Brothers. || STRAY KIDS.

Capítulo 13.

Bangchan se duchó, se vistió y arregló, en su mente solo podían dar vueltas las palabras de Sana, al verse al espejo, se preguntaba por qué, por qué debía ir y decirle aquello a Minho así como si nada, por qué no podía detener su cuerpo y sus acciones, por qué parecía sentirse sofocado sin razón, por qué si él no quería nada de eso.

Aún así y pese a todo lo que le atormentaba dar cada paso hacia la habitación de Minho, llegó hasta ahí, con la única intención de cumplir. Antes de tocar la puerta, Changbin abrió, quedando frente a frente ambos. Bangchan estaba sorprendido, ¿qué hacía Changbin saliendo del dormitorio de Minho? ¿Ellos habían pasado la noche juntos? Entonces Jeongin también se asomó, iba siguiendo los pasos de Changbin; las dudas de Bangchan se respondieron por sí solas y solo pensó en que todos habían dormido juntos como amigos.

— Chan. — Changbin no pudo verle a los ojos, aunque no tenía nada de malo en lo que había pasado entre Minho y él, sentía que no podía verlo a los ojos directamente.

— ¿Dónde está Minho? Necesito hablar con él sobre Felix. — Bastó solo mencionar aquello para que Minho hiciera su aparición, haciendo a un lado a Jeongin y Changbin para quedar cerca de Bangchan.

— ¿Ya regresó? — Minho si tenia su mirada directamente en la de Bangchan, sin titubeo alguno. Hubo un silencio, que fastidió a Minho. — ¿Qué esperas para hablar?

Bangchan movió sus labios, con la intención de hablar, sin embargo, continuaba con ese algo que le pedía a gritos no hacerlo. — Él... — La voz de Sana nuevamente retumbaba en su cabeza. — Él al parecer está muerto.

'Está muerto' Minho ni siquiera supo cómo reaccionar ante esas palabras. ¿Por qué estaba escuchando justo eso? ¿Todo era parte de un sueño, verdad? Felix seguía a su lado, jugando con un pequeño peluche, en la habitación que ambos compartían en su niñez cuando su mundo se caía a pedazos y él era su única luz, su rayito de sol. De pronto todo pareció transcurrir lento, las acciones, las palabras, los pensamientos, todo, todo se movía tan lento.

— Min... — Changbin sólo sostuvo el cuerpo tambaleante de Minho, que parecía derrumbarse sin fuerzas. — ¡Minho!

— Changbin, hay que dejarlo en la cama. — Jeongin ayudó rápido a Changbin a sostener el cuerpo de Minho para llevarlo hasta una de las camas.

Bangchan sólo era un observador de todo, ¿desde cuándo se había vuelto en alguien tan insensible?

— ¿Minho estás bien? Reacciona, vamos. — el rostro preocupado de Changbin miraba con atención a Minho que aunque no había perdido el conocimiento, estaba un trance de confusión total.

— Felix... — Su respiración era agitada, tenía ganas de llorar, pero se contuvo, algo no estaba bien y Minho no se iba a conformar solo con las palabras de Bangchan, así que tomó fuerzas para levantarse de la cama nuevamente. — Tú... — su mirada de odio de centró en Bangchan. — ¡Tú tienes toda la maldita culpa!

Aunque Changbin intentó detener a Minho, nada pudo evitar que este golpeara con su puño cerrado el rostro de Bangchan, haciendo que este diera unos pasos atrás del fuerte impacto.

— ¿Quién te crees que eres para golpearme? ¿¡Ehh!? — Bangchan respondió de la misma manera.

En tan sólo unos segundos ambos se estaban golpeando y dañando físicamente el uno al otro, sin poder ser detenidos ni por Changbin, ni por Jeongin, que en frustrados intentos, terminaban siendo alejados por los mismos golpes.

Minho tomó del cuello a Bangchan, dejándolo contra una pared, los labios de este y su nariz estaban sangrando de los golpes que le había propiciado Minho. — ¿Sabes? Yo te amaba, pero con esto definitivamente, te odio. — la mirada de Minho guardaba tanta rabia, tanta tristeza, que finalmente lo soltó.