Capítulo VI

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Ambos hermanos luego de su salida y terminar de limpiar todo estaban hablando en la sala.

—¿Entendiste?

—Sí—levanta su mano luego aprieta su dedo pulgar con los otros—así, ¿Verdad?

—Sí. Así está bien. Solo llámame cuando me necesites y si estás en peligro haz esa seña.

—Ok. Ya entendí.

Se escucha el ruido de la puerta abrirse. Goku rodó los ojos y puso su mejor cara para no levantar sospechas de nada.

—Ya llegué.

—Sí, ya te oímos.

Entra a la sala y ve a Goku—Vaya, no esperaba verte por aquí.

—Sí, vine a visitar a mí hermano y ver como estaba.

—Supongo que ya te dijo lo de anoche. Cuando resbaló.

—Ah, sí, ya me contó, le dije que tuviera más cuidado. Créeme, imbécil, me ha dicho mucho como para querer ir y darte la golpiza de tu vida.

Trataba de mantener la cabeza fría para no ir y matarlo él mismo.

—Bueno, ya me voy, Black. Vegeta debe estar esperándome. Fue un gusto volver a verte—lo abraza y sin que Broly se de cuenta dejó un papel en el bolsillo de su chaqueta. Se levanta y camina hacia la puerta—Te pido que lo cuides.

—Siempre lo hago.

Claro... Adiós, cuídate, Black.

Abrió la puerta y salió afuera. Dio un suspiro y miró la puerta de nuevo.

—Espero que no te pase nada malo en estos días. Estaré esperando tu llamada.

Subió a su auto y se fue a su hogar.

—Espero no le hayas dicho nada.

—¿Crees que él se hubiera quedado callado si le hubiera dicho?

—Más te vale.

—Goku te hubiera matado.

—Que lo intente. ¿Preparaste la cena?

—¿y por qué no vas a revisar? Claro que ya está.

—Bájale a tu tono, Black. Que hoy no estoy de humor.

¿y cuándo lo estás? Ah, claro, cuando te revuelcas con el otro.

Pensaba mientras miraba como Broly se alejaba de él y caminaba hacia el comedor.

—¡¿Qué estás esperando?! ¡¿No vas a comer o qué?!

—No, ya cené con Goku.

Suspiró viendo a la ventana con los brazos cruzados.

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Pasaron un par de horas y Black ya estaba acostado durmiendo. Pero el peso de alguien más en la cama lo despertó.

—¿Qué haces? Déjame dormir.

—No es momento para dormir, cielo.

—Hueles a...¿Estabas tomando? Quítate de encima.

—Tú eres mío y de nadie más. ¿Me oíste?—Empezó a besarlo por el cuello mientras su mano empezaba a quitar la parte de abajo de su pijama.

—¡Broly, suéltame! ¡No quiero!

—No te pregunté si querías o no.

—¡Que me sueltes! ¡Mmh~!—con una de sus manos le tapó la boca y con la otra siguió quitando su ropa hasta dejarlo desnudo.

—Cállate.

por favor...no otra vez. No quiero, siempre me lastimas.

El pobre Black no tenía tanta fuerza como Broly, eso le jugó mal y el rechinido de la cama sólo paró cuando el más grande decidió que ya estaba.

Se quedó dormido luego de terminar dentro de Black, quien al verlo dormido, salió de la cama y se encerró en el baño, quedando sentado con la puerta tras su espalda.

Estuvo llorando quien sabe cuanto tiempo. Esta vez había ido más lejos que en otras ocasiones, lo había lastimado mucho.

Debajo suyo, bajó ese líquido blanquecino y un poco de un líquido carmín. Este lo notó luego de mucho tiempo, cuando se levantó. El dolor mañana sería el peor.
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—¿Qué tienes...?

—Black...

Había soñado con él, pero su sueño no fue nada lindo. Su hermano estaba sufriendo. Le decía que lo ayudara, pero él tan solo no podía alcanzarlo por más que tratara de tomar su mano.

—Oh, Goku...—el peliflama lo abraza, gesto que es correspondido por el menor.

—Vegeta... no quiero que le siga haciendo daño.

—Pronto estará aquí con nosotros. No te preocupes, él estará bien—acaricia su rostro y deja un beso en su mejilla—Él vendrá y estará fuera de peligro.

—Espero...que soporte unos días más.

—¿Por qué no vino hoy mismo contigo?

—me dijo...que quería hacer algo primero como una venganza.

—¿Una venganza?

—Sí.

—Si es lo que quiere...—Dijo en un suspiro.

A Vegeta no le agradaba nada ver así a Goku, y obviamente odiaba la situación de Black, pero si él no cooperaba, no podían hacer nada.

Lo atrajo hacia él, volviendo a abrazarlo, sintiendo como este correspondía y se acurrucaba entre sus brazos.

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