La Mordida y encuentro Shockeante

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En la casa Stacy, Gwen estaba entrando a su habitación y lanzó su mochila hacia su cama para luego sentarse en el borde de la misma.

En este momento muchas cosas estaban pasando por la mente de la chica, hace ya varios de minutos desde que ella en compañía de Mary Jane habían ido a visitar a Harry en la torre Oscorp.

Cuando lo fueron a ver, después de platicar por un rato y de ponerse al día, Harry les había dicho que mañana iba a volver a la escuela para dar un anuncio importante, y que esperaba que estuvieran ahí presentes.

Y una vez que terminaron de hablar y que se despidiera de su novio, Gwen y Mary Jane se habían ido de la torre Oscorp para irse directo a sus casas.

Y fue en ese momento durante el camino que ambas chicas habían terminado siendo agarradas desprevenidas por un trío de vagos que las querían asaltar.

Sin embargo, antes de que alguno de esos malditos pudiera siquiera tocarles un pelo a alguna de las dos, uno por uno los maleantes habían estado siendo repelados.

Cuando solo quedaba el que parecía ser el líder del grupo, el atacante de los asaltantes y salvador de ella y de Mary Jane, había sido ni mas ni menos que Spider-Man, quien ya la había salvado en mas de una ocasión, pero notaba que había algo diferente en el arácnido.

Y era que cuando se enfrento al grupo de maleantes, Spider-Man se noto mas serio y duro, ya que se notaba que ya no hablaba y que les estaba dando una fuerte golpiza a uno de ellos, si bien ella nunca ha sido fanática de la violencia, ella entendía que en este mundo había situaciones que simplemente no se podían resolver con las palabras.

Y después de que Spider-Man se fuera del lugar, ella había llamado a su papa para avisarle de los ocurrido, y así el Capitán Stacy llegó en cuestión de minutos al lugar con un par de patrullas que se llevaron al grupo de delincuentes.

Y luego de que por su instinto paternal, su padre la había bombardeado de preguntas, el las termino llevando a casa, dejando primero a Mary Jane en la suya y luego ellos se terminaron a su hogar.

Gwen solamente atino a soltar un suspiro que notaba algo de cansancio, realmente estos últimos días habían sido muy pesados para ella. Desde la muerte de Norman Osborn el padre de Harry, ella ha decidido quedarse como su novia para evitar que Harry llegara a caer de nuevo en la tentación de la globulina verde.

Y la verdad es que eso le ha terminado costando mas de lo que ella hubiera creído, ya que tuvo que dejar de lado la oportunidad de poder estar finalmente con el chico del que realmente esta enamorada, en este caso, Peter Parker.

Y ademas si de por si eso no fuera ya bastante complicado, ya no se sentía cómoda en su pasantía en el laboratorio de Empire State.

Desde que el Dr. y la Dra. Connors se fueron y el Dr. Warren quedo a cargo del laboratorio, había algo que a ella en serio le inquietaba, incluso le daba algo de escalofríos.

Y es que, cada vez que ella llega al laboratorio, el Dr. Warren la saluda de un modo bastante amable, y con una sonrisa demasiado amigable, una que en el fondo no auguraba nada bueno.

Ademas, a veces cuando ella se acercaba a preguntarle algo, le tocaba verlo muchas veces trabajando en su computadora portátil, no alcanzaba ver muy bien que era, y también porque cada vez que preguntaba el respondía con mucha seriedad que no era de su incumbencia y luego se terminaba encerrando en la oficina.

En conclusión, ahora ella mas o menos comenzaba a entender porque Peter había decidido renunciar, y era claro que iba a tener que hablar de esto con Peter, lo haría mañana cuando viera la oportunidad de hacerlo.

El Espectacular Spider-Man: Un Mejor RumboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora