T2 13.

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Entramos y todos estaban en la sala callados

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Entramos y todos estaban en la sala callados.

—¿Que paso?¿Le paso algo a Adriana.—pregunté asustada.
—No para nada—dijo Armin.
—¿Entonces porque esas caras largas? Bueno, más bien ¿porque Eren esta asi?—dijo Mikasa.

El solo ignoro la pregunta y se fue a su cuarto azotando la puerta. Los mire a todos extrañada por su actitud.

—¿Que le pasa?—pregunté alzando la ceja.
—Vio el beso—dijo Historia.
—¿Cuál beso?—pregunto Sasha.
—El tipo me beso así de la nada, pero lo puse en su lugar—afirme sentándome a lado de Historia.
—Creo que se puso celoso—dijo Armin dándome un trago de tequila.
—No entiendo el porqué—murmure y todos se quedaron callados y mirándose entre sí—Iré a ducharme.

Tome de golpe el tequila y tome mis tacones para subir a mi habitación, me percate que Eren estaba en el balcón fumando. Me quedé callada observándolo detenidamente. Tenía más tatuajes, su espalda más ancha que antes, aquellos brazos más fuertes y su cabello largo era hermoso. El era hermoso, para mi era un Dios. Verlo así de espaldas y sin camisa hacia que mi imaginación volará y sintiera mis mejillas arder. Estaba algo tomada y me di fuerza para hablar con el. Caminé para ponerme a lado suyo viendo como sacaba el humo por la nariz.

—¿Estas bien?—pregunté sincera y el volteo su rostro hacia mi.
—¿Deberia importante como me estoy?.
—Eres el padre de mi hija, y siempre quiero que estés bien Eren—dije sincera.
—Ya que lo mencionas. No,no estoy bien. Estoy que me lleva la chingada María—dijo apretando sus puños terminando de fumar su cigarro.
—Se que esta operación es fuerte. Todos estamos estresados, encerrados y estamos de mal humor Eren, se lo que sientes. Lo entiendo.
—No,no entiendes nada. Es decir, luego de 10 años llegas y me entero que tengo una hija,una hija que no pude estar presente cuando pronunció su primera palabra, cuando le salió su primera diente,ni siquiera cuando comenzó a caminar. No estuve ahí María, no estuve contigo sonriendo mientras acariciaba tu vientre para cantarle a mi hija. ¿Sabes lo que pasó después de aquel día que llegamos a Rumania?. Comencé a beber, y meterme cuanta porquería me ofrecían. Cogia con miles de mujeres tratando de sanar el dolor de tu "muerte". Armin ni Mikasa te dijeron pero estuve 4 veces hospitalizado por intoxicación de sustancias. Deseaba morir para estar contigo. Era un puto desastre. Fui tan malo con ellos que no se como se quedaron a mi lado todos estos años. Diablos,ni siquiera pude llevar a Mikasa al altar porque yo estaba tirado en el baño de mi habitación drogado. El día que murió la hija de Armin yo estaba igual de drogado. Solo supe que su hija se llamaba igual que tu. ¿Como diablos siguen queriéndome después de ser una mierda de hombre?¿como?. El verte aquí, vestida así y ver como ese tipo te beso me hizo hervir la sangre y no debería. Porque yo..
—Eren—tomé su rostro para que me mirara—Tu no eres una mierda de persona. Jamás lo seras ni lo eres. Eres el hombre más increíble que eh conocido en toda mi maldita vida. Todo fue mi culpa,yo te hice esto y no sabes cuan arrepentida estoy. ¿Tu crees que fue facil para mi?. Dejarte ir era como si en realidad hubiera muerto, pero no podía arriesgaste más. A nadie. Pero tampoco podía derrumbarme no después de que me enteré de mi estado. Te hice mucho daño Eren. No sabes cuantas noches llore por haberlo hecho, cada noche después de acostar a Carla,lloraba como niña pequeña. Pero tenía que ser fuerte no por mi,si no por ella. Porque al verla te veía a ti. Esos ojos,esa sonrisa y esa fuerza. Incluso cuando ella se enojaba me recordaba a ti. Ella era la razón por la que no podía dejarme caer. No hubo nadie más que en ella en mi corazón. Jamás estuve con alguien por que no lo necesitaba—quite las lágrimas de sus ojos tratando de calmarlo—Tu eres..El hombre..que siempre eh amado. Jamás deje de amarte Eren..—murmure con dolor.
—¿Y porque no me buscaste?¿porque no buscarme y explicarme todo?—pregunto como niño pequeño tratando de entender.
—Por qué necesitaba alejarte de mi vida. Tu mismo lo has dicho. Soy una desgracia a quienes amo, y mira donde esta ella por mi culpa—dije.
—No eres una desgracia—murmuró.
—Tuvimos infancias muy diferentes, tu madre estuvo contigo. Mi madre me dejó y me tacho de mentirosa. Por eso quería que Carla tuviera tu infancia,quería que ella se sintiera amada y protegida.
—Tu eres una excelente mujer. Es decir, sufriste mucho y aun así sacaste fuerzas de no se donde para seguir adelante y no se como lo haces ahora. Yo,solo me la paso insultandote, fui un maldito idiota al decirte todas esas cosas.
—Shhh—sonreí tranquilizandolo—Todo esta bien. Tenías mucho coraje, estabas herido yo hubiera reaccionado peor.

Nuestra mirada se cruzo y no pude evitar sentir mi corazón saltar de alegría. Ver esos ojos verdes me hacian sentirme nerviosa y a la vez feliz. Poco a poco sentía su aliento más cerca de mis labios mientras ambos cerrabamos nuestros ojos,pero me di cuenta que esto no estaba bien. Asi que lo detuve y me aparte de él a como pude.

—¿Que sucede?—pregunto confundido.
—No lo hagas. No hagas esto Eren. Tu estas con ella..—murmure y el entendió de inmediato y se aparto de mi.
—Hitch..—murmuró.
—Ella no merece esto.

Ambos no quedamos en silencio mirando la luna fijamente.

—Jamás deje de amarte María.

Eso me erizo la piel y no pude evitar soltar una lágrima.

—Basta Eren. No sigas con esto. Solo nos hacemos daño—dije.

Tome mi tacones para correr como pude a mi habitación pero el forzó la entrada y cerro fuertemente quedando frente a frente.

—No cometas una locura—dije.
—Seguir amándote no es una locura.

De nuevo su rostro estaba tan cerca de mí,que sus labios estaban a centímetros de los míos, me tomo de la cintura pegándome a el y se inclino hacia mi.

—Eren..

La voz de Hitch nos alarmó pero no nos separamos. Ninguno de los dos decía nada,solo escuchábamos escuchábamos Hitch gritar su nombre.

—Ella no merece esto—murmure con voz entre cortada.

Quite sus manos de mi cintura y me encerré en el baño escuchando como la puerta se cerró. Me miré al espejo respirando agitadamente cuando mi celular sonó, era Adriana.

—¿Paso algo malo?—pregunté de inmediato.
—Para nada. Yelena y yo ya tenemos lo que nos pediste.

Suspire alivada, no corrían peligro alguno.

—Bien. Es bueno saber eso.
—¿Y que tal todo por allá?¿que pasa con el tipo?.
—El tipo me tiene en un altar Adriana. Ya me ofreció hacer negocios. Vamos por buen camino.
—Bien. Entonces pronto tendremos que venir para Suiza. ¿Verdad?.
—Así es. Así que mantente allá. Y mantenme informada si pasa algo.
—De acuerdo. Cuídate por favor.
—También tu.

Corte la llamada mirando mi celular y marcarle al maldito de Antonio. Necesitaba saber como estaba ella.

—No hables. Solo escucha. Quiero un video de mi hija, diciendo la fecha y la hora, lo que comió y que trae puesto. Lo quiero mañana.

Antes de que me respondiera colgué la llamada metiéndome en la regadera para poder despejarme de toda la mierda que estaba viviendo. El sentir a Eren tan cerca de mí hacia que mi cuerpo temblará y me excitara a la vez, sus manos en mi cintura me habían hecho desear que me cogiera tan salvajamente como el solo lo hacía. Pero, recordar que Hitch estaba aquí y era su prometida me hacía volver a la realidad y despejarme de todos esos deseos. Lo único que debía importarme era Carla. Solo ella debía estar en mi mente lo demás era secundario.

BEFORE DAWN;Eren Jaeger × Lectora. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora