Capítulo 19

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YOONMIN

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YOONMIN

Yoongi se encontraba colocándose su ropa con sumo cuidado, hoy por fin saldría del hospital.

—Auch!— se quejo al rozar su brazo.

—¿Que haces? Debiste esperar a que llegara— gruño JiMin al ver al mayor intentar colocarse la camisa lastimando su herida en el proceso.

—Creo que soy lo suficientemente grande para vestirme solo...— se quejo con su humor habitual, uno que JiMin estaba descubriendo y el cual aceptaba pues era parte del Alfa y aunque no lo admitiera esa aura de "yo todo lo puedo" lo tenían un poco más enamorado.

—También eres lo suficientemente brusco para volver a abrir tu herida— le reprendió —Creo que ya sabías que debes tener cuidado, aún esta sensible, una herida de bala cerca del corazón no es cualquier cosa— le recordó, porque si, eso había sucedido en la última redada, Yoongi había recibido una bala en el pecho muy cerca de su corazón, por un momento pensó que era su fin. Pero al parecer la vida le daba una nueva oportunidad.

—Esta bien, puedo soportar el dolor— se jactó.

—Si ya lo creo, pero es mejor para mi que no sufras— pues el menor se preocupaba mucho por el. —Hazlo por mi ¿Quieres?— y es que a esos ojos Yoongi no podía negarse.

—De acuerdo— respondió simple.

El rubio se acercó para terminar de abotonar la camisa del mayor y por último dejar un beso en su frente.

—Te ves muy lindo siendo obediente...— llevo una mano hasta sus cabellos para despeinarlos.

—Oum, pero que cositas más tiernaz— escucharon una voz en la puerta. —No sabia que Suga hyung se dejaba hacer por un omega— ese era uno de los compañeros de Yoongi.

—Lo que vas a saber es que puedo despedirte...— gruño como su humor habitual.

—Perdón jefesito, no se esponje— contesto el otro. —Estoy aquí para escoltarlos, se han escuchado rumores de que andan un par de cabos sueltos aún, así que...— Yoongi negó.

—No es a mi a quien deben proteger, su trabajo será cuidar de el — tomo la mano de JiMin. —Si hace mal su trabajo le aseguro que sufrirá consecuencias— lo señalo.

—Pero la orden de Nam hyung fue...— la mirada seria de Yoongi hablaba por si sola. —Entendido jefe—

—Bien ahora vamos a la estación necesito ponerme al corriente con...— el menor negó.

—De eso nada, iremos hasta tu casa donde me aseguraré de que estés descansando como se debe—

—Pero...— trato de interrumpir.

—Pero nada, ahora vamos— tomo sus cosas para poder salir. El oficial trataba de ocultar una sonrisa al ver cómo su superior era reprendido.

—Una sonrisa más y me aseguraré de que tengas trabajo pesado por el resto de tus dias— aquellas palabras solo hicieron que el contrario se mantuviera serio aunque por dentro le encantaba estar viendo como su superior obedecía a un omega que parecía menor. Pero no podía burlarse, al menos no mientras el palido estuviera a la vista.

...

Era la primera vez que JiMin estaba en casa del mayor, todo parecía tener un orden, nada estaba fuera de su lugar.

—Wow— dijo al encender las luces que iluminaron todo y ver con más claridad.

—De verdad quiero ir al trabajo...— seguía con sus quejas, las cuales tuvo durante todo el trayecto.

—Y yo de verdad quiero que sigas las indicaciones del doctor y descanses los tres días que te indico— el menor hizo un puchero mientras tomaba más mejillas del mayor y dejaba un corto beso en sus labios.

—Si eso vamos a hacer mientras esté en reposo con gusto me quedo— dijo tratando de acercarse al rubio y dejar un beso pero le fue negado. —Pero...— se quejo.

—Te dare más besos cuando hayas tomado tus medicinas y comido algo— con aquellas palabras desapareció de la vista del mayor buscando la cocina de aquella casa, el pálido solo suspiro caminando a su habitación para recostarse, no lograría convencer a JiMin de dejarlo hacer otra cosa.

Ahora tenía mucho tiempo para pensar y poner en orden todo lo que rondaba su mente.

En primera instancia tenía que resolver el apego de el menor hacia el, no es que le molestara pero aún su mente seguía rondando la diferencia de edad, pero a final de cuentas era su predestinado, la pareja que la luna le escogió y el no estaba inconforme con eso.

—Parece ser que lo primero que necesito hacer es pedirle ser mi novio...— suspiro pensando en eso, era un gran paso considerando su historial de no citas que había mantenido hasta la llegada del rubio omega.

Con esa decisión tomada ahora debía pensar en su trabajo y lo que debía investigar, tal vez llamaría a NamJoon para que le pasara un informe.

Aunque para ello tuviera que esconderse un poco de JiMin y no descubriera que estaba trabajando.

Oh, su omega, nunca imagino que el lo aceptaría pero era imposible no hacerlo es por ello que la voz que le decía que estaba mal disminuía cada vez más y el estaba feliz por ello.

—Yoonie— entró el omega a la habitación —¿Estas bien?— el mantenía sus ojos cerrados, si no veía la tentación no la desearía.

—Si, solo descanso como el doctor dijo— le recordó sus palabras.

—Bien, la comida estaba en unos veinticinco minutos— señalo acercándose hasta el y moviendo los cabellos que cubrían su frente.

—De acuerdo. Esperemos— seguía sin abrir sus ojos.

—¿Quieres hacer algo para matar el tiempo?— pregunto el menor, podía sentir el aroma más cerca del rostro del pálido, pero se negaba a abrir sus ojos, o al menos lo intento porque fue vencido por si mismo teniendo a la vista al hermoso omega con una sonrisa.

—¿Que sugieres?— pregunto embelesado por el rubio.

—No se me ocurre na...— el mayor se apresuró a tomar la cabeza de contrario y acercarlo hasta sus labios.

—Veamos que tanta resistencia tienen estos labios— y sin resistir a estar un segundo más alejado el uno del otro probaron sus labios con tanta tranquilidad.

Enamorado De Mi ¿Predestinado? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora