Un lugar... ¿Para dos?

Capítulo 8

Ambas chicas regresaron a su clase conversando alegremente, en si las clases les resultaban algo aburridas pero debían admitir que era una enorme alegría escuchar sonar esa gloriosa campana que indicaba qué podrían irse.

Salieron de su aula luego de que sonara la dichosa campana. Ryujin, Lia, Tzuyu y Chaeryeong se disponían a irse juntas a casa pero

- Ryujin - Lia la tomó del brazo y la miró con su sonrisa encantadora y cálida - ¿Quieres acompañarnos? Tal vez podamos tomar un café o comer algo en el camino
- No lo sé, no quiero ser una molestia para tus amigas
- ¡Para nada! - Chaeryeong sonrió - Si eres amiga de Lia entonces también me gustaría ser tu amiga
- Yo iré con Sana a cenar así que no podré ir con ustedes, lo siento - Tzuyu sonrió antes de irse - ¡Nos vemos mañana!
- Bueno, ¿entonces aceptas o no? Si quieres comemos algo en el camino - Lia abrazó a la pelirosada sonriendo
- ¿Comida gratis? ¡Déjenme ir con ustedes! - una chica de largos cabellos rubios que es amiga de Lia se unió a la conversación, emocionada al escuchar las palabras "comida gratis"
- Si Rosie va entonces yo también voy - Jisoo sonrió a su amiga y novia
- Bueno... Está bien - Lia aceptó - ¿Tu que dices Ryu?
- Está bien - la pelirosada sonrió

Las 5 chicas salieron de la escuela y se encaminaron a sus casas mientras hablaban alegremente (eso si, no sin antes comprar unas crepas para comer en el camino a casa) y soltaban unas cuantas carcajadas, Lia casi no hablaba durante la conversación y aunque se estuvo perdida en los ojos y sonrisa de su amiga de la infancia también soltaba unas cuantas carcajadas.

Después de un agradable momento en donde las chicas regresaron a su casa Lia acompañó a Ryujin a casa. Se abrazaron pero antes de despedirse Lia propuso algo...

- Oye Ryu - la castaña habló haciendo que su amiga volteara la mirada - ¿te parece si organizamos una pijamada en mi casa?
- ¿Eh? No lo sé
- ¿Por qué? No nos vemos hace tiempo y quiero pasar tiempo con Ryu - dijo antes de abrazar cariñosamente a la pelirosada, sus corazones latían rápidamente y sus caras se ruborizaban
- Si mi madre no me da permiso no podré ir - Ryujin sonrió - ¿vas a encargarte de eso?
- ¡Claro! Trataré de convencerla si eso significa estar con Ryu - ambas rieron aún con los rostros sonrojados
- No has cambiado nada en diez años, sigues siendo la misma niña que conocí
- Si pero esa niña es la que tu amas, ¿no? - la castaña sonrió pícaramente y le daba pequeños golpecitos en su espalda, haciendo que su contraria se sonrojara aún más
- B - bueno yo... L - Lia tu sabes que - la chica titubeó
- Sólo bromeaba - Lia le sonrió antes de irse - ¡Nos vemos mañana!
- N - nos vemos... Supongo

A la mañana siguiente nuestra protagonista se levantó temprano, tomó un baño y se arregló para irse a clases. Grande fué su sorpresa al ver a su amiga castaña esperándola afuera de su casa.

- ¿Lia? ¿Que haces aquí?
- Quise venir a recogerte para ir juntas a clase - rió - ¿No te agrada la idea?
- En serio no has cambiado nada - rió y cerró la puerta de su casa para luego caminar junto a la otra chica - siempre queriendo estar junto a mi
- ¿Eh? ¿Es mi culpa el querer estar junto a mi primer amiga? - hizo un pequeño puchero haciendo reir a Ryujin
- No, sólo digo que esa parte tuya es muy tierna

Ambas chicas continuaron caminando y hablando sobre su niñez. Cuando ya estaban cerca de su escuela Lia volvió a hablar sobre la pijamada que quería organizar con Ryujin.

- Cambiando un poco de tema. ¿Si te gusta la idea de una pijamada en mi casa?
- Si, sería lindo revivir algo que hacíamos cuando éramos niñas - ambas rieron al recordar eso - sólo tendría que avisar a mi madre
- No te preocupes, ¡haré lo posible para convencerla y que te deje dormir en mi casa!
- ¿Pijamada? ¡Suena genial! ¿Puedo acompañarlas? - la pelirroja se acercó a ambas chicas y abrazó a Ryujin por los hombros