Mi Sol En Primavera.

Veneno

Tomó el desayuno junto a Sakura, se sentía cómodo al lado de ella, le gustaba mirarla, encontraba paz en esos ojos verdes, apartó la mirada cuando la peli rosa casi lo descubre.

—Anoche estuve estudiando el mapa, la aldea del oro está a unos tres días y de aquí, si salimos temprano sin detenernos llegaremos quizás en dos días. —comentó la peli rosa.

—No te apresures en ir muy rápido, no estás acostumbrada a estos caminos. —respondió el Uchiha.

—Soy más resistente de lo que piensas Sasuke-Kun. —dijo su compañera un poco molesta.

—Lo sé, pero no sabemos a qué nos vamos a enfrentar, por lo que es mejor ir al tiempo preciso y ahorrar energías.

Sakura asintió, Sasuke tenía razón, tenían que generar estrategias y no precipitarse, ambos terminaron el desayuno y se levantaron agitados cuando alguien abrió la puerta muy rápido, la kunoichi y el ninja saltaron atrás listos para atacar.

—¡Señorita Haruno! Por favor venga conmigo. —una doncella que Sakura había visto al lado del señor feudal se acercó a la peli rosa y le tomó de la mano. —Es Miko Tajuro, el hijo del señor feudal, se está muriendo.

Al escuchar aquello la peli rosa no dudo en seguir a la doncella, Sasuke se unió y en poco tiempo llegaron a la habitación en la que el hijo del señor feudal se retorcía de dolor.

—Salva a mi hijo, por favor Sakura. —suplicó el feudal.

Sakura se acercó a Tajuro y comenzó a revisarlo, inspeccionó al hijo del feudal desde su cabello hasta las uñas de sus pies, llevando una delicada y rápida revisión por sistema.

—Tajuro fue envenenado. —sentenció Sakura mientras recogía su cabello en una coleta.

Las rodillas del señor feudal temblaron, Sasuke se acercó a Sakura mientras ella emanaba chakra para vigilar los signos viajes de Tajuro.

—Este veneno es letal, puedo preparar una cura, pero primero tengo que sacar la toxina de su cuerpo, necesito que busquen un kilo de Lyonia polita, la usaré para sanarlo.

—La Lyonia polita es sumamente venenosa señorita Haruno, con eso usted va a empeorar el cuadro de Miko Tajuro. —murmuró un anciano.

—Yo en su lugar no dudaría de Sakura, ella sabe lo que está haciendo. —invervino Sasuke.

—¿Qué esperan para hacer lo que pidió Sakura? —gritó el señor feudal con desesperación.

—Sasuke-Kun, afuera vi unos baldes, traeme dos por favor.

El Uchiha obedeció a su compañera mientras ella sujetaba a Tajuro, regresó de inmediato y vio las intenciones de la peli rosa cuando levantó su dedo índice emanando chakra rosado, Neji le advirtió sobre aquella yecina de Sakura, sabía que ella quitaría el dolor del hijo del feudal para pasarlo a ella misma.

—Ni lo intentes, Sakura. —advirtió Sasuke sujetando la mando su compañera.—Tú técnica es peligrosa.

—Sino lo hago no podré sacar el veneno, el efecto de esta toxina es tan poderosa que Tajuro no puede ser sedado de ninguna manera, el dolor seguirá hasta dejarlo muerto, por eso debo aliviarlo un poco. —explicó la peli rosa.

Sasuke respiró profundo y cerró sus ojos, al abrirlos se podía notar a la perfección su sharingan, sujetó del cuello sin ninguna delicadeza a Tajuro y en pocos segundos el hombre había dejado de gritar y de retorcese.

—Un genjutsu. —murmuró Sakura.—Genial, no lo había pesando, gracias Sasuke-Kun.

Sakura acercó los baldes y se inclinó al hijo del señor feudal, acercó su mano derecha al costado izquierdo de Tajuro y su mano izquierda al cuello, su chakra verde brilló y poco a poco fue cubriéndose de un líquido negro y viscoso, Sasuke frunció el ceño, había visto a Orochimaru en acción, incluso a Kabuto y a Karin, sin embargo ninguno tenía la delicadeza que tenía su compañera, la vio repetir la acción hasta prácticamente llenar dos baldes de aquel líquido.