Capítulo 12- La poción

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Narra Draco

Estaba tranquilamente en casa con padre. La verdad no hablaba con él desde lo sucedido con madre, porque la entiendo y si me soy sincero a mí mismo, creo q también soy bisexual. Además los prejuicios y los insultos solo los hacía por mi padre, el cuál siempre me felicitaba cuando le llegaba una carta de Hogwarts anunciándole de los insultos que hacía a los hijos de muggles.

Me quedé mirando al techo por aburrimiento, cuando un aura entre blanco y celeste, en forma de un cisne, entra atravesando mi ventana.

Creo que era un patronus, por el rastro que dejaba tras el, y el hecho que era un animal como fantasma. Nunca antes había visto un patronus, por el simple hecho de que ningún mortífago podía hacerlo y yo no tenía recuerdos felices y, en general, buenos. El patronus se situó en frente mía y empezó a decir.

-Draco, cariño, es mamá, necesito tu ayuda, luego te explico mejor, necesito que vengas a la casa de los Black, en Grimmauld place, número 12. Tienes q situarte entre el 11 y el 13 y decir "Toujours pure". Te espero hijo.

Estoy en shock.

¿Esa era la voz de mi madre? ¿En un patronus?

Espera, ¿mi madre es capaz de invocar un patronus?

Mucha información que procesar en tan poco tiempo.

-Vale, organízate Draco, tienes que ir a... ¿Grimmauld place? Y decir unas palabras en francés, entre el número 11 y 12. Okay, normal, la magia no deja de sorprenderme- murmuré para mí mismo, en un intento de no volverme loco.

Tras estar unos cinco minutos más pensando e intentando procesar la información, me levanté, cambié y agarre las llaves de casa. Ya fuera del recinto me aparecí en el lugar que el cisne con voz de mi madre decía.

Como de esperar no había un número 12, así que me sitúe entre el 11 y 13, como decía las instrucciones y murmuré.

-Toujours pure

Justo al acabar de decir esas palabras, las casa 11 y 13 se empezaron a separar, y de en medio empezó a salir una casa muy estrecha que poco a poco se fue agrandado, hasta quedar un tamaño de un pasillo estrecho por el que solo entraba una persona.

Después de contemplar la casa, fui a tocar la puerta. En mi interior estaba hecho un revuelto de emociones, pero nerviosismo era el predominante.

De repente alguien me abrió la puerta. El gran Harry Potter en persona estaba delante mío abriendo la puerta.

Mi revuelo de emociones se empeoró aún más, si eso era posible.

-Malfoy, pasa. Tu madre está dentro, en la cocina, al fondo, la puerta de enfrente.

Como un robot en automático seguí las instrucciones, sin parar de mirar al frente, hasta que...

-¡Aahh!

Estaba cayéndome. Enfrente de Potter. Por culpa de un maldito paragüero, que, si no me equivoco, era una pata de ogro. 

Maravilloso. Estaba haciendo el ridículo delante del mismísimo Harry Potter, el cuál me salvó de ir a Azkaban, y de múltiples muertes en la batalla de Hogwarts.

Pero cuando ya había admitido mi destino y humillación, siento una manos al rededor de mi cintura, las cuales me están sujetando. Poco a poco  ya estoy de pie de nuevo. Levanto la cabeza lentamente, totalmente sonrojado, encontrándome la cara de Potter a escasos centímetros de la mía. Me alejo rápidamente, y miro al frente con intención de huir de ahí y seguir mi camino hacia la cocina, pero algo me lo impide. Potter sigue teniendo sus suaves y delicada... Ya Draco, para... sus manos en mi cintura. 

-Potter- le digo haciendo contacto visual con él.

-¿Mmh?

-Tus manos, quítalas.- le demando.

-Ah, claro- dice en un tono bajo a la vez que las quita y se va hacia la cocina, donde yo iba. 

Miro al frente para ya sí seguir mi camino y me encuentro con mi querida madre en la puerta observándome con una sonrisa curiosa. 

-Madre.- la saludé.

-Draco, cariño mío, vamos que tenemos que hablar.

Me fui acercando a ella para darle un beso en la mejilla, cuando me abraza y me da también un beso en la mejilla.

-Después vamos a tener que hablar de lo que ha pasado ahí, y no te vas a escapar- me susurra al oído. Tragué en seco, tensándome.

Cuando rompimos el abrazo entré a la cocina, donde estaba el famoso trío de oro y mi tía Andrómeda. Detrás de mí mi madre entraba y cerraba la puerta. 


Narra Narcissa

Después de cerrar la puerta, me situé enfrente del caldero y los ingredientes que tenía alrededor. 

-Vale, os preguntaréis porque, Andrómeda y Draco, os he reunido aquí.

-Alguna idea tengo- murmuró Andrómeda.

-Primero de todo madre, ¿qué hace aquí Potter y sus amigos? y segundo, ¿desde cuándo sabes invocar un pratonus?

-Draco, hijo mío, nos van a ayudar con lo que vamos a hacer, y segundo desde antes que tú nacieras, así que cierra la boquita tuya y escucha que lo voy a explicar. 

-Okay...- responde dudoso.

-Vale, por donde iba. Recientemente, mientras estaba en la biblioteca de los Black, descubrí una forma de traer de vuelta a personas fallecidas a la vida...

-¡¿Revivir a muertos?!- gritó Draco exaltado. 

-Draco, ¿qué te he dicho, cierra la boquita y escucha?- le regañé. Él se quedó en silencio y miró hacia el suelo.- Vale, sigo, esta forma la desarrolló un Black hace mucho tiempo, debido que su amada murió y en vez de aceptar su muerte temprana, trabajó sin descanso en busca de una forma de revivirla, y milagrosamente la encontró. Pero cuando eso sucedió, ya era muy mayor y no tenía apenas fuerzas, así que escribió todo su descubrimiento en un libro y lo guardó para las próximas generaciones. Este método solo es funcional con los Black y funciona a través de una poción. Cada Black puede revivir a una persona con la que tenga recuerdos juntos o, al menos, sea conocido.

-Espera- me interrumpió Andy-¿la piensas revivir?

-Claro, por supuesto, pero no solo a ella, a otras personas si es posible tambíen.

-Eh, eh ,eh- nos paró Draco- ¿De quién estamos hablando? Por ya me perdí.

-Lily Evans, el amor de mi vida- le respondí Draco me miró en shock, Harry igual, mientras que Andrómeda me sonreía y Hermione y Ron miraban al suelo incómodos.

-Ah... Okay...

-Si ya todo queda claro vamos a empezar a hacer la poción.

Agarré todos los ingredientes y fui siguiendo la receta paso a paso, chequeándola dos veces para saber que no me equivocaba en ningún paso o me saltaba algo.

-Lo más importante es esto- dije enseñándole un frasco con un líquido medio blanco transparente brillante- un recuerdo del Black con la persona que se vaya a revivir. pero primero vamos a repartir la poción hasta ahora en varios tarros para las otras personas que vayamos a revivir.

Busqué cinco recipientes y la repartí proporcinalmente.

-Vale. vamos a revivir a cinco personas, yo a Lily, Andrómeda tú a Tonks, Draco a Sirius, y Tonks y Sirius revivirán a Fred y Snape respectivamente.  




Continuará...

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Lo siento muchísimo por no haber actualizado.

Capítulo dedicado a @Elizabeth28Black quien me animó a escribir este capítulo. Intentaré actualizar lo más pronto posible, pero no prometo nada.

Se despide

-N

La verdadera Narcissa MalfoyWhere stories live. Discover now