4.

206 21 4
                                    

Las chicas y los chicos no sabían nada de mi cita con Eren, no pretendía arruinar un circulo de amistad por solo gustarme un chico como el

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Las chicas y los chicos no sabían nada de mi cita con Eren, no pretendía arruinar un circulo de amistad por solo gustarme un chico como el. Así que simplemente sería una salida, de amigos ¿verdad? ¿entonces porque llevaba cinco pares de ropa a probarme?. No sabía que ponerme, si era un vestido era demasiado formal o informal. Así que al final decidí lo más básico y cómodo para mi pero que a la vez se vería bien. Unos vaqueros acampanados,una  blusa negra de manga larga, mis botas chatas y mi chaqueta en color negro. Me cepille mi cabello largo y negro que llegaba hasta la cintura, poniéndome un poco de perfume y retocar mi labial rojo. Estaba lista, solo esperaba la hora de Jeager que no tardaría. Pero, el tiempo pasaba y el no tocaba mi puerta. Se dieron las 8 en punto y luego las 9. A las 9:30 recibí un mensaje de el.

Lo siento. Pero quede de salir con alguien más. Además. Creo que lo mejor será salir con los demás para evitar malos entendidos. Lo siento Annel. Espero verte pronto.

Aquel mensaje me había abierto los ojos. Era de esperarse. Era un tipo arrogante y egocéntrico. Lo único que causó con esto fue que me hiciera más fría e inquebrantable. Y tal vez tiene razón, no quisiera tener malos entendidos con hombres como el.
Subí a mi habitación quitándome la ropa para estar un rato en el jacuzzi fumado y bebiendo.

—Perdiste tu oportunidad de conocerme,Jaeger.

Deje salir el humo por la nariz mientras seguía bebiendo mi tequila viendo hacia la nada. Nada podría quebrarme ni derrumbarme mucho menos un hombre como el que no es nada a comparación a lo que pase desde que tenía 15 años, ahora a mis 30 años estaban mejor sola. El solo tenía 25 le faltaba todavía vivr y experimentar. Era todavía un mocoso que no sabia lo que quería. Y yo era una mujer poderosa aunque ya no fuera mi territorio, seguía siendo yo.
                                <>
Mikasa me había invitado a su casa ya que harían una fiesta e invitarian a más gente, decidí que era un buen momento para pasarla bien y olvidarme de él aunque estuviera ahí. Estacione mi camioneta y entre a la casa para escuchar la música fuertemente y un olor fuerte a cigarro y cerveza. Creo que podría acoplarme.

—Viniste—dijo Sasha abrazandome.
—Claro.
—Bien. Entonces toma lo que quieras y disfruta—afirmó Historia.
—Gracias—fui hacia la pequeña mesa que tenían. Tome una cerveza destapandola para darle un trago.
—Pensé que no vendrías—su voz hizo que me estremeciera pero me llenara de rabia pero podía controlarlo.
—¿Porque no hacerlo?.
—Por aquella...
—Tranquilízate. Ni que hubiera sido la gran cosa salir. Así que anímate, es tu fiesta. Disfrútala. Tal vez consigas una buen polvo al igual que yo, porque vaya que me hace falta—golpee su hombro dejándolo con la palabra en la boca para irme con las chicas y comenzar a bailar.

El ambiente era muy bueno, podía sentir dos miradas muy penetrantes. Una de un chico bastante apuesto, alto, piel muy blanca parecida la de Mikasa y ojos color miel. La segunda era la de Eren. Desvíe la mirada hacia el chico ojos color miel para sonreirle y seguir bailando con las chicas. De pronto todo se volvió borroso, no recordaba más, simplemente deje que la situación me llevara a pasarla de lo mejor.

Desperté sintiendo que alguien mordisqueaba mi cuello, suspire aún con mis ojos cerrados dejándome llevar por el momento.

—Eren..—su nombre salio tan naturalmente que sonreí inconscientemente.
—Puedo ser el que quieras tan solo déjame probarte de nuevo.

Inmediato abri mis ojos al darme cuenta que no era la voz de Eren. Me gire para darme cuenta que era el chico de ojos color miel que no sabia ni siquiera su nombre, tal vez lo dijo pero no lo recordaba.

—Buenos dias preciosa—murmuró tomándome de la cintura.
—Tengo que vomitar—fingí tener que usar el baño, tomé mi ropa como pude y salí de la habitación envuelta en una sabana blanca. Era la casa de mis amigos ¿como podía haberme cogido a un extraño en  su casa?. Entre a la habitación de Mikasa que estaba tan dormida que no se percato de mi presencia. Entre a su baño para darme una ducha fría y esperar que se me pasara un poco el dolor de cabeza. Tome mi bragas, mi blusa y tome un short de Mikasa.

—¿Escapando de tu polvo?—cuestiono Mikasa mirándome cepillar mi cabello.
—Si. Estoy tan cansada que solo quiero dormir—me acoste a lado de ella mirando las dos hacia el techo sin decir nada.
—Supe que Eren fue un cobarde al no salir contigo—apreté mis puños con odio—Es un idiota.
—Ni que lo digas.
—Hace años el y yo tratamos de ser pareja. Fue fracaso. Nos dimos cuenta que nuestra mejor relación era ser amigos y aqui estamos casi 26 años de ser mejores amigos. Espero y se de cuenta que eres una gran mujer y se deje de idioteces.
—No me interesa estar con alguien que no sabe lo que quiere. Además no es que habrá algo entre el y yo. Todos somos amigos.
—Solo quiero verlos feliz. A todos—nos miramos unos segundos dándonos una cálida sonrisa e ir a dormir de nuevo sin prestar atención a lo que afuera sucedía.

Horas más tarde me encontraba en la cama sola. Debió bajar para limpiar todo el desastre y hacer algo de comer. Salí de la habitación bajando al comerdor dándome cuenta que estaba todo ordenado,y que todos estaban hablando.

—Hasta que despiertas. Creí que tendría que vaciar un bote de agua fría o algo por el estilo—decía Mikasa dándome un poco de jugo.
—Tienes demasiado aguante. Yo solo pude ocho cervezas—decía Jean.
—¿Que es lo que tomo Annel?—preguntaba Historia.
—Ni idea. Yo solo la vi con una cerveza y después con dos botellas de tequila al final—afirmó Sasha riendo.
—Por favor. No digan mas—me tape la cara con vergüenza.
—Pero siempre estuvo acompañada de ese ojos color miel—decía Historia sonriéndome picaramente.
—Por cierto. ¿Se fue?.
—Hace como dos horas. Dijo que esperaba verte de nuevo—decía Mikasa mientras me daba un plato con huevo revuelto,aguacate y pan tostado con más jugo.
—Ni en sueño.
—¿Tan malo fue?—cuestiono Connie.
—A decir verdad. No lo recuerdo. Tal vez fue tan malo que no lo recuerdo.
—Deberías salir con el.Es lindo—afirmó Sasha.

Escuche un gruñido y como la silla se movía hacia atrás para irse a su habitación. ¿Que diablos te sucede Eren?. Todos se quedaron en silencio mientras yo seguía comiendo y charlando sobre como sería la fiesta de Sasha que se pondría muy buena. Solo nosotros, naturaleza y mucho alcohol. Termine de comer y lave el plato,tenía que irme a casa asi que subí hacia la habitación donde estaban mis cosas. Mis llaves,mi pantalón, mi brasier y mis botas. Al salir del cuarto me encontré a el saliendo con una toalla en su cintura. Podía ver perfectamente sus abdominales bien marcados, el agua resbalando sobre ellos, hacia que no dejara de verlo. Aquellos brazos gruesos y fuertes que te podían ahorcar y gritar de placer junto con sus dedos largos que podía jurar que vería el cielo si lo sentía dentro de mi. Su cabello largo escurriendo agua  lo hacían ver intimidante además de su gran altura con aquellos ojos verdes esmeralda.

—¿Ya te vas?.
—Si. Tengo que recuperar fuerzas.
—También yo.
—¿Listo para para cumpleaños de Sasha?.
—Ocupo un regalo pero no tengo ni idea que darle.
—También yo. ¿Que tal si mañana vamos al centro comercial?. Podemos darnos una idea.
—¿Los dos?.
—Si Jaeger. A buscar una regalo para nuestra amiga.
—Si,me parece bien.
—Bien te llamo cuando este allá.
—Si,claro.
—Adios.

Sentí su mirada clavada en ¿mi trasero?¿en verdad Jaeger?

—Deja de ver mi trasero.
—No lo veía.

Sonreí de lado yendo hacia mi camioneta para poder ir a casa y dormir todo lo que pueda. Ya que pasado mañana iría a trabajar. No era que trabajaba toda la semana, solo días que me ocupaban. Era para mantenerme cuerda,no tanto por el dinero. Me dejé caer en mi cama dejando todo a un lado,un olor a perfume de hombre me llegó a mi nariz. Voltee a mi lado olfateando cada prenda y por error me había traído la camisa de Eren que había usado una noche anterior. ¿Que hacía en ese cuarto?. Oh por dios. ¿Cogi en su cuarto?. Volví a olfatear su camisa, era un aroma tan varonil. Tan unico que me hizo perder la cabeza. La guardaré para dársela luego. Volví a mi cama para poder dormir plácidamente y recuperar energía de la tremenda borrachera que me había puesto.

BEFORE DAWN;Eren Jaeger × Lectora. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora