👮🆘21

55 3 0
                                    

Ya está, no había otra opción.

Si quería volver a ver a Yuta, tendría que ir al lugar que los secuestradores le dieron. Sea como sea, si a él lo tuvieran que matar de la forma más horrible, no le importaba, con tal de salvar a su mejor amigo, de quien siente infinidad de sentimientos.

Taeyong reposaba en su cama. Del lado izquierdo tenía a Seulgi, abrazando su costado, y del lado derecho estaba Baekhyun, durmiendo boca arriba.

Por precaución todos se quedaron a dormir en casa de Taeyong, ya que la madre del peligris seguía en su estúpido trabajo que la dejaba preocupada por la seguridad de su hijo. Gracias al destino su hijo pudo conocer unas increíbles personas que ahora mismo se quedaron con él a cuidarlo.

Los demás, acostumbrándose a la dureza del suelo, pero sin quejarse ni un poco.

Toda la noche la pasó despierto, observando el techo, tratando de mentalizar su cabeza para lo que tenía que hacer ese día en la tarde noche. Lloró, no quería pensar en su muerte, no quería pensar en la muerte de nadie. Sufrió con el paso de las horas pero lo superó, quitándose las lágrimas de su cara con fervor.

En la hora del desayuno dos personas estaban despiertas. Taeyong y Nayeon.

Nayeon tenía una rutina mañanera de correr algunas cuadras y volver a bañarse y tomar un desayuno, preparada para lo que se venía.. pero con el panorama... No tenía ganas de pisar fuera.

Al cabo de las horas, se formó un mediodía lleno de ruido. Hyejin había puesto música a todo lo que da mientras Mark hacía la comida junto a Irene. Nayeon enojada por tanto barullo y Baekhyun hablando con Irene. Taeyong.. Taeyong se dio un baño de agua tibia y estuvo un largo rato allí, estaba disfrutando cada segundo como si fueran los últimos.

En la parte de la tarde, a eso de las seis menos cuarto PM, todos estaban durmiendo luego de un "agotador" día. Taeyong simplemente se hizo el dormido en su sillón y esperó a que todos durmieran. Algunos en su habitación y otros acompañándolo en la sala. Se levantó lentamente, y con pasos minuciosos salió de su casa.

"Lo siento chicos, lo siento de verdad" susurraba una y otra vez Tae, tomando el bus que lo dejaría más "cerca" del lugar.


Transexual | YutaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora