A-Z Katsuyu

O de Obituario

Tsuyu estaba segura que la parte más difícil de un héroe era ir a reportar un cadáver, una persona que no pudo salvar al obituario. Pero todo héroe tenía que vivir esa experiencia una vez en su vida, pero cuando eres un héroe de rescate dicha acción se hacía común.

Los habían entrenado psicológicamente para recibir esa carga negativa en el caso de que llegarán demasiado tarde, hoy había ocurrido un terrible tsunami que acabó con la vida de cien personas que murieron de manera casi instantánea, Tsuyu se encargó de encontrar los cuerpos y apuntar sus nombres para dárselos al encargado del obituario para que posteriormente sus familias dieran con la lamentable noticia.

— Tsuyu ¿Estas bien? —. Hace dos años que vivía con Katsuki, su actual pareja. Este sabía perfectamente cuanto le afectaba tener que cumplir con esa tarea, a el también le dolía, le dolía de sobremanera que a pesar de dar todo de si mismos no sean capaces de poder salvar a todas las personas. Por eso cuando dichos sucesos ocurrían evitaba hablarle mal o mostrar sus típicas rabietas como de costumbre, no quería estresarla más de lo que ya estaba.

— Ya fuí, pero mañana tengo que regresar ya que se estima que mañana hayan doce personas más identificadas y tengo que encargarme del papeleo—. Contestó Tsuyu con el semblante triste, Katsuki decidió que lo mejor era dejarla sola, pensando y meditando— Odió esta parte de nuestra profesión, lamento que tengas que verme de esta manera' kero.

— Tú siempre tienes que verme en mis peores maneras la mayoría del tiempo, es justo que yo haga lo mismo—. Respondió Katsuki— Ten, te preparé un poco de té para que te relajes, recuerda que hasta el maldito nerd de Deku no es capaz de salvar a todo el mundo, son cosas que siempre pasarán aunque no queramos. Yo tengo que salir ahora, iré a dejar mi reporte a la agencia.

— Comprendo, gracias por el té, Katsuki Chan—. Tsuyu le brindó una pequeña sonrisa cansada pero sincera únicamente para el, tomó la taza con sumo cuidado.

Mañana sería un día extenuante.

Al llegar a las instalaciones de la agencia vió a Ochaco quien entregaba un reporte de daños ocasionados por el reciente Tsunami.

— Tsuyu Chan— Saludó la castaña— ¿Cómo estas?

— Del asco—. Contestó Tsuyu, la castaña solo hizo una pequeña mueca de reprobación— ¿Y tú cómo estas Ochaco Chan?

— Tsu Chan, temo que dos años viviendo con Bakugou Kun y ya se te pegaron algunas cosas de el aunque yo también estoy algo mal con todo este asunto— Respondió— Por cierto ¿Vienes o te vas? Así podemos irnos juntas.

— Lamentó decir tanto para mi como para tí que vengo llegando— Dijo Tsuyu mientras enseñaba su papeleo— Te veré otro día Ochaco Chan, saludame a Midoriya Chan.

— Vale, lo hare— Ambas amigas se despidieron y siguieron sus respectivos caminos, posteriormente Tsuyu llegó a su área, tuvo que pasar obligatoriamente por la Oficina donde llegaban los familiares a verificar la información publicada. Lo más notable de ese día era el llanto de un pequeño niño quien gritaba desesperado por su mamá.

— Que lamentable—. Escuchó decir de una de las empleadas— Pobre niño, probablemente será llevado al orfanato si la información que proporcionó la mujer es cierta— Tsuyu dirigió su mirada especialmente en el pequeño quien trataba de decirle a las autoridades que el no estaba solo, que le habían dicho que viniera a esperar a su mamá en ese lugar y que se iría con ella.

— Tu mamá no regresará— Un héroe trató de razonar con el infante— Todas las personas que mencionaron en la lista no volverán, pero nosotros te cuidaremos.