A-Z Katsuyu

X de Xilógrafo

Xilógrafo: Persona que se encarga de grabar imágenes en madera.
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Era una profesión de familia, había pasado de generación en generación.

El arte de moldear imagenes en madera, un arte que particularmente Kasuki Bakugou odiaba.

Su familia tenía un negocio que había ganado su popularidad a lo largo de los años, viviendo ellos en una zona comercial y turística, hacia que muchos de los turistas se llevarán recuerdos de ahí.

Pero a el simplemente no le llamaba la atención, para su mala fortuna había nacido como hijo único y por ende sucesor obligatorio de la profesión, pero desde que era un niño sentía que su trabajo no era especialmente bueno, no podía hacer paisajes encantadores como su madre o rostros de personas famosas como su padre. Su estilo era uno mas caricaturesco y por lo tanto rechazado por la mayoría de turistas que iban a visitar su local.

Y aunque su padre le había dicho que no había absolutamente nada de malo en tener su propio estilo, el creía que era una estupidez puesto que si a nadie le gustaba lo que el hacía ¿Cómo se suponía que se mantendría?

Ese día el estaba encargado de la tienda, cientos de piezas de madera hechas por sus padres eran vendidas, en cambio muy pocos se fijaban en las suyas.

En fin, ya estaba acostumbrado.

Creyó que el día procedería normalmente, hasta que en su desinterés al mostrador logró parar una pieza de las suyas.

Especificamente una donde dibujaba una rana con un paragüas, en ese momento pensó que probablemente fue una idea estúpida que por alguna razón quiso retratar.

— ¿Quiero esta? — Elevó su mirada de la repisa para encontrarse con unos grandes ojos negros, era una chica baja de cabello largo y oscuro.

— ¿Esta? — Inquirió el rubio sin poder salir de la vacilación— ¿Por qué querrías esta basura?— Cayó en cuenta que probablemente sus padres lo matarían por hablar de forma soez con la clientela, pero la chica pareció ni siquiera inmutarse.

— Vaya, creí que esta era una tienda, no un interrogatorio—Dijo con un hilo de sarcasmo claramente perceptible— ¿Me lo vas a vender o no?

— A ver niñita, no quiero que te arrepientas de haber mal gastado tu dinero en esta cosa—Señaló la pieza de madera— ¿Por qué la quieres? Digo ¿Qué te llamó la atención?

La chica se quedó un momento en silencio, en el fondo simplemente estaba contando hasta el número diez para no cometer un acto desagradable de intercambio de palabras.

— La rana— Contestó con simpleza— Me gustan las ranas— Señaló su playera que en efecto tenía una rana en ella.

— Ranas... Ya veo, estas piezas de aquí también son de esa temática, estan mejores que esta así que... — Comenzó a señalar algunos de los trabajos de su madre.

— Ya los vi, sigo queriendo este por favor— En cambio la chica lo interrumpió abruptamente— ¿Podrías simplemente cobrarme el valor del trabajo? Tengo prisa.

— N-no... — La chica alzo la ceja ante su negativa— Digo, si, son cuatro dólares.

— ¿Tan barata? La mayoría de piezas de aquí valen ocho dólares.

— Esas son piezas de calidad, esta en cambio es más reciclable.

— Yo creó que es una pieza hermosa— Contestó la chica mientras volvía a sostener la pieza entre sus manos— Quiero decir, es única. Tiene su propio encantó y sobresale de las demás. Por favor, cobrame lo que vale— Acto seguido le mostró una cálida sonrisa.

Bakugou sintió un revoltijo extraño en su estomago.

— Tsk, como quieras— Hizo el respectivo recibo y metió la pieza en una bolsa, no sin antes darle una última ojeada a su obra.Ahora que lo piensa bien, no era tan mala como creía al inicio — ¿A nombre de quien la factura?

— Tsuyu Asui.

Tsuyu Asui... "temporada de lluvias" irónico.

— Aquí esta— Le tendió la pieza.

— Gracias... — Se quedó un momento en silencio, Bakugou entendió que era para decirle su nombre.

— Bakugou Kasuki— contestó.

— Gracias Bakugou Kasuki— Dijo la chica finalmente mientras reanudaba su marcha lejos de la tienda.

Y Bakugou, el aún no podía salir de la impresión.

Al final fue un buen día. Eso fue lo que pensó.