Obsession ©

09

Eliot pov

"Como se atreva a ponerle una mano encima" gruño golpeando el volante, no controlo lo que hago, me doy cuenta una vez que estoy fuera del auto, acechando en su puerta queriendo escuchar que él no le esté haciendo daño.

—No eres mi novio, dios, entiéndelo, no soy tuya — le escucho gritar a Effy, sonrío asintiendo.

Escucho unos ruidos — Entiende que no importa lo que digas, dime dónde carajos estabas — la voz de Cook y su actitud dominate con ella me hace enfurecer.

Suspiro cuando dejo de escucharlos, sé lo que hacen, se besan, casi lo puedo asegurar. Me alejo de su casa sintiéndome como un idiota ¿Qué me pasa? Lo que pase con Effy una vez fuera de mi consultorio no era de mi incumbencia...

Pero definitivamente no podía evitarlo.

(...)

Effy no tiene redes sociales...— sonrió mirando la pantalla de mi celular

—¿Effy quien? — Dylan a mi lado deja de beber su de su copa para mirarme —¿Tienes novia ya? —

Niego varias veces — No es nadie, nadie importante — le resto importancia y guardo mi teléfono para beber del vaso de whisky frente a mí. —¿Qué ha pasado con la chica de antes? ¿Kelsie? — pregunto recordando su nombre.

— Bueno has sido un imbécil con Emma su amiga — me mira mal, frunzo el ceño devolviéndole la mirada, le hago ceña al barman para que llené mi copa. — ¿Crees que eso le ha gustado? — bufa

— Te he dicho que ella no me interesa y aún así me arreglaste una cita  — niego.

Dylan se ríe con gracia pidiendo la botella — Claro me he dado cuenta de que no te interesa ella sino otra, mira como bebes hoy — llena mi vaso nuevamente mientras niega divertido.

Niego rápidamente luego de sentír el calor en mi garganta — No es lo que piensas — se ríe asintiendo — Estoy preocupado por una chica que conocí —

— ¿Ya te acostaste con ella o tiene novio?— pregunta mirando a una chica a lo lejos ignorando lo que le he dicho.

Niego rápidamente con los ojos muy abiertos, ni siquiera había pensado en eso, la tuve en mi cama, completamente dormida mientras le miraba dormir... Sacudo mi cabeza y bebo más, necesito dejar de pensar en ella.

(...)

— ¡Maldita sea! — golpeé el volante cuando nuevamente el semáforo se pone en rojo, estoy a una calle del instituto, me he quedado dormido, ni siquiera sé cómo llegué a casa, jodido Dylan y sus invitaciones a beber entre semana.

Logro dejar el auto en el estacionamiento luego de unos 15 minutos en tránsito.

— ¡Señor West! ¡Señor West! — la voz de Lucia de  3r grado me saca de mis pensamientos mientras busco las llaves de la pequeña oficina que me habían asignado.

— Lucia lo siento, se me ha hecho tarde hoy — me disculpo con la chica de gafas que hoy lleva el cabello suelto, ella sigue a mi lado cuando al otro lado del pasillo veo a Effy... Elizabeth recostada en uno de los casilleros mientras mira su teléfono.

Miró la hora en mi reloj ¿No debería estar en clases? Me detengo mirándola con disimulo, Lucia se pone frente a mí tapando mi vista de Elizabeth. Me habla de que ha intentado hablar con su madre y sentirse bien consigo misma, dice que se ha arreglado el cabello y muchas cosas más que no logro entender ya que veo a Elizabeth sonreír al teléfono.

—¿Señor West? — mueve su mano en mi rostro — ¿Conoce a la nueva? Dicen que la han echado de su antiguo colegio — me susurra acercándose, me alejo frunciendo el ceño.

— Me alegra que hayas podido conversar con tu madre  cómo te sientes, Lucia — le digo calmadamente — Ve a clases y no te saltes matemáticas ¿De acuerdo? — digo caminando hacia Effy.

Al parecer ella siente mi presencia porque levanta la mirada de su teléfono y lo guarda al verme.

—¿Llegando tarde? — me pregunta con burla mientras se cruza de brazos y señala mi maletín del trabajo.

— Al menos no me estoy saltando clases — le digo de igual forma.

Ella se ríe y eso me hace sonreír también, me quedo quieto cuando levanta su mano para pasar uno de sus dedos por mi mentón. — ¿Olvidaste rasurarte la barba? — ataca de vuelta.

Sonrio negando mientras pongo mi mano sobre mi rostro sintiendo el bello creciente de mi mandíbula. —¿Me queda mal? — me atrevo a preguntar, ella niega sin decir mucho más y eso me hace sonreír.

— ¡Mierda! Escondeme — me gira escondiéndose detrás de mi espalda, siento su mano en mi hombro y su rostro asomarse por encima de mi espalda.

— Te he dicho que no te saltes clases — le regaño — También que..—

El director habla con la secretaria por el pasillo del cual he venido antes   me ve y levanta la mano saludando — West, a ti te estaba buscando — dice avanzando hacia mi, derrepente siento un vacío en mi hombro, Elizabeth a corrido lejos de mí y siento su ausencia, de nuevo.