Amigos desde que tienen memoria, hermanos con distinta sangre en sus venas. Compañeros, confidentes, guardianes de sus mutuos secretos pero cuando uno de los dos da un paso en contra de la amistad y en favor del verdadero sentimiento, algo cambia, a...
-Mira, no quiero tratarte mal ni ser grosero pero ya dije que estoy en una relación y que no voy a salir más a emborracharme, mucho menos a meterme con alguien.
-Ya...se que dijiste eso pero también se que no vas a aguantar mucho, te gusta demasiado esa vida como para dejarla de lado porque ahora tienes una novia.
-¿Disculpa?
-¡Ay Erick! Vamos, deja de ser tan dramático. -Ella se acerca con lo que se, es su intento de coquetear pero esta vez no, como ninguna antes que ha intentado hacerlo desde que estoy con Joel. -¿Hace cuanto no pasamos una noche de esas, eh?
-Basta ya, aléjate de mí y que sea la última vez que lo intentas. -Alzo la voz alejándome porque no quiero que me toque, me da asco saber que tuve sexo con ella.
-¿Qué te pasa Erick?
-Te dije que estoy con alguien, no quiero que me toques. No quiero que nadie me toque y ya no insistas, dije que no quiero hacerte sentir mal pero no entiendes y me estás molestando.
-¿Y con quién se supone que estás? ¿Quién ese ser supremo que te tiene así de histérico?
-Yo.
Ambos nos volteamos en dirección a la voz, esa voz que amo pero que ni en un millón de años esperaba escuchar aquí. Cuando lo veo ahí, con ese rostro perfecto y la mirada fija en mí, olvido todo lo que estaba pasando y mi alma se siente bien. No puedo creer que esté aquí, no puedo creer que haya dicho eso, no puedo creer que yo esté tan loco enamorado de Joel. Doy un paso a su posición y siento mis piernas temblar, solo mirarlo ahí parado, hace que mi sangre corra caliente por mis venas.
-Joey. -Susurro cuando ya estoy a su lado, mirando sus pestañas largas y rizadas, hermosas.
-¿Se puede saber que clase de broma ridícula es esta? -Ella luce desencajada, obviamente conoce a Joel pero parece que aún no capta el mensaje.
-Preguntaste quien es la persona que está con Erick, te respondí que soy yo.¿Tienes algún problema con eso?
-¿Qué? Vamos Joel... No bromees así, todo el mundo sabe que a Erick le gustan demasiado las mujeres como pa...
-Mira, la verdad es que esto no es tu problema y no tengo que darte explicaciones de nada pero lo haré porque al parecer será peor para tí. Joel y yo estamos juntos, somos novios, una pareja, de ese tipo de parejas que se aman y tienen sexo, montones de sexo en todos los rincones de la casa. Sexo gay y salvaje, sexo a toda hora y todo momento y no, nunca me gustaron las mujeres, nunca me gustaste tú, siempre fue él, él es la única persona que me ha gustado en la vida y con el único que quiero tener sexo. Si buscaba mujeres era porque no sabía que Joel sentía lo mismo por mí y yo le hacía a otras lo que quería que él me hiciera a mí. ¿Entiendes?
-¿Qué...carajos, Erick?
-Que Joel me coge a mí, él me coge a mí y lo disfruto. Ahora deja de joder porque me tienes harto.
Le digo a esa mujer y agarro a mi novio del brazo para salir del edificio donde trabajo. Se que tal vez fui un poco pesado al hablar pero cada día intenta algo nuevo, cada día me coquetea, se insinúa y yo he tratado de no ser grosero pero estoy harto. No había dicho que era Joel la persona con la que comparto mi vida y mi cama, no porque me avergüence sino porque nadie tiene que meterse en mis cosas. Quiero ser feliz con él, disfrutar de nuestra relación, de nuestro amor y obviamente no me importa lo que piensen los demás pero tampoco voy a permitir que nadie nos intente hacer sentir mal.
-Fuiste una cosita grosera ahí dentro, bebé. -Habla sonriendo cuando ya nos hemos alejado del edificio.
-Es que...Joey, yo no quería pero ella es insistente.
-Lo noté, escuché un poco de lo que dijo. Realmente me molesté porque te insistía, además...se que con ella has teni...
-No Joel...no, ya hemos hablado de esto, no importa con quien hemos estado, nos pertenecemos.
-Lo se.
-Entonces ya, no pienses en eso, piensa en que mañana cumplimos nuestro primer mes de novios.
-Nuestro primer mes. -Se detiende y toma mi brazo para que me detenga también, estamos a la entrada de nuestro edificio y se lo que va a hacer, lo conozco y amo que cause ese efecto en mí de hacer mis piernas temblar. -No tienes ni idea de las ganas que tengo de entrar en tu lindo trasero y cogerte rico, bebé, hacerlo como te gusta para que chilles alto.
-Joey. -Jadeo excitado porque no me toca, no lo hará porque estamos en la entrada y hay montones de gente.
-¿Qué pasa? Recuerdo escucharte decir que te gusta como te cojo. -Levanta un ceja de manera retadora, sabe que me tiene excitado, sofocado y ansioso y lo disfruta.
-Joel...
-Mira esa erección. -Dice sonriendo y señala mi entrepierna, en efecto estoy con una casa de campaña en mis pantalones y me avergüenza porque estamos en público. -Vamos a subir ahora, vas a ir ditecto a la habitación y me vas a esperar sin ropa sobre la cama, vas a quedarte muy quieto hasta que yo te acompañe porque voy a recordarte que es lo que te gusta, voy a recordarte que ninguna mujer con la que estuviste, puede hacerte gritar como yo lo hago, voy a recordarte, pequeño bebé, quien es el que se coge a quien aquí y por último, mi amor, voy a recordarte que solo yo puedo tenerte, que solo yo voy a tomar todo de tí, que solo yo puedo entrar en tí y llenarte tanto y tan bien.
-Sssii. -Jadeo al borde del colpaso y camino a su lado tratando de ocultar la tremenda erección que ahora si es insoportable. Él me mira de reojo y lleva en sus labios esa sonrisa ganadora, sabe lo que causa y se aprovecha de eso.
-Bien... así me gusta, que sepas quien manda.
-¡Joel!
-¡Shhh! Pequeño, no creo que estés en condiciones de aleterarte, además, quiero que guardes todos tus gritos para cuando te tenga en cuatro sobre la cama.
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