Melisa || John Murphy || PAUSADA

Capítulo 10: "P.E.M y Recuerdos"

Miré a Raven desde mi sitio, las ojeras bajo sus divertidos ojos y su sonrisa burlesca, todo en ella me hacía querer huir.

Así pasamos los primeros diez minutos, ninguna dijo nada.

Cosa verdaderamente sorprendente, puesto a que ni Clarke ni Jasper habían aguantado más de siete minutos con ella.

—Solo tu y yo, ¿eh?—La morocha rió.—Entonces pequeña Melisa, ¿Cómo lo harás?

—¿Como haré que?

—Salvarme, matarme quizá..—Soltó una risa seca, rodé los ojos.—Aunque te veo mucho mas capaz de la segunda.

—No te matare, Raven.

—Sigue repitiendo eso, quizá eso te convenza, pero siempre todo alrededor de ti termina igual.—Suspire, evitando contestarle, esto es justo lo que Alie quiere, desestabilizarme.—Aún recuerdo sus risas, ¿sabes?

El tono que empleó me hizo verla inmediatamente, sus ojos llorosos mirando al techo, su pecho se comprimía y supe que intentaba ahogar los sollozos.

—Aun recuerdo la risa de Finn, y sus manos y su cara...—Me miró por unos segundos antes de bajar su vista al suelo.—Y la recuerdo a ella, era tan bonita y tan llena de vida, aun no puedo creer que muriese..

No me di cuenta de que también lloraba hasta que sentí las lágrimas cayendo en mis manos.—Si, yo tampoco puedo creerlo, Raven.

—Ella no debía estar ahí, ella debía irse lejos con Scott, quizá vivir con algún que otro terrestre, con su hijo.—Sentí una punzada en el corazón.—Tu le arrebataste eso, Melisa. Y no solo se lo arrebataste a ella si no que a Scott también, ahora no tiene novia, no tiene hijo, solo le queda la asesina de Agatha.

—Cierra la boca.—La voz de Scott sonó tan fuerte que me hizo saltar en mi lugar, limpié mis lagrimas lo mas rápido posible pero con solo una mirada, sabía que él había estado ahí más tiempo del necesario.

Raven no contestó y en lugar de eso rió a carcajadas mientras intentaba zafarse las ataduras de sus muñecas. Me levanté de mi lugar y arrastre a Scott junto a mi, mientras le pedía a Bellamy que vigilara a Raven.

***

El tiempo volaba, Alo descansaba con su cabeza en mi regazo mientras que Scott y Graysonn hablaban a unos metros de nosotros, no había prestado mucha atención pero por lo poco que alcance a leer de sus labios, supe que hablaban de John.

Y ese era otro problema que no dejaba de rondar en mi cabeza, ¿Estaba bien? ¿O quizás ya estaba muerto?

Cerré los ojos unos minutos y visualice la primera vez que lo vi, había sido cuando aún estábamos en el arca, cuando decidí ayudarlo.

—¡La prisionera 567 escapó, ala oeste!—Un gritó detrás de mí se hizo audible para toda la terminal, corrí hasta dar con un guardia más que estaba aporreando a un chico desconocido para mí, decidí retrasarme y golpear al desgraciado, que cayó a mi lado retorciéndose, tome la porra y le di en el estómago.

—Espero que duela, maldito idiota.— Le hable mirándolo a la cara, tomé el brazo del chico y lo cargue contra mi, pero al momento de volver a correr noté que estaba rodeada, ambos dos.

Tomaron al desconocido por mí y lo empujaron contra la pared para retenerlo, pues comenzaba a gritar mientras golpeaba su muñeca contra la pared.

Sentí un pinchazo en la espalda, algún maldito guardia me había lanzado un calmante, volví a mirar al que aún se encontraba en el piso adolorido y se me nubló la vista, lo último que logré escuchar fue la voz del chico que aún gritaba que lo soltaran.

Un estruendo me hizo abrir los ojos, Alo se levantó enseguida y me ayudo a hacerlo también, cuando entramos a la habitación en donde Raven estaba la vimos desangrándose por las muñecas, sus heridas se habían abierto, más bien, ella lo había hecho.

Ahogue un grito de horror y me acerque a ella con cautela, tome sus muñecas con fuerza mientras ella se quejaba y se retorcía ante mi tacto.

Monty entró en la habitación con vendas y una botella en la mano, asumo que alcohol.

Apenas me las tendió, tome todo y con ayuda de Scott,Jasper, Alo y Graysonn la tuvimos y curamos.

—Estoy pensando seriamente en darle un puñetazo y dejarla inconsciente.—Comentó Jasper.

Solté una pequeña risa nerviosa, mientras me alejaba de Raven y dejaba las cosas en una mesa de la habitación.

—Me encantaría que lo hicieras Jasper..

—Estamos listos, lo que tenemos que hacer es conectarla y activar el electro-imán.—Sinclair entró en el cuarto seguido de los demás, exceptuando a Alo y a Niylah.

Me levanté de mi lugar a un lado de Scott y me acerque a Raven, que miraba asustada a todos, Sinclair mientras tanto destornillaba la pulsera para abrirla y los demás desataban las muñecas de la morocha.

Raven comenzó a darse la cabeza contra el metal detrás de ella, demasiado fuerte.—¡Intenta suicidarse!

—¡Sujetenla bien!

—¡Ya basta!

Octavia y Bellamy lograron sostenerla por detrás de la cabeza, impidiéndole volver a golpearse, por mi parte sostenía una de sus piernas mientras se removía escandalosamente.

—¡Hey Raven!—Le gritó Clarke.—Detente y te daré esto.

Todos miramos momentáneamente a Clarke, quien sostenía la flama, esa distracción fue suficiente para que Bellamy le cerrara la pulsera en la muñeca de la morocha quien luego de darse cuenta profirió miles de insultos a la rubia.—¡Me mentiste! ¡Mentirosa!

Oí a Jasper carraspear y alejarse cuando Raven comenzó a pedir por su vida.—¡NO! ¡Por Favor no lo hagan! ¡La PEM va a destruirme el cerebro!—Dudé un poco al ver a mi amiga tan alterada, pidiendo por su vida.—Por favor Sinclair sabes que no funciona, ¡Me mataran!

—¡No la escuches!—Me gritó Octavia a un lado.—¡Sostenla bien, anda!

—Solo habrá una oportunidad, el PEM quemara el brazalete también.

—Bien hazlo de una vez.

—¿Listo?—Monty asintió antes de encender la maquina, que solo profirió un par de sonidos.—¿Qué sucede?

—Nada. Necesitamos más potencia, la batería no tiene la suficiente energía.

—¡El jeep!—Grité para que todos me oyeran, Monty salió corriendo y decidí acompañarlo para ayudarle.

El frió congelo cada parte de mi cuerpo en cuanto salimos, abrimos el capó para quitar la batería cuando escuché algo extraño por encima de nosotros.

—¡Un dron!—Busqué mis armas alrededor de mi cinturón pero solo tenia el collar de Lexa y una cuchilla, y a la altura que el aparato estaba no podría darle.

Un disparo se escuchó detrás de mi, y vi a Bellamy con su arma en alto, le asentí en forma de agradecimiento antes de volver a sostener el capó del jeep.

—¡Listo, listo!—Monty bajo de un salto con la batería entre las manos y corrió dentro, seguido por Bellamy.

Cuando entre a la cabaña Alo quiso seguirme pero lo detuve.—Tu te quedaras aquí.

—Pero quiero ayudar.—Se quejo.

—Pues enserio ayudas a tu hermano y a mi a que no nos de un paro cardíaco si estás a salvo, escondido.

El grito ensordecedor de Raven hizo que entrara en la habitación, estaba inconsciente en la misma posición en la que estaba cuando salí, todos habían dado un paso atrás exceptuando a Octavia y Clarke.—Está respirando.

Aun así, esta no despertaba, ni con los grititos que Octavia pegaba ni con los leves golpes que Clarke le daba en la cara.

Raven no despertaba.