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Effy pov

De la nada su mirada se oscurició y su ceño se frunció por lo cual aparté mi vista de inmediato, se veia bastante alegre hablando con aquella morena, le habia guiñado un ojo de manera coqueta y desvergonzada. ¿De dondé habia salido ella?

Miré a Michael que como habia prometido antes me buscó en el descanso, me hablaba de las chicas que me habian molestado antes y de como funcionaban las cosas aqui. Se acercó a mi mientras me hablaba mencionando el color azul de mis ojos en este momento diferente al gris de esta mañana.

Desvié la mirada a donde estaba Eliot antes, ahora no me miraba a mi, miraba al pelinegro que estaba cerca de mi -¿Ya tienes grupo en la clase de deportes? -me preguntó Michael -El grupo de la profesora Beatrice ya esta lleno, pero como no, con lo buena que esta -dejé de mirar a Eliot para mirar a su acompañante que al parecer era la maestra de deportes.

-No me interesa estar en su clase -dije borde, aquella mujer era hermosa y miraba con emocion a mi psicologo -Parece que se quiere comer al psicologo de la escuela -dije mirandola mal.

Michael se rió de mi -Parecen cercanos, incluso el señor Eliot esta mirandome como si quisiera matarme solo por verla- le mire triste sin entender porque, Michael tomó mi brazo e hice una mueca apartandolo, me miró sin enteder y esta vez tomó mi mano.

Por alguna razon sentia la mirada de todos sobre nosotros mientras avanzabamos en la fila para comer, pero mi apetito (el poco que existia) se habia marchado al ver el cuerpo tan perfecto y atletico que poseia la maestra de desporte que almorzaba junto a Eliot West.

-¿Sabes? Creo que ya no tengo hambre -dije de forma neutral, ya no queria estar ahí, al mirar a mi alrededor notaba como algunas personas me miraban.

Michael hizo caso omiso a mi comentario y puso en su bandeja dos sanwchis con papas y dos latas de refrezco,

-¿Por qué no? -cuestionó curioso, no entendia porque él estaba intersado en mi -Queria saber si vendrias al partido de la proxima semana- dijo despues de sentarse en una mesa, esta vez Eliot y la maestra estaban a mis espalda.

Podia sentir una presion en la boca de mi estomago que me hacia sentir mal -Claro... -dije sin prestar atencion, Michael sonrió con suficiencia y empujó la bandeja hacia mi indicando que comiera, negué varias veces.

Podia adivinar cuantas calorias tenia solo el pan del sandwchi y superaban por mucho mi ideal -Deberias comer, aun falta media jornada -el pelinegro levantó su camiseta mostrando sus abdominales y señalando -¿Ves esto? Mucho entrenamiento y alimentacion -rodé los ojos, apesar de la excelente imagen que me estaba dando Michael parecia un idiota superfial.

-¿Eso te funciona con todas las chicas? -cuestioné cansada de ser amable en él día de hoy - Ya sabes, mostrar tus musculos y alardear de ellos -dije borde.

La sonrisa de Michael se enzanchó como con burla y me pregunté que pasaba por su mente -No tanto como a ti ser tan callada y malhumorada -se acercó lo suficiente para intentar robarme un beso y lo aparté en segundos -Eh, perdona, no lo he podido evitar -mordió su sandiwch y entonces senti la mirada de todos en nuestre mesa.

Sentí incomodidad y pánico solo de mirar a mi alrededor, me levanté de la silla con ganas de vomitar y llorar ¿Por qué carajos me sentia asi? Aun faltaban varios minutos para la siguiente clase, antes de cruzar la puerta de cafeteria Michael agarró mi brazo para jalar de el y senti dolor en los cortes de hace unas noches. -Que lo siento, no lo vuelvo hacer -se disculpó de nuevo, negué apartandome.

-Yo creo que la señorita Stone quiere que la deje sola unos minutos -la voz de Eliot me hizo levantar la mirada, pero me sentia enojada y de mal humor.

Huí como una cobarde hacia el baño, vomitando lo poco que tenia en el estomago, las lagrimas salieron de mis ojos y depues de tirar de la cadena solo me quede sentada intentando dejar de llorar,

"¿Y ahora por qué mierda lloras, pequeña basura?"

"Otra vez tan patetica, que asco"

Los pensamientos en mi cabeza no me ayudaban a calmarme, sentia mi corazon latir descontroladamente, las ganas de vomitar entraron en mi sistema nuevamente pero no habia nada que expulsar.

-Calma, calma -susurré para mi misma abrazandondome, el timbre sonó unos segundo distrayendome de mi jodida y patetica existencia.

"Que manera tan asquerosa de darte lastima a ti misma, Eff"

-Callate ¡Joder! -susurré para mi misma, no podia calmarme, no podia dejar de sentir mi corazon latir con fuerza y a la vez sentir mis temblorozas manos.

Tomé mi mochila encontrando el paquete de pequeñas navajas ¿Por qué no podia dejar de sentirme tan pequeña e insignificante? Suspiré aun con las manos temblorosas mientras descubria mi brazo tapado por la sudadera, no habia mucho espacio para otra linea ya que solia cortarme para carlmar mis ataques de panico, acerqué el filo de la cuchilla a mi palida piel con marcas rojas mientras mis manos batallaban para quedarse quietas.

-Elizabeth - la voz gruesa de aquel entrometido apartó el silencio de mi alrededor.

-Largate -rugí de imediato, Eliot estaba fuera del cubiculo en el que yo estaba encerrada, volvió a hablar llamandome por aquel estupido nombre y golpeé con mi pie la puerta con fuerza.

Escuché su respiracion lenta y profunda y por un momento desee que mi vida estuviera llena de tanto autocontrol, la cuchilla resbaló de mis manos hacia el suelo haciendo que soltara una maldicion -Effy, no lo hagas -pidio en un susurró al escuchar el metal contra el suelo del ordinario baño, apreté mis ojos con fuerzas, lo que faltaba, desperdicié todo mi esfuerzo pareciendo sana para que ahora me pillara haciendo esto. -Venga, sal y hablamos un minuto -

Suspire harta y cansada de lidiar con él, abrí la puerta y su mirada viajó a la cuchilla a mis pies - Ve y molesta a tu chica de deportes -dije borde mirandole -A mi dejame en paz -

Eliot se rie y eso me hace enfurecer -¿Y tú? Primero es Cook y ahora este tipo - dice contando con sus dedos y lo miro mal -De verdad que no te entiendo ¿Estas celosa?- preguntó lo ultimo y paso la mano por su rostro arrepentido.

-La que no entiende soy yo - dice ruborizada - ¿A ti que más te da a quien me follo? ¿Es parte de tu trabajo? - cuestiono con gracia.

-Te estas comportando como una niña, Elizabeth - me señaló con el dedo mientras intentaba no elevar la voz.

Gruñí, ahora no solo me llamaba Elizabeth sino niña, me levanté saliendo del cubiculo y acercancome a él -¿Ahora me llamas Eliabeth? ¿Qué te pasó? ¿Perdiste las jodidas neuronas hablando con la de deportes?... -

Y entonces, el silencio invadió el baño de las chicas en aquel ordianario instituto porque Eliot, el jodido psicologo presionaba sus labios contra los mios manteniendome en silencio, sosteniendo con sus grandes manos mis mejillas. Y entonces... Entonces no podia diferenciar los latidos de mi corazon indicado algo bueno o algo muy malo, Eliot West se encontraba besandome.



Excelente dia para ser besada por tu psicologo ¿No?

¡Primer capitulo de la semana! ¡por favor votar y comentar! <33

Obsession ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora