Capitulo 27|Mia, tienes los ojos...

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Pov'Jayden.

Bajo, se durmio en mi regazo, la desperté, le di la poción que se debía tomar más mi sangre, le mordí el brazo para inyectarle un poco de veneno y ahora a vuelto a cerrar los ojos, dentro de un rato se despertará según me a dicho Mikaela.

Agarro a Mia como una princesa y la acuesto en el sofá, apoyando su cabeza en mi regazo.

— No parece que quisieras dejarla.- Se oye la voz de Mikaela y dejo de mirar el rostro tranquilo de Mia, para mirar los ojos celestes de la bruja.

— A ella no.- Sentencio.- Jamás.

— Me lo prometistes.- Arrebata.

— Te fuistes.- Contrataco.

— ¿La quieres?- Pregunta, sentándose en en sofá de una sola plaza que hay enfrente.

— Muchísimo.

Antes de que ella pueda preguntas o decir algo, mi nana Esmeralda aparece en el comedor con mis padres detrás de ella.

— Señor Jayden, lo señores ya an llegado.- Avisa de lo que ya puedo ver.

— Hola, hijomio.‐ Sonrie y viene directamente hacia mi, pero al ver a Mia dormida se detiene y la mira con ternura.— Oh..se durmio.

No le digo nada sobre el tema de ser loba y asiento dándole la razón, luego ella se gira y mira a Mikaela.

— ¿Quien eres tu, bonita?- Pregunta dulcemente.

— Mikaela, amiga de Jayden.- Se presenta con una sonrisa.

Mi padre ni se digna ni a saludar, pero me da igual, ahora mismo tengo que estar vigilando a Mia como nunca antes.

***

El tiempo a pasado y Mia aun no a despertado, la he llevado a nuestro cuarto para que esté más cómoda y pueda descansar bien.

Acabo de bajar del cuarto, para ir hacerme un café y mientras me lo hago mi madre me comienza comienza hablar.

— ¿Y mi nuera?- Me cuestiona.

— En el cuarto.- Digo dándole un sorbo al café recie hecho y como os podéis imaginar, me quemó la lengua y el paladar.

Esto quema...

No aprendes...- Dice mi madre, cogiendo la taza que he dejado en la encimera.

Lo cambia a otro vaso y le pone un poco de leche fresca, después de un rato me vuelve a dar el café, pero esta vez templado y no quemando.

— Gracias, mamá.- Le agradezco el café.

— Cuando pueda ver a mi nuera, me avisas.- Dice y antes de salir de la cocina vuelve a hablar.— Espero y la trates bien, porque... yo no te he enseñado a maltratar a las mujeres.‐ Dice.

— Jamás, le pondría un dedo encima a Mia.

— Me alegra escucharlo.- Y con esas últimas palabras, sale de la cocina.

Agarro el café y vuelvo a subir al cuarto. Mia aún no a despertado así que me siento a un lado de ella y me tomo tranquilamente el café.

Las palabras que a dicho antes mi madre me preocupan, ya que por desgracia, cuando era pequeño el desgraciado de mi padre la maltrataba.

Hasta que fui lo suficiente fuerte y le encare, pero no valió para nada, porque cuando estaba apunto de matarlo, mi madre lo defendió.

Flasback.

— ¡Hijo de puta, sueltala!- Le grito al ver que está encima de mi madre.

Lo saco de encima de mi madre, lo tiro al suelo y me pongo encima de el para empeza a rebentarle la cara con mis puños.

— ¡Para!¡Para!¡Lo vas a matar!- Se escucha la voz de fondo de mi madre, pero la rabia es más fuerte y no le hago caso.— ¡Jayden, dejalo ya!- Grita todavía más fuerte.

Le hago caso y me levanto de el cuerpo casi inconsciente.

La miro atentamente, para que diga o haga algo, pero nada... y entonces hablo.

— Tantos años, viendo como te golpea y quieres que pare.- La miro incrédulo.

— Yo..yo..lo quiero.- Suelta de sopetón.

— ¿Lo quieres?- Asiente.— ¿A esa escoria?- Vuelvo a preguntar lleno de cólera y ella asiente con los ojos llorosos de haber llorado todo este rato.— Lo que quieras, pero, si te vuelve a poner un solo dedo encima...- Señalo a la escoria de mi padre y continuo hablando.— Lo mató.- Asiente frenéticamente y me voy, dejándolos a ella llorando y al el casi inconsciente.

Fin del flasback.

No le a vuelto a pegas o por lo menos no me he enterado, porque si me entero... ya puedo correr que ni la mismísima Diosa Luna lo salva.

— Umm...- Encuanto escucho ese ruido, miro hacia Mia y veo que está empezando a abrir los ojos.

— Hey, pequeña.- La llamo, para que se oriente y me mire.

Entreabre los ojos y me mira con confusión.

— Ja..Jayden.- Dice con algo de esfuerzo.

— Toma.‐ Le ofrezco el vaso de agua que acabo de servir de una jarra que hay en la mesita de noche.— Bebe.- Le ordeno suavemente, al ver que no bebe y ella obece y bebe un poco de agua.

Cojo de nuevo el vaso y lo dejo en la mesita, para luego ver los ojos de Mia.

A funcionado.... o eso parece.

— Mia, tienes los ojos...

Me interrumpe y habla.— ¿Que me pasa?¿Como los tengo?¿Me he quedado tuerta?Maldita bruja, sabia que me tenia asco...

Esta vez la interrumpo yo, al ver que no va a callar.

— Tienes los ojos de color amarillo.

— ¿¡De verdad!?- Grita ilusionada.

A funcionado.


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Os podéis para verla...aún no está mu avanzada, pero...esta chula.😊

😊

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