada.
—Posiblemente—rei.

Aventó mi brassier a mi cara mientras reía, amaba tenerla en casa. Me recordaba a una hermana menor.

—¿Y que es lo que querías decirme?
—Oh cierto—recordó y levanto su mano derecha enseñándome un anillo.
—Oh por Dios. ¿En verdad?¿Es real?
—ME VOY A CASAAAAR!!!—grito de alegria y ambas nos levantamos para abrazarnos fuertemente.
—Mikasa que alegría preciosa. Muchas felicidades. ¿Ya lo saben todos?—pregunté emocionada.
—Solo falta Eren. Quiero que el sea quien me lleve de la mano hacia el altar—sonrió a más no poder.
—Claro que lo hará. Estoy tan feliz por ti cariño. Te mecere los mejor del mundo—tomé sus manos con cariño.
—Aprecio que estés feliz por mi, como todos. Ahora solo falta Eren de saberlo.
—¿Saber que cosa?—Eren venia bajando las escaleras bañado y con ropa limpia, su cabello aun estaba mojado y suelto—¿Porque tanto alboroto?.
—Mikasa tiene una noticia para ti y una petición que no puedes negarte cariño—mencione poniéndome a lado de ella.
—De acuerdo. Habla Mikasa.
—Voy a casarme con Jean y quiero que tu seas el que me entregue a el. Quiero caminar hacia el altar contigo.

El rostro de Eren podía ser difícil de descifrar. Podía estar enojado,impactado, sorprendido. No lo sabía, pero sus ojos se dilataron al escuchar que su amiga, su hermana se iba a casar y el sería parte del momento más significativo de su vida.

—¿Que dices?—preguntó Mikasa algo nerviosa por su respuesta.
—Me gustaría hablar con el, y a tu petición. Sabes que no me negaría a una cosa asi—una sonrisa se iluminó en sus bellos labios y Mikasa se lanzo hacia el abrazándolo fuertemente.
—Sabía que lo harías. Armin sabía que estarías de acuerdo. No podía hacer esto sin ti Eren. Eres mi mejor amigo.
—Sabes que tu la mía—sonrió y beso su frente como símbolo de protección y eso hizo que mi corazón se llenara de felicidad.
—Bueno. Debemos celebrar esto, no todos los días se casa una amiga—sugeri feliz.
—Claro. Hoy iremos a un restaurante que Jean y yo reservamos. A las 9. Así que los veo más tarde. Y no lleguen tan tarde, y deje de tener sexo cada que se miran—amenazó divertida.
—No te lo prometo cariño—dije riendo mientras ella salía de la casa y mire a Eren quien estaba pensativo mirando hacia la nada—¿Pasa algo?.
—No. Bueno, no lose—se dejo caer en el sillón suspirando.
—¿No estas feliz por Mikasa?.
—Claro que lo estoy. Es solo que, es mi hermana prácticamente y tengo miedo que se esté apresurando tan rápido. No quiero que salga herida. Solo es eso—confeso tomando mi mano y besándola.
—Mírame amor—giro su rostro y en sus ojos pude ver una mezcla de tristeza y felicidad—Ella es una mujer fuerte y valiente, todo lo que me contaste sobre ella es prueba suficiente de que ella sabe lo que hace y lo que quiere en su vida. Merece tener a alguien que la ame y la cuide,y no esta de más que la protegan. Ella siempre será tu persona,tu mejor amiga y hermana. Casada o no casada, ella pedirá ayuda a sus dos hermanos,y deben estar para ella siempre. Debes estar feliz y agradecida que te pidiera ser quien la lleve al altar.
—¿Y ella no me dejara verdad?¿ni tu me abandonas?—preguntaba como niño pequeño con miedo.
—Estará conmigo, contigo, con nosotros. Mi amor, ella no se alejara de ti. Ella te adora y te ama, y te pedirá que estés con ella para siempre—acaricie su rostro limpiando una pequeña lágrima salir de sus ojos para abrazarlo como si fuera un niño pequeño.
—Mamá estaría tan feliz de verla vestida de novia.
—Y orgullosa porque su hijo la entregará—acaricie su espalda y su cabello.
—Te amo tanto Annel. No me dejes nunca por favor.
—Jamás lo haría.

Cerré mis ojos intentando no llorar, hacer aquella promesa me resultaba difícil de cumplirla. Podía ser la última vez que pudiera abrazar a Eren de esta manera, pero mientras respire,yo protegeré a mi gente. Incluso si debo morir.
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Ver a mis amigos disfrutando de la cena en el bello restaurante, y Mikasa tan feliz sujetando la mano de Jean después de proponerle matrimonio, me llenaba de paz y alegría. Estas personas son la razón por la que estoy eternamente agradecida de salir de aquel maldito negocio. Pero,la noticia que se dio hace un mes en donde se confirmó que Gustavo había escapado de prisión,no me había dejado dormir por días. Despertaba cada hora para ver a Eren, y solo podía pegarme a su cuerpo para que me abrazara fuertemente.
No podía pensar ni comer, la sola idea de que el ya estuviera buscándome me hacía estremecer. Era como volver a mi pasado, era volver a la edad de 15 años cuando comencé a esconderme, pero ese maldito me atrapó, y me hizo convertirme en lo que fui.