Porque un para siempre, no es eterno Muzan.

Capítulo 10: Matrimonio.

Lamento la demora mis kokoritos, pero aqui esta¡¡¡

 030 besos kokoritos del yaoi.

Este capítulo está dedicado a SoraKishima, si tú,  muchas gracias por votar y tomar el tiempo de leer esta historia, simplemente muchas gracias ❤️

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(Parte 2)

     — ¡Querido...! —al escuchar la voz de Muzan, mis ojos se fijaron en él.

     — ¡Tsh!—lo mire con enojo y cerré la puerta sonoramente en su cara, algo figurativo teniendo en cuenta que casi 7 o 8 metros de distancia nos separaban, ¿cómo simplemente se atrevía a dirigirme la palabra como si nada? ¡era un idiota! pude escuchar con claridad la voz de Kokushibo.

    —Él sigue molesto... —abrí un poco la puerta solo para ver como Muzan hacia una sonrisa de incredulidad, mientras un tic nervioso aparecía en uno de sus ojos, haciéndolo palpitar, aún mirando fijamente mi habitación.

     —Sí, ya lo noté...—Muzan soltó un suspiró de cansancio y miró al otro demonio presente —Puedes retirarte, los demás también —dijo a sabiendo que sus lunas superiores aún estaban ahí.

Los demonios asienten y se retiran, con los típicos gritos de Douma acosando a Akaza, ¡eso realmente era gracioso!, con el pasar de los días y los intentos de Muzan por contentarme, los demonios podían ver diversas escenas, como el rey de los demonios colgando del techo, traspasaba muros y puertas con una rafaga de viento o recibiendo baldes de agua fría en cada momento que yo deseara, todos los presentes pensaban con claridad que había una guerra silenciosa en contra del rey y como era de esperarse, Douma al ser un completo entrometido, decidió dar su humilde opinión aún sin habérsela solicitado a su rey.

     —Si me permite decir algo amo Muzan, creo que en vez de acercarse directamente a el joven Karma ¿por qué no le da regalos indirectamente? algo que llame su atención ¡así, como yo hago con mi mejor amigo Akaza-dono!—dijo aquello último, abrazando con fuerza al demonio con tal de molestarlo, los gritos y golpes en protesta no tardaron en llegar por parte de Akaza.

Muzan lo pensó un poco, tal vez tenía algo de razón, se había dejado manejar al gusto de Karma con tal de que dejara de estar molesto pero ni eso fue suficiente, tal vez debería intentar un cambio de estrategia —Kokushibo... —llamó al demonio, dejando que este se presenta tras la apertura de otra puerta.

     —Depende de lo que vaya a regalarle —comenta al haber escuchado la conversación —Diría que quizás se trate de un berrinche por parte de la muñeca —Muzan frunció el ceño molesto, era imposible lidiar con Karma así.

     —Solo ve a hablar con él, sácale información que sea útil a esta situación, estoy cansado de ser su maldito muñequito de juguete con el que se está desquitando.

Realmente me dan risa, ellos piensan que solo hago un berrinche, la verdad me encontraba a tres salas de distancia y los había escuchado a la perfección ¡valla demonios! ¡hombres tenían que ser toditos ellos!; con el pasar de los días la tortura fría de Muzan aumento y enfrentado a Kokushibo por información, este no pudo aportar mucho, prácticamente porque nunca le abrí la puerta.  Supe también por él que solo 8 demonios destacaron para ser lunas menguantes y entre ellas, aquel demonio que había adoptado como mi pequeño. 

Realmente me sentía feliz por él, pude escuchar otro grito de Muzan — ¡Karma! — pobre, otro balde yacía vacío sobre su cabeza, pude escuchar como lo aventaba fuera de su vista;  parece que realmente estaba irritado y enojado.... Bien se lo tiene merecido de tan solo recordar el origen de nuestra situación, me sigo molestando, ¡Muzan era un idiota!