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—Adivina quien soy-rápidamente ese pánico que llegue a sentir se desvaneció al escuchar la tierna pero a la vez gruesa voz de mi prometido.

—El borrachito de la esquina.

—No soy mi apá.

Solté una carcajada al imaginarme a Iván de esa manera.

—Déjame ayudarte,dame esas bolsas.

Gustosa acepte y se las entregue.

—adivina que compre.

—mmmm,no se,tal vez otra lencería sensual para mi.

—No y ni me recuerdes ese momento.-finalícele la platica para seguir caminando.

—Pau,sabes que estaba jugando,me dejaste con las ganas de quitarte esa lencería.

—Ay cállate,bueno,compre mi vestido para la revelación de sexo,lo eh comprado azul.

—creí que iríamos de blanco los dos.

—No.

—okay,amor.

Llegamos al rancho de los Guzmán y como siempre había fiesta.

—Buenas noches,Santiago- Se acerca una muchacha a saludar.

Pero que descortés,¿piensa que soy parte de la decoración o que ?

—Buenas noches.-responde mi prometido lo más cortante posible.

—como te a ido guapo,ya no te e visto por los establos.

—digamos que ya ay una persona ocupada en eso.

—Pero no es lo mismo sin ti.

Santiago solamente tosió incómodo.

—¿Y esta quien es?-volvio a hablar la mujer.

Se a dirigido a mi de esa manera, de verdad.

—Esa que ves ahí-escuche hablar a una tercera voz antes de que yo pudiera responder- es Paulina ZAMBADA,la hija del mayo zambada y prometida de este joven que vez aquí-señaló a Santiago.

Voltee a ver a Serafín con una sonrisa divertida.

—pero bueno,la pregunta es,¿quien eres tú?

La muchacha se encontraba roja del coraje,si no es que morada.

—Soy Alexandra.

—Alexandra que.

—Es hija del hombre de confianza de mi apá-por fin hablo Santiago.

—Bueno si me disculpan,iré a dormir.

Santiago sabia que estaba molesta,por que en cuanto dije eso el también dijo que se iría a dormir.

Subí las escaleras a paso rápido,sintiendo a Santiago tras de mi.

Entre a la habitación de invitados en la que me quedaba antes de estar con Santiago y serré la puerta.

—¿Por que vas a dormir aquí?

—Por que se me da la gana.

—Vamos a la habitación amor.

—No quiero.

—ándale amor,por favor.

—¿Que me darás a cambio?

—Lo que tú quieras.

Sin decir nada me levante de la cama y me dirigí hacia la habitación de Santi,entre y el entro tras de mi.

—Ponle seguro y siéntate en la cama.

El no hablaba,solamente obedecía.

Tome una corbata y entrelazó sus manos con un nudo fuerte que no se pudiera quitar.

Tome la silla que tenía en la esquina de su habitación y la coloqué justo frente a él.

Comencé a desnudarme con su mirada fija en mi,ya que estaba completando desnuda,me senté en la silla,abrí mis piernas y acerque mi mano a mi sexo.

Mirándolo fijamente a los ojos comencé a tocarme.

Acerque los dedos a mi entrada y los hundí soltando un fuerte gemido,vi como se había creado un bulto en su entrepierna.

—Paulina por favor,no me tortures así-soltó con voz gruesa mientras se removía un poco.

—Ven aquí.

Rápidamente se paro de la cama y se colocó frente a mi de rodillas.

—Ahora has lo que estaba haciéndome-ví como intentaba desatarse las manos-pero con la boca.

Lentamente acercó su boca pegando un lengüetazo, comenzó a jugar torpemente, Santiago nunca había practicado esto pero para ser su primera vez no lo hace tan mal.


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Pido perdón JA JAJA.

Se que no estado muy activa y que prometí un maratón pero creo que esas que han estrado a la prepa me comprenderán.😭

Les dejo este corto capítulo,espero les guste y lo disfruten.

No olviden votar.

Besitos.😽

La princesa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora