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사랑 : Tres

Los recién casados se encontraban de regreso al departamento pero antes llegaron por lo que les faltaba para preparar de cenar, Jungkook se veía ligeramente preocupado pero ella no se había molestado en preguntarle, sabía que su espacio era importante, por lo que le dio la oportunidad de que él lo confesara primero. Y lo hizo, cuando salían del supermercado le susurró lo que su maestro le había propuesto.

— ¡Es una gran oportunidad Koo! —Chilló emocionada mientras subía las bolsas con comida al asiento trasero—. Yo puedo ayudarle al hijo a escoger muebles para que decore su departamento, ya te pagaron no entiendo porque no quieres hacerlo.

— Simplemente no quiero —Hizo un puchero mientras subía al lado del conductor.

— Bueno, como tú veas Jeon.

El camino a casa fue extrañamente silencioso, la mayoría de las veces cantaban y reían por cosas simples pero esta vez se sentía diferente, al llegar ambos bajaron las bolsas y las dejaron sobre la barra de la cocina. Jungkook se fue hasta su cuarto y cerró la puerta, no volvió a salir hasta la mañana siguiente. Encontrando sobre la barra, unos cientos de wones junto con una nota que decía

Espero que sepas andar en autobús, Jeon. <3

No podría ser verdad.

Al llegar a la universidad, tarde por cierto, fue directo con el profesor Kim. No le quedaría de otra que aceptar hacer el trabajo, no quería seguir usando el autobús cuando cómodamente podría llegar en su camioneta.

— ¡Profesor Kim! —Gritó desde la puerta interrumpiendo la clase —Necesito hablar con usted, es urgente.

Dicho eso, el maestro salió con una gran sonrisa en la cara. —Yo sabría que no me ibas a decepcionar, Jungkook. Aquí esta la dirección, junto con el código para entrar. Mi hijo no debería de estar en la casa hasta las —Le extendió el papel y miró su reloj —... Te quedan exactamente tres horas para ir a revisar todo el lugar, tomar medidas y salir de ahí antes de que llegue; tiene un mal genio y no le gusta entablar conversaciones con otras personas.

Jungkook asintió y salió hacia la dirección que estaba marcada en el post-it amarillo; no le quedaba tan lejos y fácilmente podría ir caminando, pero optó por pagar el autobús de nuevo, su esposa pagaría el haberlo dejado varado en el departamento. El edificio en el que se encontraba el departamento del hijo del señor Kim se veía bien por fuera, no era mi lujoso pero tampoco era un lugar de mala muerte. Perfecto para un estudiante.

— Por Dios, esto es hermoso. Apostaría que los cuartos miden más que mi departamento —Susurró cuando la puerta se abrió, agarró con fuerza su mochila, como si tuviera miedo de estropear algo si golpeaba.

Después de tomar varias medidas, un mini dibujo del departamento como estaba y otro como quedaría bien, se sentó sobre una de las sillas altas de la encimera que le permitían ver toda la sala y el ventanal que tenía. Sacó de su mochila una bolsa de cheetos y la abrió para tomar uno. Uno que luego fue otro, y otro más, y cuando menos se dio cuenta ya se había acabado la mitad de la bolsa; el sonido de su celular lo asustó e hizo que se tragara uno entero, atragantándose. Trataba de escupirlo o de tragarlo, pero no podía.

De pronto, el sonido de la puerta abierta lo asustó más y terminó pegándose en el pecho, cosa que fue inútil ya que solo logró que el cheeto se le atorara más en la garganta.

(...)

— Entonces, ¿Ya me vas a decir que hacías en mi casa? —Preguntó con una ceja alzada mientras le servía un vaso de agua a Jungkook —-. Digo, ni siquiera te conozco.

— Lo siento, no sabía que llegarías antes y yo me tardé un poco más de lo esperado —Le respondió tomando el vaso entre sus manos, y el dueño del departamento, del que todavía no sabía su nombre alzó una ceja.

— ¿Entraste a mi casa sin mi permiso, y te ibas a ir, y yo nunca lo sabría? —Asintió. — ¿Me vas a decir que hacías en mi casa?

— Tu papá me contrató para las remodelaciones de tu departamento, fue el que me dio la clave de acceso. Perdón por no presentarme, soy Jeon Jungkook.

— Kim Taehyung —Respondió cortantemente y se levantó de su asiento dándole la espalda a un Jungkook confundido.

SarangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora