Pasión Irresistible

Capitulo 4

Hice lo que me pidió sin querer pensar en lo que paso y en él. Lo que más deseo en estos momentos es que se fuera ya en ese viaje y que el señor se apiade y tenga un accidente. 

Cuando llego al lugar de trabajo de Noah dejo los papeles con fuerza en la mesa. No estoy segura si mi frustración es porque estoy enojada con él o es la frustración sexual que ese hombre me está causando.

—¿Por qué esa carita señorita? — se acerca Noah y al verme la cara me queda viendo con intriga.

—Nada, solo estoy teniendo un mal día.

—¿Algo que pueda hacer para mejorarte el día? — pregunta y le sonrió cundo me queda viendo con esa cara de coqueto que siempre se carga.

—Nada, ya se me va a pasar no te preocupes — al menos que quiera cogerme pienso mentalmente y descarto la idea por completo, este hombre es como mi hermano, un hermano candente como el sol, pero no voy a arruinar nuestra amistad solo por un polvo.

—Si tú lo dices princesa ¿Lista para salir a almorzar?

—Sipi solo voy por mi abrigo y mi cartera — digo y corro a mi escritorio guardando los otros trabajos que debo hacer para cuando vuelva, tomo mis cosas y alcanzo a Noah y a Bryan en el elevador.

Cuando llegamos al mismo restaurante de siempre que no se encuentra muy lejos de la empresa y nos sentamos suspiro, no dejo de estar intranquila desde que salí de la oficina de Andrés Rojas. Pido mi pasta con camarones encima que me encanta y durante la espera permanezco callada, los dos conversan muy animados y como siempre Noah aprovecha para coquetear con la camarera, no me sorprendería si cuando traiga la comida ya tenga su número de teléfono y ambos hablan de lo que hicieron hoy y como Bryan intento hablar con el chico de la cafetería que tanto le gusta, pero no pudo ni pronunciar más de tres palabras, simplemente reía junto a ellos, pero no tenía ánimos de comentar hoy.

—Está muy callada hoy baby — me llama Bryan, mientras come de su hamburguesa vegana.

—No es nada — digo intento que no le tomen importancia.

—Estas así desde que salimos, si no fuera nada no seguirías así entonces habla —demanda Noah dejando de comer para verme a los ojos. Suspiro, tendré que contárselos.

—Muy bien se los diré, pero ni se les ocurra que esto salga de aquí ¿ok? — ellos asintieron como si fuera obvio y se los conté, evitando muchos detalles, pero si les conté desde el principio que el me quedo viendo el día que llego hasta cuando me toco esta mañana.

—Como no nos contaste antes de esto — me dice Noah furioso, parece que se le va a salir la vena que brota en su frente —esto es acoso Francia, no deberías dejar que él te trate así.

—No lo hago, pero no puedo enviarlo a la mierda como con cualquier otro chico, el me despediría y ustedes saben mejor que nadie que necesito este trabajo.