CAPITULO 19

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Me senté junto a Hae. Estaba sonriéndome expectante así que supe que nos había visto en el pasillo y ahora quería oír el todo en el almuerzo. Sonreí burlon lo que casi le hace dar brincos en su silla mientras me miraba suplicante.
Me reí con tristeza. —Fue agradable —declaré, sabiendo que querría detalles, y que lo mataría tener que esperar.
-¿Yyyyyyy? —gritó con excitación.
Me encogí de hombros de forma evasiva. —No lo sé, fue agradable. Fue dulce. Le conté lo de Kyuhyun y que no estaba preparado para nada y él dijo que podríamos tomárnoslo con calma. Luego me tomó de la mano y me acompañó a clase. —Fue así, sin detalles jugosos como él pensaba.
Suspiró con dramatismo. —Bien, está muy bien, eres tan afortunado. Espero que le des una oportunidad apropiada, Ryeowook, porque es un chico simpático.
—Le daré una oportunidad apropiada. Con suerte, lo de tomárnoslo con calma ayudará—confirmé, volviéndome hacia la parte delantera de la clase mientras entraba el profesor. Durante toda la clase ignoré las miradas fijas de Hae y su obvia frustración por no conseguir el cotilleo.
Cuando la clase terminó, enganchó su brazo con el mío y brincó a mi lado. —¿Así que te besó otra vez? —preguntó con los ojos abiertos de par en par.
Sacudí la cabeza. —Nop.
—¿Crees que lo hará? —preguntó, sonriendo.
Tragué saliva. Realmente no quería pensar en eso aún. —Probablemente —admití de mala gana.
—Oh, por el amor de Dios, está bueno —dijo con entusiasmo—. Y tú ya sabes cómo es su cuerpo por todos los encuentros de natación. Oh, Dios, ¡tu novio está en el equipo de natación! Tendrás que ir a todas las competiciones y esas cosas para animarlo. ¡Podrás acosarlo en su traje de baño!—chilló.
Guau, ¡está fatal que Hae esté más emocionado con esto que yo!
—Baja el tono, Hae. No es mi novio. —Fruncí el ceño mientras nos deteníamos fuera del aula de Kyuhyun.
Esta clase sería embarazosa con Kyuhyun y Sungmin en la misma habitación.
—¿No te ha pedido salir oficialmente? —preguntó, con un mohín de decepción.
—No —respondí—. Ahora vamos adentro y consigamos un asiento antes de que el Sr. Cho nos castigue por llegar tarde o algo. —Me metí en el aula para ver que Kyuhyun ya estaba sentado en su escritorio, mirándonos mientras entrábamos. Sonreí pero él no devolvió la sonrisa.
¿Pero qué problema tiene ahora? Esta mañana pasamos un momento genial, y ahora me está mirando enfadado otra vez.
Sungmin sonrió mientras entrábamos y señaló con la cabeza los asientos vacíos cerca del suyo. Afortunadamente los asientos no estaban en primera fila esta vez. Sonreí y caminé hacia él, dejándome caer a su lado y Hae al mío.
—Hey, cuánto tiempo sin vernos —bromeó, sonriendo mientras corría su silla más cerca de la mía. Su lado estaba prácticamente pegado al mío, haciéndome sentir incómodo.
—Sí, casi me olvido de cómo eres. —Le saqué la lengua haciéndole reir y su brazo se deslizó a través del respaldo de mi silla, descansando allí casualmente.
Kyuhyun se puso en pie. Su cuerpo parecía un poco tenso mientras miraba alrededor de la clase.
—Hoy sólo tenemos media lección, ya que ha sido convocada una asamblea para los de último curso a las dos y media en la entrada. No tenemos tiempo para empezar nada nuevo, así que qué tal si repasamos algunas de las reglas de proporciones previstas para mañana.—Se encogió de hombros, sus ojos escudriñando el aula. Cuando se posaron en mí, frunció el ceño y apartó la vista rápidamente. ¿Pero qué demonios le pasa ahora? Honestamente, ya no tengo ni idea de cómo funciona su cerebro.
 
Pensé que le conocía bien, pero todo esto sólo demuestra que no tengo ni idea de quién era en primer lugar.
Tragué aire y saqué mi libro de texto, pasando rápidamente a la página que dijo. Todo tipo de ecuaciones y fórmulas saltaron hacia mí desde la página. Mi cerebro inmediatamente empezó a apagarse. Me concentré en lo que Kyuhyun estaba diciendo delante de la clase, intentando entender de qué estaba hablando, pero sabía que necesitaba más ayuda individual. Nunca entendería esta estúpida asignatura así que di gracias a los astros por tener a Suho.
Sungmin estaba jugando con la parte de atrás de un rebelde mechon pelo que caía por mi cuello; necesitaba cortarme el pelo.Mientras estábamos allí sentados, retorciéndolo alrededor de su dedo mientras yo trataba de concentrarme, pero fallé miserablemente cuando empecé a soñar despierto con Kyuhyun otra vez. Estaba caminado alrededor de la clase y no podía evitar mirar su culito respingón mientras me mordía el labio inferior. Pensamientos de rodearle con mis brazos, y recorrer su espalda con mis dedos, bombardearon mi cerebro.
De pronto se paró delante de mí, mirándome con expectación. Oh, Dios, ¿qué me perdí?Miré alrededor buscando a Hae para que me ayudara, pero él me estaba mirando con los ojos abiertos de par en par.
—Eh... —balbuceé, sin saber qué se esperaba de mí.
Se rió sin gracia, su rostro serio. —Bonita respuesta —dijo con sarcasmo. Se volvió hacia Sungmin y entrecerró los ojos—. Quizá deberías dejar que se concentre en lugar de manosearlo en medio de mi clase —gruñó.
La boca de Sungmin se abrió de golpe mientras sacaba rápidamente el brazo del respaldo de mi silla. —No lo estaba manoseando —replicó inocentemente.

BOY, I ADORE YOU - KYUWOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora