No leas este fanfic Isargas

Chaton mignon

-Estás cansado? - preguntó Isaza llegando a la casa.

-Algo.

-Estas bien?

-Creo que necesito una siesta.

-Seguro? No quieres hablar? - Martín lo abrazó fuertemente.

-Vamos arriba - fue lo único que dijo y ambos subieron.

-Me vas a decir que tienes?

Martin se acostó en la cama haciéndose bolita.

-Vamos, te pusiste raro, dime que te pasa? Martín? - se acomodó a su lado y empezó a acomodarle el cabello.

-Tengo miedo - su voz sonaba al borde de las lagrimas - ya no quiero irme, tengo miedo de irme, ya no quiero hacerlo.

-El intercambio - dedujo Isaza, Martín asintió con la cabeza y se volteó a abrazarlo.

-Y si no encajo? Y si me odian? Y si no tengo el nivel? Qué pasará? Dónde viviré? Cómo llegaré a la escuela? Estaré solo, realmente solo...

-No estarás solo

-Siempre he estado solo! - le interrumpió

-No... no creo eso...

-No se si lo notaste, pero no tengo amigos! No hablo con nadie, me escogen de último en los proyectos, mi mamá nunca está en casa, eres la única persona con la que me relaciono! Francia me va a comer vivo! No quiero ir, no lo haré.

-Martin, estas asustado, lo entiendo, pero has trabajado todo el semestre para lograrlo, no puedes desertar ahora.

-Seré un blanco fácil para todos, seguro se burlarán de mi y me terminarán excluyendo.

-Y eso como lo sabes?

-Apenas logró hablar bien el español, seguro confundiré todo el idioma una vez estando allá! Me conozco, soy estupido...

-Ya habíamos hablado de eso, no eres estupido.

-Lo soy.

-No, claro que no.

-Me lo dices por lástima.

-No, te lo digo porque es verdad.

-Deja de mentirme, se que lo crees - sus lagrimas cayendo por sus mejillas.

-Deja de decir eso! Alguna vez te di alguna señal de que te considerara estupido? - explotó.

-No - se secó las lagrimas y miró  fijo a la nada.

-Conseguiste un puto intercambio, cuántos alumnos no quisieran irse al extranjero a estudiar?

-Muchos - respingó la nariz.

-Eso, y tú lograste que aceptaran tu solicitud para terminar la carrera allá.

-Tú lo sabías? - su mirada viajó a verlo con sorpresa.

-Claro que lo sabía, soy tu tutor y se esa clase de cosas... bueno, claro que ya no lo seré más, seguro que tendrás uno nuevo en Francia.

-No, porque no iré.

-No hagas eso.

-Hacer que?

-Infravalorarte.

-No lo estoy haciendo - se cruzó de brazos.

-Lo haces... inconscientemente - completó.

-No sé cómo dejar de hacerlo - lo miró de reojo intentando contenerse las lagrimas que de nuevo amenazaban.