Quince

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Cinco me guió hacia un rincón más apartado.

—¿Por qué estás hablando con él? —preguntó con un tono algo serio, cambio de expresión rápidamente primero súplica y ahora se comporta así,m quien lo entiende.

—¿Con quién? —respondí con una falsa inocencia, tratando de no mostrar la incomodidad que sentía.

—Con el rubio. ¿No puedes dejar de coquetear un rato? —su tono era firme, y eso me tomó por sorpresa.

—¿Coquetear? Solo estaba hablando... No sé qué te pasa. Me tienes confundida, primero me ignoras toda una semana y ahora me celas por que hablo con un chico— se me ahogo la voz y sentí mis ojos cristalizados

—____, esto no es así — iba a haber pero lo interrumpo

—Cuando tú también estuviste hablando con una chica y yo no hice nada Cinco, y ni siquiera te atreviste a saludarme bien — vi como el me miraba con arrepentimiento pero quería desahogarme con todo lo que siento—no se que te pasa, me haces sentir mal, me haces sentir usada, después de lo que paso en mi casa, yo nunca he llegado a esos límites con nadie, tú has sido el primer chico, y que me ignores de esa manera hace que me sienta usada sabes?, quizás para ti no fue importante, pero para mi si...odio que me hagas esto, porque?

—No lo entenderías —Dijo tratando de evadir el tema

—Mierda, ya para dime ya, me tienes harta— dije perdiendo la paciencia, y con lágrimas en mi cara

—Es que es complicado — bajo la cabeza

—Acá lo complicado son los sentimientos que tengo por ti.... Me haces sentir como basura — más lágrimas no tardaron en salir de mis ojos.

—____, discúlpame bonita — se iba acercar a abrazarme, pero lo aparte

—No me toques — dije con lágrimas en los ojos, iba a irme, me sentía indispuesta, me sentía mal, pero Cinco me tomo del brazo .

—Por favor ____, perdóname, déjame explicarte...— Lo mire un rato sin saber que hacer, así que me quedará solo escucharlo

—Ahora si me quieres explicar? , estuve mucho tiempo esperando una explicación, y solo me ignoraste...ya dime la verdad porfavor, si ya tuviste lo que quisiese dímelo ahora

—Eso no es así, y tú lo sabes...

—Habla rápido— dije con los brazos cruzados en busca de una explicación

—____, yo primero que todo lamento lo que hice, si soy un cobarde por haberte dejado de esa manera y no hablarte, pero es que no sabia como hacerlo después de lo que paso, me sentía nervioso y no se, sentí que te había faltado el respeto y no sabia con que ojos mirarte, lo menos que quiero que te sientas es usada, yo nunca te vería de esa manera, para mí tú eres más que una chica hermosa...— Me tomo de mis mejillas las cuales seguramente estaban rosadas por sus palabras y ademas mojadas por las lágrimas que derramé

—Pero no debiste de ignorarme de esa manera, fui a buscarte muchas veces y nunca querías verme, me dolió mucho, e hiciste que pensara eso de ti....aun me duele.— frunció sus cejas con una expresión triste y acaricio mi cara

—Soy un estúpido, muy tonto por hacerte sentir así, además de cobarde, no me gusta verte así, por favor discúlpame, soy un tonto, no volverá a pasar ____, también fue la primera vez que yo llego a esos extremos con una chica y no sabia que hacer.— lo mire a los ojos al igual que el a mi, me abrazo fuertemente, traté de alejarme, pero el me agarró más fuerte y no se separó de mi, yo rendida le devolví el abrazo con un sentimiento de debilidad en mi interior.
Es un tonto este chico, pero en parte trato de entenderlo.

—Porfavor, te pido que no vuelva a pasar, prométemelo — dije mientras se separaba del abrazo y acune su cara en mis manos

Nos miramos por un instante, y su expresión era de genuino arrepentimiento. Finalmente, me dejé llevar y lo abracé, apoyando mi mentón en su hombro.

—Prométeme que nunca más harás esto. No quiero sentirme así otra vez.

—Lo prometo, bonita. Nunca volverá a pasar. —Dio una pequeña sonrisa, y yo suspiré, sintiéndome algo más tranquila. Se acercó lentamente, tomándome de la cintura, y nuestros labios se encontraron en un beso suave. Sentí que el peso en mi pecho se aligeraba un poco.

—Extrañé esto —dijo él, y yo sonreí, con las mejillas encendidas.

—Yo también...—Voltee a ver nuestro alrededor y vi que la fiesta seguia, Klus estaba bailando a lo loc en una mesa, Vanya veia asía mi y Cinco con curiosidad, y Ivan estaba en el lugar donde yo estaba sentada anteriormente mirando hacia mi, le dedique una pequeña sonrisa algo avergonzada por lo que acababa de pasar.

—Hey!, crees que me olvide de tu conversacion con el tipo ese— Dijo el chico que tanto me gusta tomandome de la barbilla

— Ay, no empieces, ya arreglamos todo, ademas solo estabamos hablando...estas celoso?— lo mire con algo de diversion, a lo que el me miro serio.

—Pues claro que estoy celoso—

—Que directo

—Se nota que le interesas, y no quiero que te esten viendo tanto ___, me molesta— No sabia que decir o hacer, sentia mi estomago muchas mariposas, y no sabia como reaccionar, me encanta este chico

—Bueno...pero no pasa nada,a mi no me interesa el, me interesas tu y nadie mas, okey?— le sonrei

—Eso es bueno oir — Sonrei y lo abrace por la cintura miesntras lo movia una poco para caminar, miestras este simplemente sonreia

—____!!— Alguien grito mi nombre, al voltear, vi a Eva la cual estaba borracha caminado hacia mi.

—Mierda Eva— Me solte rapidamente de cinco y fui hacia mi amiga procupada— Dios porque tomas tanto

—Soy el alma de la fiesta— dijo mientras luchaba por seguir parada

—Si sigue tomando asi, proximamente lo sera— dijo  cinco mientras se acercaba para ayudarme a agrra a mi amiga}

—Cállate Tonto— le di un leve golpe en la costilla, a lo que este sonrió burlón—

—Que?Cinco?— dijo Eva mirando a cinco con curiosidad y luego enojada—No me jodas ___, otra vez con este?Imbecil— dijo Eva mientras lo miraba súper feo, a lo que cinco la miró con curiosidad, y luego me miro a mi.

—Que?

—Eva, por favor... —intenté calmarla, pero ella continuó.

—No me gusta cómo te trató. Te ignoró toda una semana y te hizo llorar. No entiendo cómo puedes perdonarlo tan fácil. —Me miró con preocupación—. Eres mi amiga, y no quiero verte lastimada otra vez.

Cinco bajó la mirada, visiblemente incómodo, pero no se alejó. Yo suspiré y miré a Eva.

—Entiendo cómo te sientes, Eva, pero... estamos tratando de arreglarlo. Sé que me dolió, pero también necesito darle una oportunidad para que demuestre que esto no volverá a pasar.

Eva suspiró y asintió, aunque todavía miraba a Cinco con desconfianza.

—Más te vale no lastimarla otra vez, o te vas a ver conmigo —le dijo a Cinco, quien asintió solemnemente.

—Lo prometo, Eva. No volveré a hacerle daño. —Me tomó la mano y me dio una pequeña sonrisa.

EL CHICO UMBRELLA ||𝐶𝑖𝑛𝑐𝑜 𝐻𝑎𝑟𝑔𝑟𝑒𝑒𝑣𝑒𝑠© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora