¿No te diste cuenta? (Frerard)

Capítulo 1

El público comenzó a aplaudir con fuerza tras escuchar los últimos acordes de Famous Last Words, que daban por finalizado aquel concierto.

Estaban todos eufóricos. Gerard se despidió de la gente lanzando besos con sus manos mientras que Ray y Mikey también se despidieron con unas grandes sonrisas en sus rostros.
Frank, por el contrario solo pudo hacer una pequeña mueca, agarrando su guitarra y saliendo de aquel escenario.

-Ha estado genial. -Dijo Ray muy contento abrazando a Mikey mientras llegaban todos a los vestuarios.

-Sii. -Contestó el menor de los Way con una sonrisa. -Todavía no me puedo creer que haya tanta gente a la que le gustemos. ¿Escuchasteis a aquella chica que le gritó a Frank que quería un hijo suyo? -Soltó una carcajada tras recordar aquello y todos le siguieron.

-Que por cierto, hablando de Frank, ¿Alguien sabe dónde se ha metido? -Dijo Ray echando en falta al menor.

Mikey levantó los hombros dando a entender que no tenía ni idea y Gerard formó una expresión de preocupación.

-No sé, pero hoy ha estado muy raro. -Sentenció el moreno.

Durante todo el concierto Frank estuvo alicaído. No se movió apenas de su sitio y cada vez que Gerard se acercaba a él para hacer sus clásicas tonterías en el escenario, él se alejaba y ni le miraba a los ojos.

El moreno estaba realmente preocupado por él.
Desde su boda con Lindsey ya casi no hablaban. Sentía que su amigo y su esposa no acababan de congeniar y no entendía el porqué, ya que Lindsey siempre fue muy agradable con Frank.

Se había formado un silencio en la sala de vestuario, pero de pronto comenzó a sonar el móvil de Gerard, sacándole de sus pensamientos.
Este se dirigió rápidamente a contestar.

-¿Hola?

-Hola amor, soy Linz. -Al otro lado de la llamada se escuchaban un montón de gritos de los fans que acababan de salir del concierto. -Estoy ya fuera, ¿os queda mucho?

-Enseguida salimos, amor. -Gerard formó una tonta sonrisa en sus labios, tenía muchas ganas de verla. -Ya mismo nos vemos, te amo.

Lindsey le contestó con un "yo también te amo" y se cortó la llamada.

Tras la corta conversación, se volvió a formar un breve silencio, el cual fue destruído enseguida.

Frank, salía de un baño con los ojos hinchados y la nariz roja, dando un fuerte portazo tras él.

Todos se quedaron quietos, sin mover ni un músculo. El menor mostraba obvias señales de haber estado llorando, pero nadie se atrevió a decir nada.
Mikey fingió estar respondiendo un mensaje de extrema importancia en su móvil, aunque la pantalla estaba apagada y Ray, que estaba a su lado, pudo apreciarlo.

Por suerte, fue el propio Frank el que acabó con aquella incómoda situación.

-Bueno, nos vamos ya, ¿no? -Fingió una sonrisa y todos asintieron al unísono.

Caminaron hacia la salida y Gerard miraba de vez en cuando al menor, que iba caminando cabizbajo delante de él.

Al notar que Mikey y Ray conversaban entre ellos mucho más adelantados, decidió acercarse a hablar con él.

-¿Está todo bien, Frank? Te noté un poco distante en el concierto, y... bueno... no has hablado mucho desde que finalizó.

-Claro. -Levantó su cabeza para mirarle a los ojos y poder mostrar más credibilidad con sus palabras. -Todo está bien, Gee.

El mayor no pudo evitar formar una sonrisa en su rostro tras escuchar ese apodo y Frank inmediatamente la correspondió.
Esta vez era sincera, no había nada en el mundo que le gustase más que la sonrisa de Gerard, y le gustaba mucho más cuando la causaba él.