Si Tan Solo Nosotros Existiéramos... (en proceso)

-Idiota-

— Llegué al colegio y entré jodidamente a tiempo, eso si no me lo esperaba, volteé en la entrada para ver a la lejanía y buscar con mi mirada a aquel chico del cual aún no sabía el nombre, así que le diría idiota, — eso lo queda muy bien por tratarme tan mal hace rato—No logré visualizarlo así que decidí seguir, al entrar vi un inmenso colegio era precioso y una felicidad inmensa se apoderó de mi, no sabría explicar el sentimiento solo de que era perfecto, aunque me sentía nerviosa se me había olvidado donde me correspondía el primer curso, — que estúpida, y mi mejor amigo no está por ninguna parte hoy, supongo que está esperando mi asignación para así asignarse junto conmigo—
Así que me apresuré a buscar el salón A11 pero todo era inmenso y yo muy torpe buscando

— ¿perdida querida mocosa ?.

— Genial lo que faltaba, El idiota, — La has embarrado Dalit, no tenías que decirlo en voz alta, debes pensar y luego actuar, yo y mi bocata—

— ¿pero que carajo?, es tan fácil preguntar mi nombre,¿ por qué me llamas idiota?, cualquier persona normal me trataría con respeto, mejor dicho cualquier chica moriría por estar en tu lugar mocosa, eres muy grosera ¿sabes?.

—  ¡Wow! Creo que nunca te pregunté si era rara o grosera, hablas más de lo que deberías así que con tu permiso, necesito encontrar mi salón y tú cómo hace un rato sigues interrumpiendo mi camino.

— un lo siento era suficiente, bueno y ¿no pretendes preguntar como se llama este encantador hombre?. — Ella debe caer, que mujer no se muere por mi—

— perdón pero tu nombre no me interesa, al final que ni siquiera hubiera querido dirigirte la palabra, solo surgió que te atravesaste en mi camino.

— ¡vaya que si eres odiosa, tranquilízate!, y bueno que mal, te dejo seguir tu camino que llegaré tarde e iré a mi salón, que por cierto es el A11, — lo del salón lo dije por que me di cuenta que en el libro tiene el salón en el que va, así que eso último haría que se apegara a mi—

—  Carajo, debo hablarle y decirle, era el mismo salón así que no tuve otra opción que pedirle ayuda— ¡oye! Perdón por lo pasado pero efectivamente debes aceptar que eres un idiota, y por cierto a mi me corresponde en el mismo salón que a ti, pero me perdí.

— Vaya que me sorprendes, ¿esa disculpa no fue un poco engreída?, pero bueno igual lo acepto, sígueme y vamos al salón, claro, si quieres que te vean llegar con el idiota que estorbó tu camino desde hora temprana.

—  No, no me importa y por cierto, ¿Cuál es tu nombre?

— creí que no te importaba, cambias muy rápido de opinión eh.

—  Trataba de ser amable, pero creo que eso no va contigo, solo llévame al salón,tonto.

—  Tomaré eso como un por favor.

— Caminamos hasta el tercer nivel del colegio y genial al frente mío estaba el salón, afortunadamente no había empezado la clase, así que iba a abrir la puerta cuando él me detuvo.
— ¿ahora qué?.

— ¿Siempre tienes que estar a la defensiva?, ¡oye tranquila! Solo quería saber tu nombre, no sé como llamarte a excepción de ti que ya me tienes un sobrenombre.

— Me llamo Dalit, gracias por traerme al salón.

—  No había escuchado ese nombre, tenias cara de tener un nombre de chica fresa soltó una risa burlona y se dirigió a abrir la puerta.

— En mi mente solo quería maldecirlo pero no, yo no era así, ¿Qué le hizo pensar en que sería una chica fresa?, no soy como las estúpidas de mis primas— rápidamente deje de pensar y me dirigí a él para por fin entrar.
Para mí sorpresa si había maestra, — empezando mal Dalit ,Mi primer día y seguramente me enviaran a castigo por llegar tarde, que hice para merecerlo, claro llegar tarde—
— Pero todo cambió cuando la maestra que con una medio sonrisa saludó y dijo que entendía que por ser primer día nos perdiéramos

— Dinos cual es  tu nombre para presentarte a la clase 

— Dalit stewart.

— Ella es Dalit, ya lo sabía, te conozco de hace tiempo pero seguiré fingiendo que no, pequeña mocosa—

— Bienvenida, espero que te sientas muy bien aquí, no te había visto antes, así que identificó que eres nueva, mostró una leve sonrisa.

-Vamos contigo Terry.

— Mi corazón se aceleró cuando escuché el nombre de ese idiota, Me emocionó tanto que me sonrojé y ella lo notó, pero no dijo nada solo pidió igualmente que el de presentara para los que eran nuevos en el lugar, no me sonrojé por que me gustara, solo que el protagonista del libro que leo se llama así y en ese libro si me gusta un Terry, en la vida real es detestable.

— Soy Terry Wayne, aunque algunas personas prefieren llamarme idiota.

— lo miré tratando de fulminarlo pero él solo sonrió.— La maestra dijo que por llegar tarde solo quedaban los asientos en el fondo, rodé los ojos cuando me percaté que estaría cerca de él, cuando ya estábamos por sentarnos escuche una vocecita chillona al frente 

— Maestra si gusta le puedo dar el lugar a Dalit, se que ella se distrae fácilmente así que necesitará estar al frente.

— Era la odiosa de kattie, de seguro ya le había puesto el ojo a Terry y necesitaba hacerse la importante

— La maestra preguntó amablemente el nombre de la estudiante y ella respondió kattie Andrews, por cierto soy prima de Dalit, así que se lo que es mejor para ella.

— Sonreí sin ganas y asentí, —  Que asco no, ellas eran las que me dijeron que no las vinculara conmigo y ahora ellas necesitan vincularse conmigo para ser notadas, estúpidas — Terry me vio confuso— quién diría que eras una Andrews, es interesante lo jodidamente incomparables que son, eres incomparable de una manera muy perfecta ante ellas, vaya primas las que debes soportar—

— Eso no debería ser un cumplido pero me hizo sentir bien, esa pequeña frase resonó en mi mente, amaba que no vieran mi parentesco con ellas, era la primera vez que alguien decía eso en una forma no hiriente, estaba acostumbrada a que me lo dijeron en forma de insulto ya que ellas eran las perfectas y yo la que debía ser como ellas, siempre me hicieron sentir como un bicho raro, y que yo era lo malo de la familia, Terry no, en lo que llevo de conocerlo por primera vez no ha sido un idiota.

—  no saqué lo fresa, eso me da el orgullo que tengo.

— No debes irte si no quieres Dalit, — Odio cuando veo que ellas quieren aprovecharse de Dal, no las conocía tanto pero sé que ella ha pasado por mucho por culpa de ellas—

— Solo medio sonreí,  ella ya estaba enfrente mío para obtener mi lugar así que solo tomé mis cosas me levanté y fui al frente.

 
— Cuando volteé a ver Terry tenía una cara de odio y kattie estaba que se derretía por él
y hostigándolo con su vocecita tratando de que él la pelara, Algo dentro de mí sintió pena pero al mismo tiempo sentía satisfacción de que  sintiera como él me hizo sentir a mi desde que lo conocí, Aunque no me hostigaba, me gustó tenerlo cerca.