Brothers. || STRAY KIDS.

Capítulo 09.

Se sentían tan extraños los días sin Bangchan, naturalmente él era siempre el que de alguna manera guiaba los pasos de todos, no existía alguien mejor que él para liderarlos y no saber sobre él, era una interrogante que estaba matando a los chicos, porque sí, después de ese día y de que la policía llegara, Minho y Changbin no tuvieron más remedio que alejarse. Más en calma, regresaron, encontrándose con la noticia de quw Bangchan ya no estaba en ese hospital, peor aún, Nayeon tampoco ya estaba.

A pesar de que intentaron encontrarlo o saber algo de él, fue imposible, sus medios y sus contactos eran muy pobres para llegar a esa información, así que sólo se resignaron a continuar sin él; al menos hasta que no corrieran riesgos de ser capturados por la policía.

Minho y Changbin ahora eran los líderes del grupo y los encargados de poder guiarlos a todos en cada paso que debían seguir, aunque las cosas de pronto no iban tan bien...

— ¡Te dije que dejaras de tomar fotografías con esa cámara! — Hyunjin estaba tan ofuscado de que Seungmin encontrara algo en que pasar su tiempo junto a Felix y una cámara que habían robado a unos turistas.

— ¡Por qué tiraste mi cámara! — Seungmin no dudó un segundo en responder con peores ánimos de los que Hyunjin tenía al haberlo increpado.

Ambos se golpearon, parecían no detenerse, como si estuvieran tirando fuera de ellos toda la rabia y el coraje de la miserable vida que habían tenido que llevar hasta ese día. Felix y Jisung no fue mucho lo que podían hacer.

— Ya basta. — Minho, que apenas llegaba después de ir por comida, al ver el alboroto, habló con fuerza y seriedad. Aunque su voz pareció no importar. Suspiró comenzando a contar hasta 10. — Diez... ¡Ya basta, les dije!

Inmediatamente se detuvieron, aunque no dejaban de verse con cierto resentimiento.

— ¿Otra vez ustedes dos? — Changbin venía de traer leña junto a Jeongin.

— Seungmin comenzó. — acusó Hyunjin, comenzando a alejarse, siempre después de cada pelea terminaba llorando o sintiendose mal.

Pasar por días así, eran bastante agotadores, la falta de Bangchan se sentía cada vez con más fuerza.

— Tal vez, deberíamos buscar otro lugar. Llevamos aquí más de un mes y... — Changbin se había resignado a no ver más a Bangchan, algo muy diferente en el sentir de Minho.

— No tenemos otro lugar Changbin y si Bangchan regresa un día, este será el lugar donde nos buscará. — Sí, la esperanza era lo último que se perdía.

Changbin esbozó una pequeña sonrisa, agachando su mirada. — ¿Tanto lo amas? — era la primera vez que se atrevía a preguntarle directamente sobre los sentimientos que tenía Minho por Bangchan.

— ¿De qué hablas? — Minho sintió nerviosismo, hablar de amor con Changbin era bastante extraño, aunque sí, la pregunta le incomodaba.

— Sé lo de ustedes. — y aunque hablar de ello era algo así como una auto tortura para Changbin, saber más de Minho era casi como una obligación para satisfacer sus propias curiosidades de todo lo que rodeará al chico que le gustaba.

— No hay un ustedes, si es lo que te preguntas Changbin.

— Creí que sí. — la conversación se estaba volviendo cada vez más escueta, cada vez sin mucho ánimo de hablar. — aunque, eso no quita lo que sientes. — Changbin que miraba fijamente ese hermoso perfil de Minho, desvió la mirada cuando este se movió un poco.

— Tal vez. — Minho se encogió de hombros, sus sentimientos por Bangchan si se mantenían, pero no era algo que iba a admitir, ni decir. — ¿Me ayudarás a cocinar esta vez, verdad?