El Espectacular Spider-Man: Un Mejor Rumbo

Llamame Ghost-Spider

En la ciudad de Nueva York, se veía como los primeros rayos empezaban a hacer acto de presencia lo cual tenia como significado que un nuevo día estaba comenzando.

Y en la casa Parker, para ser mas directo en la habitación de Peter, el castaño todavía estaba conciliando el sueño en su cama, hasta que el despertador de su habitación comienza a sonar en señal de que indicaba la hora de levantarse.

No hacia falta el decir, que el ser despertado de esta manera hacia que el joven de cabello castaño soltara un cierto gruñido de molestia, pero sabía que no tenia caso tratar de evitar esto, al menos hoy era domingo y no tenia deberes de la escuela por los cuales preocuparse.

Pero aun así, no pudo evitar el que por su mente pasara el recuerdo de la plática que ayer el había tenido con Gwen.

Realmente no estaba seguro sobre como iba a ser ella para afrontar el hecho de que ahora iba a tener poderes, y eso a el sin duda le preocupaba.

Aunque es cierto, el conoce a Gwen desde ya hace algunos años y el sabía de primera mano que ella era una buena chica con buenos valores que tenia inculcados.

Pero aun así, solamente esperaba que las cosas salieran bien para ella en cuanto a lo de sus poderes.

Sin embargo, en ese momento el castaño sentía como sacaban su mente de sus pensamientos  al escuchar una especie de sonido que era similar a una alarma, junto con una especie de vibración.

Es cuando se da la vuelta y ve que en el mueble que estaba ubicado a un lado de su cama, junto con el despertador se encontraba su teléfono que justamente era lo que en ese momento estaba sonando y vibrando.

Así que rápidamente agarra su teléfono para así poder revisarlo y es ahí cuando ve que se trata de una llamada de parte de Gwen.

Je, vaya que la vida puede llegar a ser muy loca e irónica, bueno, al menos lo es para el.

Pero regresando a la realidad, Peter al ver que Gwen seguía con la llamada, rápidamente acepta la llamada y pone el teléfono en su oído.

-¿Hola? -decía/pregunto Peter empezando con la platica.

-Hola Pete, soy yo. -dijo Gwen estando al otro lado de la linea telefónica.

-Gwen, buenos días yo, no me esperaba tu llamada. -dijo Peter a la vez que se pasaba una mano por su nuca con algo de nervios.

-Si lo se, lamento haber llamado tan temprano pero, necesitaba de algo importante. -dijo Gwen que sonaba un poco apenada por haber llamado tan temprano.

-Esta bien, ¿de que se trata? -pregunto Peter a la vez que se pasaba una mano por su cara.

-Creo que es mejor hablarlo estando los dos frente a frente, ¿te parece en mi casa al medio día? -pregunto Gwen proponiendo la hora y el lugar para poder irse.

-Esta bien, bueno tengo algunas cosas que hacer antes de esonpero seguro terminaré antes de las 12. -dijo Peter a la vez que se sentía un poco mas despavilado en el momento.

Muy bien, y Peter... te quiero mucho. -termino de decir Gwen quien seguramente tenia las mejillas del mismo tono de color rojo que el de un tomate o el de una manzana.

Y ya que se habla de mejillas sumamente coloradas, no hacia falta el decir que Peter era la excepción a esa regla.

Pues justamente el castaño estaba sintiendo el como todo su rostro en general estaba ardiendo y su tonalidad era de un rojo sumamente fuertez, era similar a que tuviese fiebre.

Aunque regresando a la realidad, sin duda fueron demasiado inesperadas las palabras que le acababa de decir la chica Stacy a el sin duda las estaba sintiendo.