Capitulo 5

733 64 3
                                    

Habían pasado ya 3 días desde el secuestro de Lauren, aun Camila seguía indagando junto a sus cómplices como debían llevar aquello, se trataba de una familia muy poderosa y no podía haber errores, se estaba poniendo en juego muchas cosas. 

Lauren por otro lado se sentia ya un poco mas en calma, aunque cada vez que alguien abria la puerta sus nervios la consumian, siempre imaginaba que era Shawn quien venia a matarla, pero desde que la trajo a este lugar no lo habia vuelto a ver para su buena suerte, quien siempre estaba al pendiente de todo lo que se relacionaba con ella era Normani, una chica totalmente diferente, la trataba con amabilidad y hasta entrelazaban conversaciones en esos momentos en los que la soledad y esas cuatro paredes la volverian loca, Camila por otro lado no habia vuelto a visitarla, segun Normani tenia mucho trabajo pero la chica le hacia presente que Camila estaba muy al pendiente de que estuviera bien, a pesar de la situación.

Lauren le habia preguntado a Normani si podia traerle un libro para poder pasar el rato y leer, Normani cumpliendo con el protocolo le comento a Camila y esta mando a sus hombres a que le instalaran una biblioteca a Lauren con muchos libros, la Jauregui no lo podia creer, Camila con el pasar de los dias la sorprendía mas. 

Un día, por la mañana se levanto como era de costumbre, tomo un baño, se lavo los dientes, tomo su desayuno y se dispuso a escoger un libro del estante, hubo uno en particular que llamo su atención, el viejo y el mar de Ernest Hemingway, ya habia escuchado del libro pero no habia tenido tiempo de prestarle toda su atención para leerlo, lo tomo y se acostó en la cama empezando la lectura. 

Empezó con su lectura pero a medida que iba avanzando sentía sus ojos cada vez mas pesados, en las noches no dormia bien, algunas veces sentia ruidos y eso le imposibilitaba conciliar el sueño profundamente, a pesar de que ya no lloraba o gritaba para que la sacaran de ahi el miedo seguia, estaba rodeada de criminales, a pesar de que Normani la trataba bien y Camila le demostraba protección, no podia estar tranquila, los demas que habia tenido la oportunidad de ver eran hombres y mujeres frios, sobre todo su mas grande miedo Shawn. 

No pudo seguir yendo en contra de Morfeo quien la atrapo de golpe, dejando caer su libro al piso, y dejandose llevar a un sueño profundo. 

Camila movía de un lado a otro su cabeza, tratando de relajar sus musculos un poco, la noche anterior se habia ido a la cama tarde y se tuvo que despertar temprano, últimamente casi no tenia la oportunidad de descansar, sentia que aquello seria la razón por la cual entraría a un estres total. Se levanto de la silla y camino hacia la pizarra en donde visualizo a primera vista la foto de Lauren, la tomo y la detallo mas, era una chica realmente hermosa y con un rostro angelical, una sonrisa se formo en ella, coloco la foto nuevamente en su lugar y camino a la salida, en direccion a la habitación de la Jauregui. 

Cuando llego en frente a la puerta, suspiro, armandose de valor para entrar, no sabia como podia reaccionar la chica al verla, aunque la ultima vez que vino se noto muy tranquila, pero tal vez habia cambiado, al final seguia siendo su sucuestradora. 

Para su sorpresa la chica se encontraba dormida placidamente en su cama, cerro la puerta tras de ella al ver que en el piso reposaba un libro, se acerco lo tomo y sonrio al ver de cual se trataba, el viejo y el mar, una hermosa historia que conocia muy bien, lo habia leido varias veces, tomo una silla cercana, y se sentó a hojearlo un poco. 

No paso mucho tiempo cuando Lauren comenzó a moverse lentamente en su cama, Camila quien estaba asumida en la lectura no se habia percatado; la Jauregui abrió poco a poco sus ojos y al mirar al frente su cuerpo se tenso, y su corazón comenzó a latir con fuerza, estaba ahi, era ella, era Camila, tan tranquila y concentrada, con vagas sonrisas dibujándose en su rostro, no podia evitar sentirse nerviosa con la presencia de la Cabello, pero a la misma vez feliz de que estuviera ahi, era todo tan ilógico que le asustaba. Se quedo quieta sin hacer movimiento o sonido alguno, no se podia dar el lujo de romper esa aura tan magica que denotaba Camila al leer con tanto interes, no podía evitar estudiar cada facción de su rostro, perderse en ella y sentir mariposas con esas sonrisas ¿que estaba pasando? ¿por que se sentia asi? se suponia que debia odiarla y gritarla por lo que le habia hecho, ahi tenia la oportunidad de someterla, pero no, no era eso lo que su interior queria. 

Sindrome De Estocolmo (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora