Deja Que Ocurra

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"Lo mejor está por llegar"

El evento con el fin de recaudar dinero para causas benéficas; además de arreglarme para salir a donde no quiero ir. Es una larga lista de cosas que simplemente no me gusta hacer y que nunca estarán en mi lista de cosas favoritas. No obstante, mi abuela me preparo para todas estas situaciones y más.

Entre mis cosas tengo un hermoso vestido negro que brilla en su totalidad, tiene un escote pronunciado en diagonal, manga larga y una gran abertura que inicia desde mi cadera para finalizar en el piso donde el vestido empieza a arrastrase acompañado de mis tacones de quince centímetros transparentes de un modelo sencillo. El maquillaje va a juego con el vestido; así que me realizo un maquillaje de noche, donde resalto mis ojos verdes en contraste con una sombra negra y otra sombra brillante, y mi labial rojo mate que no puede faltar en una ocasión así.

-Explícame, donde está la parte de que no te gusta arreglarte -dice mi hermano viéndome animado-. Pareces toda una diosa.

-Gracias, Har -respondo abrazándolo-. Tu tampoco estas nada mal, eh.

-Si, si, pero me opacas como siempre -refunfuña haciéndome reír-. Vamonos mocosa.

-¿Vamos en tu carro? -pregunto.

-Si, papá va en su carro con los demás -contesta.

Siempre he amado la camioneta 4x4 de mi hermano, desde que me llamo emocionado el día que papá se lo regalo. Siempre hemos tenido una conexión en nuestros gustos, a pesar de vivir nuestras vidas separados nuestro estilo de música, nuestro amor por los tatuajes -aunque el no estuvo de acuerdo en que me hiciera el mío-, nuestros gustos por los carros 4x4 y las motos, son cosas que con el pasar de los años y la distancia nos ha unido.

Siempre me he aferrado a la fuerte teoría de «El que quiere puede» y a pesar de la distancia uno puede construir una relación estable, ¿Qué si vamos a sufrir altas y bajas? Si, como toda relación; pero si de verdad quieres a una personas, así sea una vez a la semana te vas a tomar el tiempo de escribir y ver como esta. Estar en sus momentos malos y buenos, llorar con el si es posible. Por lo tanto, a pesar de la distancia yo ame a mi hermano con todo mi corazón e incluso ahora lo amo muchísimo más, no me hace falta otra mitad cuando en realidad ya lo tengo a él.

En el camino vamos escuchando el último disco de una banda que se llama BTS. Llegamos a la mansión donde se llevara acabo el evento. Hay muchas personas y cámaras por todos lados, con una alfombra roja donde definitivamente me siento fuera de lugar.

-¿Lista? -mi hermano me saca del trance.

-Creo -respondo no muy segura.

-Vamos, que adentro nos esperan mis amigos -me anima mi hermano.

-¿Hasta los hermanos Miller? -pregunto emocionada.

-Sí, ellos no son hijos legales de papá. Pero por regla general siempre los toman como sus hijos, así que están invitados a donde papá este invitado -responde-. También están Liam, Deenve e Ishiro, sus padres son parte clave de estos eventos.

-Gracias por la información -digo pensativa.

-Sí, andando -mi hermano me anima a salir del carro.

Caminamos juntos por la alfombra roja, mi hermano me agarra de la cintura y de vez en cuando la mano para posar en las fotos. Siento como mi sonrisa se congela, mis pies se me duermen de tanto estar de pie y la verdad con tantas miradas encima me dan ganas de salir corriendo, pero Harold no me suelta ni un segundo. Por fin, después de tanto sonreír, logramos entrar al lugar y en seguida divisamos a mi padre con Margaret, Katlyn y Kevin.