Capítulo VIII

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Debes casarte con él para poder salir adelante, hijo. Él tiene fuerte influencia.

—Esto sin duda fue un maldito error. Nunca debí casarme con él.

Se miró en el espejo del baño mientras secaba su rostro.

—Ni siquiera lo amaba en ese entonces.

Suspira para luego salir del baño.

En cuanto a Black, él estaba lavando los platos.

Al acabar tocó su mejilla, recordó el beso de hace un momento. Pero volvió a conectar el cable que se había soltado ante ese acto y sacudió su cabeza.

—No, no, no, Black, concéntrate...él no te quiere...

Acepto...

Se apoyó al lavaplatos con sus manos.

¿Quieres casarte conmigo?

—Ya basta...

Te amo, Black—lo carga tomándolo por la cintura.

—Ya deja de...confundirme...

Black, ¡Esa relación no está bien!

papá...

Hermano, ven conmigo.

—Goku...

Black, tú sólo eres mío y de nadie más.

Abre los ojos respirando agitado. Todo era un desastre dentro de su cabeza.

Pasa una de sus manos por su rostro, mojandolo un poco. Debía calmarse y pensar con claridad. Nada de lo que pasaba por su mente estaba bien, nada lo estaba.

Giró su cabeza a donde estaban los cubiertos limpios. Uno de los cuchillos resplandeció haciendo notar su fila hoja.

El lugar estaba en completo silencio, solo oía sus latidos los cuales parecían un tic tac de un reloj.

Levantó su mano para tomarlo. Se acercaba cada vez más pero la voz de Broly lo hizo detenerse.

—Ya me voy, volveré más tarde.

—ah...sí.

—¿Qué haces?

—Nada...ya terminé de lavar—le dio una última mirada al cuchillo y se dio la vuelta.

—Bueno, adiós...

—Sí...adiós.

Al irse Broly miró hacia atrás de nuevo, pero solo decidió irse a su habitación.

¿Por qué sintió esa necesidad de empuñar ese cuchillo?

Ni siquiera en Broly...si no en él mismo.

—No, eso está mal...estoy enloqueciendome.

Si es que no lo hizo antes, fue porque mantenía su mente ocupada en sus quehaceres, pero ahora que no estaba haciendo nada de eso y estaba todo en total silencio su mente le estaba haciendo una mala jugada.

—Pero...podría acabar...con todo este problema en un instante. ¡No, no, piensa en los demás! ¡No seas egoísta! Aunque... ¡Basta, basta! ¡Hay más salidas, hay más soluciones, esa no es la única! ¡Piensa en tus padres, en tus hermanos! ¡Ellos ya sufrieron bastante por mi culpa! Hiciste una promesa y debes cumplirla.

Parecía que iba a enloquecer en cualquier momento y era mejor salir de allí.

Se puso ropa cómoda, la cual no dejara ver todos sus moratones y cicatrices ya bastante antiguas, tomó la base que le regaló Goku y la aplicó como le enseñó para al fin salir de la casa.

Ya no se sentía tan adolorido, eso era buena señal.

Caminaba por las calles distraído, había gente transitando las calles y también autos, pero no tantos como para generar tráfico.

Miraba todo diferente al día anterior, todo le parecía tan monótono y ayer lo veía tan colorido e interesante.

Ahora comprendía como sus emociones lo hacían ver y percibir las cosas de su alrededor de una manera totalmente distinta.

Gira hacia su camino y choca con alguien—Auch...—miró al frente y vio a un hombre de ojos azules, este parecía ir igual de distraído que él.

—Hey, ten cuidado...

—Lo lamento...

El hombre lo miró y sus ojos se conectaron y se quedaron en silencio un momento.

—Eh...—vuelve en sí—no te preocupes.

—Eh, sí, ten un buen día, lo siento de nuevo—sigue su camino.

El otro se le quedó viendo unos segundos más para luego irse también.

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Un pequeño aviso de que...

Esta historia será cortita, así que estaré actualizando solo un capítulo diario para no adelantar mucho su final.

Muchas gracias a las personitas que siempre están apoyando con votos o comentarios, se les quiere mucho 🤍

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