☄️ One shots-Tokyo revengers ☄️(En Pausa)

🍋Wakasa Imaushi🍋

Te encontrabas en tu habitación, recargada en la cabecera de la cama, a tu lado se encontraba tu novio en la misma posición, Wakasa era un tipo serio, era cariñoso, no del modo empalagoso ya que no estaba acostumbrado a las muestras de afecto, la mayor parte del tiempo su rostro mostraba aburrimiento, al principio creías que solo era contigo, pero como conociste a sus amigos te dijeron que era así incluso en las peleas, seguro de si mismo,  eso lo hacía lucir demasiado atractivo, con el paso del tiempo conocías más de él y conseguiste que se desenvolverá más contigo.

Música inundaba la habitación, más específicamente "505", volteaste a mirarlo, sus labios cantaban en voz baja la letra, sus ojos cerrados, hasta que sintió tu mirada sobre el, abrió sus ojos girando si rostro hacia ti, Dios, esa mirada, sus ojos entreabiertos que lo hacían lucir exahusto, sus pestañas largas, esa jodida mirada que te calentaba más que el sol.

– Pasa algo? – pregunto cómo si no supiera lo que acababa de causar en ti.

Pasaste saliva y en un movimiento te sentaste en su regazo – Podemos hacerlo?...  Podemos hacerlo ahora?– contestaste, su mirada viajo de tus ojos a tus labios, lo viste acercarse a ti, lo suficiente cerca de tu oído.

– Serás una buena chica hoy? – sus manos viajaron a tus muslos, masajeandolos con suavidad, asentiste con la cabeza, una de sus manos tomo tu mentón, acercándote hasta el punto de juntar sus labios, te beso apasionadamente, sus labios eran tan suaves, hacían que el beso se sintiera mucho mejor, quitó tu blusa, dejándote solo en sostén, sus manos empezaron a ir a tu pantalón, desabrochandolo con calma, soltaste un suspiro al sentir sus dedos rozar tu intimidad, el beso continuaba, sus dedos hicieron a un lado tu ropa interior, tocando esa zona sensible, moviendo los en círculos de forma lenta, los pequeños gemidos que soltabas quedaban atrapados en sus labios, hasta que uno de sus largos dedos entro en ti, empezando a moverlo, haciendo que fuera imposible para ti retener más los gemidos de tu boca logrando romper el beso, un segundo dedo entro, tu cabeza fue hacia su hombro, mientras el de dedicaba a dejar besos en tu cuello, los sonidos que salían de ti daban de lleno en su oído, por lo que decidiste colocar una de tus manos en tu boca – oh vamos, déjame escucharte – pronunció  colocando un tercer dedo en ti, logrando que dieras un brinquito, ese pequeño movimiento provoco un gruñido de su parte, su miembro ya estaba duro  debajo de ti, el ritmo de sus dedos fue más rápido, simulando estocadas, haciendo maravillas con ellos, logrando que te vinieras.

Se levantó de la cama contigo en brazos para después recostarte – Aún no terminamos – sus manos quitaron tu pantalón, dejándote en ropa interior, sentías como te comía con la mirada – El negro te queda tan bien... Es una lastima que tenga que quitarlo – se acercó para besarte quitando el sostén de tu cuerpo en el proceso, dejo tu boca para bajar a tu cuello y después a tus senos, llevándose uno a la boca mientras masajeaba el otro con su mano, logrando que te mojaras más de lo que ya estabas,  mientras su boca segura atendiendo tus senos, sus manos fueron a tu cadera, jugando con los laterales de tus bragas, comenzando a bajarlo, se separó, quitando las por completo, quitó su camisa, dándote una vista de su abdomen trabajado, desabrochó su pantalón, sin antes sacar un sobre plateado de ellos, dejándolos caer al piso  junto con su ropa interior – Que buena vista me estás dando – dijiste antes de sentir como te jalaba de las piernas colocando te más cerca del el – Cierra la boca – podías jurar que una sonrisa se formó en sus labios cuando dijo eso, coloco el condón en su miembro erecto, separó tus piernas, poniendolas a sus costados, frotó la punta entre tus pliegues, comenzó metiendolo de forma lenta, podías escucharlo maldecir mientras entraba en ti – Maldición... Estás tan apretada Tn– mordió su labio tratando de contenerse, salía y entraba de forma lenta, tratando de que no sintieras dolor.

– M-mas rápido... P-por favor – suplicaste

, aceleró sus movimientos, agachándose un poco para besar tu cuello, dando una que otra mordida sobre el, sus embestidas eran fuertes, te daban un placer inimaginable, enrollaste tus piernas en su cintura, sentías como llenaba cada parte de ti – Ahhh... Lo sostienes  demasíado  b-bien... Agh – sus embestidas comenzaron a ir más rápido, tomo tus piernas y las coloco sobre sus hombros, tocando ese punto dulce de ti, ver tus senos rebotar por cada embestida lo calentaba más, sentías como tú orgasmo se acercaba, el lo noto al sentir tus paredes apretarlo aún más – A-aun no termino contigo - salió de ti, colocando te en cuatro, sin que te lo esperarás entro en ti una vez más, sus manos tomaban con fuerza tu cadera, la habitación se llenó de sonidos de sus cuerpos chocando junto a jadeos y gemidos provinientes de ambos, cada embestida era más fuerte y rápida,  ya no podías aguantar más y el estaba cerca – Ahhh... Tn... Tn... Estoy cerca... Ugh... – terminaron al mismo tiempo, se dejaron caer el la cama, después de recuperar el aliento tiro el preservativo, y se recostó a tu lado.

– Wakasa... Tomemos un baño–

– Quedemos así un momento– dijo pasando sus brazos al rededor de ti, dejando un beso en tu cabeza.

Wakasa podía ser el chico con expresión de aburrimiento, talvez nadie se imaginaria lo dominante que podría llegar a ser.
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Pidieron uno de esta preciosura, no conocemos mucho de el, pero así es como me lo imagino, espero les guste.🖤