Cap 20 - Visita al mas alla ⏮

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Narra Rusher:

-Asique, ahora entiendo... porque lo hiciste –le digo a María quien se encontraba en frente mío. –Pero, ¿Por qué nunca me lo dijiste? O... ¿ellos por qué nunca me lo dijeron? –le pregunto.

-Eso es culpa mía...

-No madre, es mi culpa –de repente veo a Lucas entrando a la casa, atrás estaba Agustín. Ambos estaban chorreando agua de la lluvia. –Perdón, Rusher, fue mi culpa que mama tenga que empeñar el collar que te regalo tu madre... Todo paso tan rápido... y sin el dinero que necesitábamos... Agustín hubiese muerto por mi culpa. –Me levanto y los miro, sonrío de lado haciéndoles saber que está todo bien, que lo comprendo, y los abrazo a los dos. Luego, abrazo a María, ella tampoco tenía la culpa. Simplemente, las cosas se dieron así, y así el universo lo quiso.

Nos retiramos de la casa, el padre y la madre volvieron en avión a Catamarca. Invite a Ángel a mi casa en Santiago del estero, íbamos a terminar de arreglar las cosas.

Ángel sale en bata de baño, secándose el cabello, y se sienta en la esquina de mi cama. Le tiro unos shorts y una remera mía, lo cual le quedaba todo enorme. Ella se viste y se envuelve la toalla en el pelo. Finalmente, me mira a los ojos dándome inicio a la charla.

-Sé que lo repetí un montón de veces, pero, de verdad estoy muy arrepentido de haber desconfiado de ti, lo siento, de verdad. –me inclino hacia ella abrazando su mano, implorando su perdón. – ¿me perdonás? –le pregunto mirándola a los ojos.

-Solo si lo haces como el audio del meme –me dice sonriendo. A sus órdenes my Ángel.

-Me pErDoNas –empiezo a decir, una risa quería salir dentro de mí, pero me la guarde –sI tE hE fAllAdO t pIdO pErdon dE lA uNikA f0rMa qUe sE –y ahora sí, me empiezo a reír en la cama, seguido de Ángel que también se ríe junto a mí.

-Te extrañé –me dice a los ojos. Me acaricia la mejilla con sus manos pequeñas. Me comienza a besar, yo me pongo arriba de ella y acaricio su cintura. Deslizo la mano por debajo de la remera y masajeo uno de sus senos. Con mi otra mano acaricio su culo. Ella, en cambio, masturba mi pene con su mano dentro de mi pantalón. Me lo saca, y yo le saco el suyo. Me adentro en ella, y comienzo a penetrarla despacito y suave. Ella gime. Aumento la fuerza de la embestida, manteniendo la velocidad baja.

-Más... más.... Rápido... a-ah -abraza mi cuello y gime en mi oído. Agarro sus piernas y acelero la velocidad. Acabamos, nos tapamos con las frazadas. Y nos dormimos abrazados. Carajo, como extrañaba esto.

~8 de abril, 2022 - Santiago del Estero~

A mi lado se encuentra Ángel, dormida en mis brazos, su cabello reluce con la luz de la mañana, saco mi brazo despacito y me levanto.

Agarro el celular y llamo a mi abogado.

-Hey, ¿qué onda? Te llamaba para decirte que voy a retirar todas las denuncias. Ya no quiero seguir con el caso –le digo.

-Hola Rusher, me sorprende escucharte decir eso, ¿Qué te hizo cambiar tan rápido de decisión?

-No es qué, sino, quien. –sonrío. Gracias a que Ángel nunca se rindió es que hoy puedo vivir en paz- Gracias por el apoyo que me diste, te agradezco. Te mando saludos –le digo. Él se despide y cortamos la llamada. Siento unos brazos rodeándome la cintura. Me volteo y me espanto.

-JAJAJAJAJAJA CHE TAN FEA SOY –se levanta la máscara de Chuky que tenía en el rostro y me da un beso en los labios. –Y, ¿Qué haremos hoy? –me pregunta mientras se sienta en el sillón a tomar un tecito.

-Tengo una sorpresa para vos hoy –le digo. Rodeo mi brazo detrás de su cuello y ella se recuesta en mi hombro.

-¿Ah sí? –abre los ojos sorprendida- te iba a preguntar que es, pero me vería muy estúpida, asique mejor no –le sonrío y le doy un beso. Me levanto y me pongo la chaqueta.

-¿Vienes o te quedas? –le digo. Se levanta del sillón y se abriga con una bufanda y una campera enorme.

-Te sigo –me dice.

Conduje hasta un aparcado de coches, le sostuve la mano a Ángel y caminamos por el sendero. Las hojas de los arboles caían a nuestro alrededor. Era una vista hermosa, aun, con el contenido de la sorpresa. Nos detuvimos en una reja enorme, el de seguridad nos dejó pasar, o bueno, me dejo pasar.

-Rusher, no es neces... -la interrumpo.

-Angel, no te preocupes, no lo hago por ti. Lo hago más por mí... y quiero que me acompañes en esto –le estiro la mano para que la agarre y ella lo toma.

Recorremos el cementerio, miles de lapidas a nuestro alrededor, cada una con adornos florales. Finalmente, terminamos en una lápida de cemento.

𝐆𝐢𝐯𝐞 𝐦𝐞 𝐰𝐢𝐧𝐠𝐬 𝐭𝐨 𝐟𝐥𝐲 - (𝐑𝐮𝐬𝐡𝐞𝐫 𝐊𝐢𝐧𝐠)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora