—¡Vamos! ¡Solo cinco más! —animaba la chica.
Era un viernes por la noche por lo que significaba que estaban haciendo ejercicios de fuerza. Agradece que en el parque hubiera una barra para hacer dominadas pues era el ejercicio perfecto para el chico. Gen, como buena samaritana, se había unido a él haciendo los mismos ejercicios, pero claro, para ella era pan comido, era bastante sencillo porque, aunque no lo pareciera, sus brazos eran fuertes e incluso llegaba a marcar los músculos. Incluso había bajado las repeticiones que ella solía hacer para adaptarse al chico y su falta de fuerza en aquellos brazos largos y delgados.
—¡Ya no puedo, maldita sea! —gritó el chico mientras se quedaba colgado, intentaba sacar algo de fuerza para al menos hacer una dominada más pero sus brazos y su abdomen ardían demasiado por la fuerza que ya había utilizado.
—Bien, descansa —dijo la chica soltándose de la barra. el rubio inmediatamente se soltó pero sus piernas flaquearon y cayó hasta el suelo—. Realmente me sorprende que seas tan débil. Pero debí imaginarlo, tienes brazos de espagueti. —bromeó la chica ayudando a levantarlo mientras pellizcaba uno de los brazos de su compañero, para su sorpresa estaban tensos y duros haciendo que se marcara un poco el músculo. Quizá no era tan delgado como ella pensaba, pero en definitiva, ella le ganaba en masa muscular en los brazos.
—Jamas te recomendaré como entrenadora.
—¡Hey! Gracias a mi estás mejorando tus bloqueos. Tus brazos agarran fuerza y detienen el balón. También gracias a mi eres más rápido y tus saltos son mucho más potentes. Pronto serás toda una máquina para matar.
—Sí, tienes razón. Ya soy mucho mejor que tu, te gane en tu propio ámbito. —bromeó de forma cínica dirigiendole una mirada tenebrosa a la chica.
Tenía ganas de reírse y burlarse de ella, aunque fuera con mentiras. Ella seguía siendo más fuerte que él, aunque no lo fuese a aceptar. Pero él estaba seguro que eso iba a durar poco, estaba poniendo mucho empeño para poder sobrepasar a ella y todos en algún día no muy lejano.
Gen se cruzó de brazos y levantó una ceja. Ella también sabía que seguía siendo más fuerte que él pero percibió que pronto llegaría a su nivel.
—Me podrías ganar en el voleibol pero te recuerdo que mi especialidad sigue siendo el Parkour.
—Creo que nunca te he preguntado. ¿Por qué entrenas esa cosa?
Gen frunció el ceño, Tsukishima no suele interesarse por la vida de los demás y aquello incluso podría darle miedo a la chica.
—¿Estás intentando evadir el ejercicio? —bromeó.
Él rodó los ojos para luego volver a la barra para seguir haciendo dominadas, esta vez más lentas y profundas para que fuese más eficiente.
—Dime —dijo entre jadeos mientras levantaba su cuerpo —, ¿porque haces eso?
Ahora si no lo hacía para evadir el ejercicio aunque al inicio si pensó en mantener una charla para intentar descansar más tiempo.
—El cuerpo humano es increíble —comentó mientras fácilmente hacía dominadas, sus brazos eran bastante poderosos y con cada levantada sus músculos se marcaban un poco, el peso de su propio cuerpo ya no le era suficiente—. Quería ver cual era mi límite. Busqué varias cosas que pudiera hacer pero en realidad nada me terminaba por gustar. Mi hermano me comentó que a su hospital llegó un chico que se había esguinzado un tobillo practicando parkour. Me interesó el nombre así que lo busqué en internet y a los pocos días empecé a practicarlo. Claro, era pésima al inicio.
—Te aseguro que sigues siendo pésima. — bromeó Kei jadeando y cansado dejando colgar su cuerpo para intentar descansar del ardor de los brazos.
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Pasivo Agresivo (Tsukishima Kei)
FanfictionLa personalidad de Tsukishima Kei siempre ha sido algo complicada. Muchos pensaron que con la llegada de cierta chica él podría cambiar pero simplemente se volvió una persona pasiva agresiva. Fanfic del anime Haikyuu Los personajes no me pertenecen...