Capitulo 27

2.4K 184 5
                                    

Daryl seguía apuntando al tipo frente a nosotros, los otros dos nos apuntaban desde los lados.

Vamos arquero, danos a la chica y ahorrate problemas.- dijo el moreno.

Vete a la mierda, si la quieres deben matarme.- dijo Daryl.

Eso no es problema.- dijo el hombre.

NO!!!dije poniéndome frente a Daryl

No.Neria.- dijo sujetando mi brazo.

Basta. No podemos pelear con ellos, me llevarán. Puedes seguir rastros, ve con Rick, te estaré esperando...te amo.- susurre en sus labios.

Camine hacia el tipo.

Buena chica, como lo hiciste por voluntad dejaremos a tu arquero con vida. Pero si nos sigues la mataré frente a tus ojos.- dijo el tipo sujetando mi brazo.

Mire a Daryl y sonreí mientras me llevaban con ellos.

Pode notar la ira en los ojos del hombre que amo.
Sin que se dieran cuenta fui dejando un rastro, corte mi mano y deje un camino de sangre fresca. Sabia que Daryl y los otros no tardarían.

Me llevaron a un galpón allí estaba Rachel.

Tú debes ser la loca que vende gente.-

La misma, y no las vendo las cambio por armas y comida.-

Para que?.-dije mientras me amarraban.

Me da igual, mis clientes son personas ricas o bueno lo eran, ellos siempre tuvieron fantasías,  fetiches pero como antes había policía era difícil, pero ahora, pueden hacer lo que quieran cuando quieran. Tienen bastantes medios para pagar.-

Son unos malditos enfermos.- dije y le escupí.

Llamanos como quieras, es lo único que puedes hacer!.-dijo dándome un puñetazo.

Sentí el sabor de mi sangre en la boca.

Que lástima que no puedo darme el lujo de hacerte pedazos, el señor Kudrik nos dará buenas armas por ti.-

Sentí un escalofrío recorrer mi espina dorsal.

Me dejaron allí por mucho rato hasta que llegaron con un tipo de color grande he imponente.
Se acercó y tomó mi barbilla.

Esta bien. Me gusta!.-dijo mirándome de forma extraña.

Trajiste la armas.- dijo Rachel

Todo esta en la camioneta.- dijo el hombre.

Entonces es tuya.-dijo ella

Me sacaron de manera brusca, algo me golpeó, ya que todo se puso negro.

Desperté en una habitación diferente, estaba amarrada a un tronco semidesnuda.

Intente safarme pero era imposible.

La puerta se abrió y sentí los pasos de un hombre, pude notarlo por el peso al caminar.

Quien eres?.- Dije

Shhhh.- dijo acariciando mi desnuda espalda.

Tantos años de maltratos, y esclavitud.-

Qué? De qué hablas?.-

Tu piel, es tan suave y delicada. Eres como la porcelana.-

No por favor.- dije en sollozos ya que sabía que nada bueno me pasaría.

Sentí sus pasos retroceder, de pronto comenzó a azotarme. Sentía como brotaba la sangre de mi espalda, podía sentir como se desgarraba mi piel, mis gritos eran guturales y desgarradores.

CenizasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora