𝕱𝖎𝖈𝖙𝖎𝖔𝖓 [𝐌𝐢𝐜𝐡𝐚𝐞𝐧𝐠]

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(Chaeyoung)

Creo que me gusta Mina.
DIOS, ¿POR QUÉ MINA?
Para empeorar la situación, estamos viviendo en el mundo de los angeles, y si Mina o alguien más se da cuenta me desterrarán de aquí.

Dios, ¿ahora quien me pude ayudar a ocultar todo esto?

Sana.

En estos últimos días me he hecho mas cercana a Sana, ahora la concidero como una amiga, ella me cuenta sus secretos y yo los míos, excepto el de que soy un alma libre y no un ángel normal.

Solo la tengo a ella, tengo que pedirle un consejo o algo.

-M-mina- llegué a la sala para encontrarme con Mina leyendo un libro.

-¿Qué pasó, Chaeng Chaeng?- me preguntó sin apartar su vista del libro.

-Em... Voy a ir a casa de Sana, ¿No te molesta verdad?

-Claro que no Chaeng, ella también es tu amiga, puedes ir- está vez si me miró -Pero cuidado con decirle tu secreto verdad.

-No te preocupes eso si lo puedo ocultar muy bien.

-Bueno, vé con cuidado Chaeng- me dió una sonrisa y yo le correspondí con otra sonrisa.

-Adios~

Salí de nuestra casa y fui directamente a la de Sana.
Toqué el timbre y esperé unos segundos hasta que me abrió la puerta.

-Oh Chaeyoung- exclamó y me abrazó con fuerza -¿Por qué me vienes a visitar así de la nada?

-Perdón si te molesta eso pero tengo que contarte algo muy, pero muy importante- dije apenada.

-No te preocupes, puedes venir cuando quieras- se hizo a un lado para dejarme pasar.

Ya en la sala, Sana me trajo un vaso de agua y se sentó a mi lado en el sofá.

-Bueno cuéntame lo que te pasa.

-B-bueno es que yo...- no encontraba las palabras para decirle lo que me pasa -Por favor no le digas a nadie.

-Tranquila tontita, puedes confiar en mí- rió mientras tomaba un trago de agua.

-Creo que gusta Mina- tenía que ser directa porque si no nos daba toda la noche.

Sana escupió el agua y me miró asustada, ahí comencé a temer de que ella me echara de su casa, o peor, que lo gritará en las calles del pequeño pueblo en el que vivimos.

-T-te... T-tú, te, te, te- sus manos temblaban y se acercó a mí

-Sana por favor no le digas a nadie- no se como pero lágrimas se estaban acomulando en mis ojos.

-Y-yo... No sé que decir- dijo mirando a todos lados, esa noticia si que el tomó por sorpresa -¿Y Mina lo sabe?

-Claro que no, por eso vine aquí, para que me ayudes con esto- dije esta vez más calmada -No sé como lidiar con todo esto y necesito ayuda de alguien.

-¿Y has pensado decírselo?

-N-no... Tengo miedo que ella me eche de su casa y me deje sola- dije agachado mi cabeza.

-No te preocupes pequeña- sentir como sus brazos me rodeaban con delicadeza -Yo te voy a a apoyar.

-Gracias Sana- la abracé y solte unas lágrimas -En serio gracias.

-jeje tranquila, siempre voy a estar contigo.

Ahí fue cuando me ayudo a armar un plan para ocultar este secreto sin que Mina se dé cuenta.
Y si tengo que alejarme de Mina para que las dos estemos a salvo, lo haré sin dudarlo.

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-Yo no dejaré que esa niñita me quité a Mina.

Llevo tiempo enamorado de Mina, siempre que estaba sola trataba de acercarme pero esa estúpida de Sana la alejaba de mí.
Y cuando le hablaba ella no se veía interesada en mí, pero no importa, haré lo posible para que ella sea mía.
Voy a acabar a esa tal Katharina.