Y De Yeso

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—Deberías agradecer que eso fue lo más grave que te sucedió— Dijo la mujer de cabello largo mientras ayudaba al rubio al levantarse de su camilla–– Al menos te sirve de lección para que dejes de tirarte imprudentemente a la acción'kero.

–– ¡Tsk!–– El rubio se quejo mientras tomaba de mala gana sus muletas las cuales Tsuyu le había pasado–– Ya lo se maldita sea, no tienes porque decirmelo.

–– Me alegró que estés siendo consciente Katsuki Chan.

–– Oye rana...

–– No me llames así'kero–– Le interrumpió. Bakugou rodó los ojos con fastidio–– Tengo un nombre ¿Sabes? –– Una sonrisa maliciosa apareció de repente en su rostro ante la sugerencia de la chica.

–– Ah cierto, así que dime "Asui"... –– Soltó su nombre con la clara intención de molestarla.

–– ¿Lo haces a apropósito cierto? –– Nuevamente lo volvió a interrumpir.

–– Ya no me interrumpas–– Tsuyu en cambio paro en seco y lo vio de mala manera, Katsuki puede jurar que nunca la había visto tan enojada, la mayoría de veces estaba tranquila y muy altenera pero ahora parecía que quería acribillarlo–– Bueno ya paró–– Alzó un brazo en señal de rendición puesto que el otro lo utilizaba para apoyarse en la muletilla–– Ya vas a decirme que pasa, Tsuyu.

Al principio ella no quiso, lo volvió a ver con molestia mientras seguían su camino pero luego de un prolongado silencio pareció entrar en consciencia y le dijo –– Tuve mucho miedo de perderte–– Katsuki le volteó a ver, abrió la boca para decir algo pero no se le ocurrió nada.

–– Te preocupas demasiado–– Fue lo que dijo, lo que causó que Tsuyu riera con desdén.

–– Perdóname por preocuparme por que nuestro hijo logre conocer a su padre aun vivo y no a través de anécdotas heroicas.

–– Admito que me pase y...–– Paró su andar de inmediato tratando de asimilar las palabras de su mujer–– ¿Qué has dicho? –– Tsuyu también parecía haber caído en cuenta de lo que dijo, abriendo más de lo posible sus agrandados ojos negros–– Estas ¿E-embarazada?

Dio un largo suspiro de resignación a verse descubierta, ella jamás tuvo previsto que le daría la noticia a su esposo en un hospital con este vestido con una túnica siendo incapaz de moverse por si solo y con un estúpido yeso en su pierna. Tomó un bolígrafo que reposaba en la mesa de recepción del hospital y se agacho hasta la altura del yeso donde ante los ojos curiosos de Katsuki comenzó a escribir negándose a contestarle con palabras. Una vez que terminó le señaló que leyera lo que decía: "Te dije que seremos padres, imbecil.
Con amor: Tsuyu" –– Sorpresa.

Le dio una revelación digna de la situación.

–– Eres tan descarada–– Le recriminó Katsuki con una sonrisa mientras señalaba con su dedo el yeso rayado, quería abrazarla pero no podía–– Más te vale que borres eso o mis viejos lo verán y no pararan de molestar pidiendo detalles.

–– No, al menos si no me prometes que serás más cuidadoso desde ahora'kero.

–– ¿Y dejar a ese mocoso sin enseñarle mi técnica estrella? Nunca.

–– No le vayas a enseñar a cómo romperse las piernas.

A-Z KatsuyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora