Akira salió lo más rápido de esa habitación dejando atrás a Izana y Kakucho, pues sentía que en cualquier momento empezaría a matar personas y no quería dar un espectáculo, no ahí, no ahora.
Cuando estuvo al aire libre notó como sus manos temblaban sin parar, mierda.
—Maldita sea, tienes que controlarte, maldición.— repetía mientras sus puños terminaban en la dura pared de concreto que tenía detrás suyo.
Al estar tan sumergida en su nube de panico no notó como cierta persona se le acercaba.
—Hey, Akira, ¿qué te ocurre?— preguntaron y ella solo escuchó un murmullo lejano.
— Vete al infierno y dejame sola, maldito. Claro si no quieres que te corte la puta cabeza.—decía la pelinegra mientras trataba de hacer que su repentina ira desapareciera.
—Hey, tranquila, soy yo, Baji.—dijo el pelinegro mientras la tomaba de los hombros para que la chica se tranquilizara, pero al ver que esto no funcionaba supo que era lo que estaba pasando, la pelinegra estaba sufriendo de esos ataques de pánico que el ya había presenciando años atrás.
Baji empezó a ver como la chica trataba de regular su respiración así que decidió ayudarla.
—Muy bien, respira profundo.— pidió Baji—. Lo estás haciendo muy bien.
La pelinegra pudo tranquilizarse aunque sus manos seguían temblando, cuando se percató de la presencia del pelinegro, habló.
—¿Qué haces aquí?— preguntó la pelinegra mientras evitaba la mirada insistente de Keisuke pues no le gustaba que alguien más se diera cuenta de que a veces sufría de esos ataques, frutos de su pasado, solo la hacían lucir débil.
—Hey, no tienes que evitar verme. Te he visto sufrir ataques peores.—respondió el pelinegro que ya sabía lo que pasaba en la cabeza de la chica—. Y sabes que sufrir de esos ataques no te hace alguien débil, así que mírame y dime que fue lo que pasó.—demandó Baji pues el sabía que su amiga no sufría los ataques así nada más, siempre había algo o alguien que los ocasionaba.
—Sabes qué estoy con Kisaki ahora, ¿no?— preguntó Akira a lo que el pelinegro asintió con un poco de molestia.— Sabe sobre él.
—¿Qué? ¿acaso hablaste sobre el con ellos?— preguntó sorprendido Keisuke puesto que el sabía que desde que el ya no estaba la pelinegra se había en cargado de desaparecer toda información sobre el, desde su acta de nacimiento, hasta...
—No, Hanma lo averiguó.— respondió Akira fríamente.
— ¿Le contaste a Hanma?— preguntó desconcertado el pelinegro, a lo que su amiga frunció su ceño notablemente.
— ¿Crees que soy tan imbecil para hablar sobre eso con el? Eres un idiota, igual que Izana y Kakucho.— respondió ya harta de la situación.
—¿Izana y Kakucho? ¿ellos están aquí?— preguntó Baji, a lo que la pelinegra asintió llevándose una mano al puente de su nariz para masajearlo.
El pelinegro iba a hablar pero se vio interrumpido por dos personas que llegaban hacía ellos.
— ¿Baji? ¿qué haces con mi hermana?—dijo Izana mientras se acercaba a ellos junto a Kakucho.
—¿Qué? nada, solo hablábamos.—respondió Baji un poco temoroso ya que sabía que aquel hombre frente a el podría cortarle las bolas si se acercaba a su hermana con segundas inteciones.
— Oh, ya veo.—dijo Izana mientras miraba con sorpresa a los dos pelinegros.— Entremos, hay que hablar.
Los cuatro se adentraron de nuevo a la residencia para ir hacía un lugar apartado de las personas. Cuando llegaron Akira fue la primera en hablar.
ESTÁS LEYENDO
𝐑𝐞𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞 | 𝐁𝐚𝐣𝐢 𝐊𝐞𝐢𝐬𝐮𝐤𝐞. [Editada]
FanficCada vez que sus miradas chocaban sentían como el fuego corría por sus venas quemando hasta en lo más profundo de ellos, pero ella estaba siendo asechada por demonios del pasado, ¿el la ayudaría o huiría? --- ...