El cambio.
El no era así.
El va a cambiar.
Me decía a mi misma mientras me miraba al espejo, después de un ataque de sus celos.
- Vamos Elsa abre los ojos, el no te conviene -. Repetía una de mis amigas
- Pero.....yo lo amo y el a mí. El cambiará es...
Baje del auto con ayuda de Hiccup, después de comer el helado decidimos venir a casa rápido.
— Gracias. — agradecí.
Entramos a la casa, dejé mis cosas en el sofá, me recosté en sofá, estoy muy cansada.
— Amor prepara el almuerzo. — pidió.
— Voy. — me levanté del sofá.
Prepare el almuerzo, un spaghetti la boloñesa con jugo de naranja.
— Amor sientate, ya está todo listo. — dije poniendo la mesa.
— Ahora voy. — apagó la televisión y vino a la mesa.
Empezamos a comer.
— Hola bebé, ¿quieres que comamos más spaghetti? — hable con mi hijo.
— Ya basta Elizabeth y deja de hablar como estúpida.
— Lo siento, ya no lo haré. — me disculpe.
Seguimos comiendo en silencio. Odio admitirlo pero Hiccup aun no quiere a nuestro hijo.
— Iré a la habitación, tengo que terminar las tareas para mañana. — asentí.
Beso mis labios y se fue, ordene y lave los platos.
Todo estaba limpio, pensé en ir con Hiccup y hacer la tarea juntos pero mejor lo dejo tranquilo, tome los cuadernos y libros para hacer la tarea.
Al terminar, tome la libreta que aparte hace 3 meses, fue difícil conseguir los materiales para decorarla, pero vale la pena. Abrí el libro y pegue la foto de mi bebé.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Estoy tan emocionada solo faltan 5 meses para que mi bebé nazca. Acaricio mi vientre y me recuesto en el sillón.
— ¡Elizabeth! ¿Qué no piensas subir?— guarde rápido la libreta debajo del sillón y subí a la habitación rápido.
— ¡Voy!— avisé mientras subía.
Llegué a la puerta y suspiré.
Ojalá no esté enfadado.
— Lo lamento, estaba terminando las tareas. — me disculpe.
Hiccup esta en la cama sin playera ni pantalón solo en boxer.
— Acuéstate que quiero hacer el amor con mi mujer. — pidió asentí y me recosté a su lado.
Me beso con amor y necesidad. Comenzó quitando mi blusa para después desabrochar mi pantalón y quitarlo, subió mi sostén dejando uno de mis pechos al aire.
Gracias al embarazo mis pechos han crecido mucho, masajea mi pecho mientras me besa, dejo salir gemidos baja su mano recorriendo mi ya abultado vientre en dirección a mi parte íntima, acaricia mi sona sobre la tela de mi ropa interior, gemidos salen de mi boca.
— ¿Te gusta?
— Sí, si me gusta
— ¿Quieres que te folle? — asentí — Pídelo, pide que te folle.
— Por favor...Hiccup...follame. — dije con dificultad.
Sin previo aviso bajo mi ropa interior y entro en mi.
— Ahh — gemi de placer...
*****
En otro lugar
— ¿Estás segura que era ella?. — pregunto.
— Sí hermano, Elsa está embarazada la mento que yo tenga que decírtelo, pero, Jack tienes que olvidarla ella está con Hiccup y ya no puedes hacer nada. — trato de convencerlo.
— Creeme Emma, lo estoy tratando, pero no, no puedo. La amo y se que ella me ama, y apesar de que espere un hijo de ese maldito yo voy a pelear por ella, tan solo tengo que decirle la verdad y planear un plan para alejarnos de Haddock.
— No creo que sea capas de hacer algo contra Elsa o contra ti. —
— Ese maldito me amenazó y lo creo capas de todo para que Elsa este con el. Pero falta muy poco para que ella esté conmigo y ya veré qué hacer con el bebé que espera. — menciono.
— ¿De que hablas? ¿No piensas dejar que tenga a su bebé?— pregunto Emma teniendo la respuesta.
— Lo tendrá pero tal vez lo deje con su padre, ese bebé no es mío y no lo pienso mantener.— respondió algo disgustado con la idea que mantener un hijo que no es de el.
— Jack ella no dejará a su bebé, en el ultrasonido se veía en sus ojos como ama a ese bebé, si se lo quitas ella te odiara. — su hermano la vio sabiendo que decía la verdad.
— Ya veré qué haré pero, si una vez renuncie a ella dos veces ya no. — dijo muy seguro de sus palabras.
*****
Narra Hiccup:
Adoro hacer el amor con mi mujer y pensándolo bien quiero que no solo sea mía de palabra, quiero que sea mía ante la ley.
Le pediré que nos casemos en cuanto el bebé nazca para así poder tener una luna de miel buena ya que si nos casamos y ella está embarazada no podré hacerle el amor como Dios manda.
Abrazo a mi mujer ella está dándome la espalda pero así puedo abrazar su cintura y acariciar su espalda. Sin darme cuenta tocó su vientre y se siente muy bien, podría acostumbrarme.
— Hiccup amor.
— ¿Si? — pregunté.
— ¿Me puedes traer una sandía?
— Pero no hay sandías en la cosina. — reclamé.
— Por favor, quiero una sandía. — me miró con ojos tristes.
A esto no me puedo acostumbrar.
— Ya que, iré por tu maldita sandía. — reclamé tomado un pantalón y una camiseta para salir y conseguir su puta sandía.
— Y me traes mostaza por favor. — la mire asqueado.
— Si, ahora vuelvo. — dije tomando una chamarra y salí del cuarto.
¿Dónde mierdas conseguiré una sandía a las 12 de la madrugada?
