—¿Qué somos? —preguntó el más alto.
La luz estaba apagada y Jungkook dormía en medio como todas las noches.
—No somos nada, Namjoon —respondió, sin despegar la vista de él—. No podemos ser nada, cualquier cosa entre nosotros repercutirá en Kookie; si llegamos a pelear o si no funciona.
—Entonces haremos que funcione.
—No es tan fácil —le dijo tomando su mano—. A ti te gustan las mujeres, no eres como yo.
—También me gustas tú. —soltó, provocando un sonrojo en el castaño que no fue perceptible por la falta de luz.
—No funcionará, lo sabes, lo arruinaremos con Kookie. Estamos bien así. Solo debemos parar; no más roces, no más besos.
Namjoon asintió.
—Si así lo quieres... Solo un último beso. —pidió, y Seokjin asintió acercándose a él.
Sus labios se juntaron de nuevo y se movieron suavemente. Cuando se separaron, se vieron a los ojos y sonrieron.
—Tal vez otro más. —pidió Namjoon, y Seokjin no pudo decirle que no.
De nuevo sus labios se movían sobre los contrarios negándose a separarse, solo hasta que faltara el aire.
—No creo que pueda ser el último —admitió Seokjin—. Esto no...
Namjoon volvió a besarlo. Seokjin gimió bajito, separándose en el acto, pero volviendo a besarlo.
Jungkook se removió en la cama, y terminaron separándose con los labios hinchados y las mejillas calientes.
—Lo intentaremos, si no funciona, tenemos que prometer que no afectará a Kookie.
Namjoon asintió.
—¿Otro más?
—Sí.
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PAPÁ SOLTERO. ➸namjin
Fiksi Penggemar❝ Ahora no solo comparten habitación, también el cuidado de un niño de dos años llamado Jungkook.❞ Namjoon y Seokjin, totalmente desconocidos y diferentes (uno hetero y mujeriego, el otro homosexual y con un sentido fuerte de la responsabilidad), nu...