Enamorado De Mi ¿Predestinado?

Capítulo 16

Días después.

Un ligero golpe en su espalda solo le hizo abrir más la boca para que el Alfa entrara con su lengua y juguetear más.

—Esto está tan mal...— murmuró el omega mientras seguía pasando sus manos por el cuello y cabello del Alfa.

—Lo se...— pero parecía que ninguno había podido resistirse a querer besar al contrario ni un segundo más, lo habían estado sintiendo día tras día pero hoy por fin se dejaron llevar.

—Deberíamos detenernos— pues a pesar de disfrutarlo aquello estaba mal y su conciencia le molestaba.

—Solo un poco más— pidió.

—No Taehyung — se quejo el omega.

—Pero Jungkook, ¿Acaso no lo deseas tú también?— pregunto mirando a los ojos del contrario, ¿Lo volvían loco? Podía decir que si, aunque aun tenía un poco de duda.

—Tal vez porque lo he deseado demasiado es que mi mente no me deja pensar claramente... Tae tu sigues cortejando a Hoseok...— y aunque lo evito no puedo hacer nada más con su voz quebrada.

—Pero...— se alejaron el uno del otro.

—¿Terminaras con él?— ahora la culpa de estar tomando el alfa de alguien más se instalo en su pecho.

—Yo...— ¿Debería decir que si? Su lobo pedía a gritos estar con Jungkook pero en su mente seguía rondando Hoseok y la manera en que lo lastimaría.

—Tal vez lo mejor es que no nos veamos hasta que tu mente esté aclarada — el omega se abrazo a su mismo alejándose lo más que podía del alfa —Por favor vete...— señalo la puerta de su habitación, debía proteger su corazón antes de salir más herido.

Sin poder decir nada más salió, cuando estuvo en la calle no puedo evitar soltar un gruñido de frustración.

—Vamos Taehyung, te está gustando Jungkook más de lo que lo hace Hoseok— así que con un arranque de coraje se encaminó hasta la casa del omega, su decisión parecía ser ya tomada.

¿Pero cómo había llegado hasta ese punto donde Jungkook se había metido en sus pensamientos?

Tal vez fue días atrás cuando fue a devolver su ropa y ver cómo seguía el tobillo del omega, tal vez fueron las risas que compartieron, tal vez fueron las tardes de juegos, tal vez fue su exquisito aroma, tal vez fueron sus ojos brillantes, tal vez fue su manera de comprender sus problemas, tal vez... solo tal vez... había sido Jungkook desde un principio, ¿Entonces por qué no podía cortar todo con Hoseok?

Porque ahora el hecho de que estuviera en su sala viendo un programa uno junto al otro le hacía sentirse mal con Kook, empezaba a tener sentimientos más fuerte por el él pero no quería lastimar a Hoseok a pesar de que ya lo estaba haciendo y Jin se lo había advertido en un principio.

—¿Quieres que ordene pizza?— pregunto el omega feliz de tener al alfa con el.

—No yo...— tal vez era momento de hablar. —Hobi... creo que es mejor terminar el cortejo — se puso de pie.

—¿Que?— eso tomo por sorpresa al omega. —Pero...—

—Lo lamento tanto por darte una esperanza de la cual no estaba seguro— desde un principio había sido su indecisión, tal vez había tomado a Hoseok cuando su primera salida con Jungkook fracasó pero ahora todo parecía ir mejor con el omega castaño.

—Pero tu eres mi predestinado...— le recordó, ¿Era culpa del destino que Hobi si pudiera percibir sus dos aromas, hace unos días había sido revelado aquello, pero el se había enamorado de Jungkook aunque este le había dicho que solo podía sentir uno de sus aromas.

—¿Crees que un corazón pueda decir de quien enamorarse sin que la luna lo haya decidido antes?—

—No, por eso la diosa luna creo a las destinado, para que se tengan el uno al otro, como tú y yo Taehyung— se acercó hasta el. —Tu y yo fuimos hecho para estar el uno con el otro— parecia que debía recordarle su destino.

—Hoseok...— ¿Podia ir en contra de esa naturaleza? —Yo creo que...— pero sus palabras fueron cortadas.

—Creo que solo estas confundido, intentemos, mi celo es en unos días si puedes vencer a ese instinto te juro que te dejaré ir aunque eso nos pueda doler a ambos— aquello no sonaba mal pero ¿Podía soportar estar con un omega en celo?

Solo esperaba que si... —De acuerdo— estaba firmando su sentencia.

Creo que es tiempo de que se acerque el final... o tal vez no...